Hilux vs Poer : ¡Increíble Batalla: ¿Podrá la China Poer Humillar a la Legendaria Hilux en Perú?

1. Resumen general del vehículo – Hilux vs Poer

Toyota Hilux 2021+ (Octava generación, facelift): Es una pick-up mediana japonesa de reputación legendaria por su durabilidad. Ofrece un enfoque robusto orientado tanto al trabajo pesado como al uso mixto. La Hilux destaca por su fiabilidad mecánica comprobada, chasís reforzado y amplia trayectoria en el mercado peruano desde hace décadas. Tras su renovación 2021, incorporó mejoras en motor y equipamiento, manteniendo su esencia utilitaria. Es el modelo preferido en flotas y usuarios que priorizan resistencia, con un alto valor de reventa y demanda sostenida en el país. Su precio nuevo ronda los $30–40 mil según versión, siendo una inversión significativa pero respaldada por la confianza en la marca Toyota.

Toyota Hilux 2021 (facelift). La Hilux es reconocida por su robustez y confiabilidad legendaria, manteniendo alta demanda en Perú incluso como vehículo de segunda mano.

Great Wall Poer 2021+: Es una pick-up mediana de origen chino (GWM) introducida recientemente al mercado local como alternativa más económica y tecnológica frente a rivales tradicionales. Se caracteriza por un diseño moderno, gran equipamiento de confort y elementos generalmente encontrados en pickups de gama alta (ej. tapicería de cuero, tablero digital, cámara 360°). La Poer busca atraer al usuario particular ofreciendo mayor tecnología por menor precio (desde ~$19 mil USD nueva) en comparación con las japonesas. Si bien Great Wall carece de la trayectoria de Toyota, ha ganado terreno: en Chile, por ejemplo, la Poer se posicionó 3ª en ventas de camionetas a abril 2025. Su propuesta se enfoca en comodidad para uso personal, con capacidades de carga ~1 tonelada y aptitudes 4×4 suficientes para aventuras, aunque su confiabilidad a largo plazo aún se pone a prueba en el mercado. En resumen, la Hilux encarna la apuesta segura y ruda; la Poer, la opción innovadora y accesible para quienes buscan una camioneta moderna de uso particular.

Great Wall Poer 2021. La pick-up china apuesta por un diseño atractivo y equipamiento elevado (pantalla 9”, interior tipo SUV) para competir con las marcas tradicionales en Perú.

2. Especificaciones técnicas clave

A continuación, se comparan las especificaciones técnicas principales de la Hilux (2021+) y la Poer (2021+) disponibles en Perú:

EspecificaciónToyota Hilux 2021+Great Wall Poer 2021+
Motorización típica2.4 L Turbo diésel (4 cil. 16V) – 2GD (148 HP, 400 Nm). Versión alta: 2.8 L Turbo diésel – 1GD (~201 HP, 500 Nm)2.0 L Turbo diésel (4 cil.) – GW4D20M (160 HP, 400 Nm). (Desde 2024 también opción 2.4 L Turbo)
TransmisiónManual 6 velocidades o automática 6 velocidades; tracción 4×2 o 4×4 seleccionable (según versión).Manual 6 velocidades o automática 8 velocidades (orig. ZF) con tracción 4×2 o 4×4 (según versión).
Dimensiones (LxAnxAl)~5.29 x 1.80 x 1.79 m; Distancia entre ejes: 3.08 m. Ángulos off-road: 29° ataque, 25° salida.~5.41 x 1.93 x 1.88 m; Distancia entre ejes: 3.23 m. Más larga y ancha que Hilux (espacio cabina mayor).
Capacidad de carga~1,000 kg (varía: ~920 kg en doble cabina 4×4 SRV). Plataforma de carga con ganchos; sin escalón integrado.975 kg en versión doble cabina. Incluye recubrimiento protector de fábrica y escalera retráctil integrada en el portón trasero.
SuspensiónDelantera independiente; Trasera de eje rígido con ballestas (hojas) – enfoque en carga. Dirección asistida hidráulicamente (radio de giro ~6.4 m).Delantera independiente; Trasera eje rígido con ballestas (tuneada para más confort). Dirección asistida eléctrica con 3 modos de dureza ajustables (manejo urbano más suave).
FrenosDiscos ventilados delanteros / tambor trasero; ABS + EBD estándar.Discos en las 4 ruedas con ABS/EBD – mejora notable en frenado (47,2 m de 100 a 0 km/h, según test).
Seguridad pasivaHasta 7 airbags (frontales, laterales, de cortina + de rodilla conductor en versiones altas). Carrocería con jaula de seguridad; cinturones 3 pts y anclajes ISOFIX en doble cabina.Hasta 6 airbags (frontales, laterales y de cortina) en versión full. Estructura reforzada; cinturones 3 pts/ISOFIX en posterior. No tiene airbag de rodilla.
Seguridad activaControl de estabilidad (ESP) y tracción en versiones 4×4; asistente de arranque en pendiente; frenos ABS. Calificación Latin NCAP: 5 estrellas (vehículos desde 2019 con 7 airbags). Algunas versiones recientes incorporan Toyota Safety Sense (no en modelos 2021 base).Control de estabilidad (ESP) estándar; asist. arranque en pendiente y control de descenso. ADAS avanzados en versión Premium: alerta y asistente de carril, monitoreo de punto ciego, frenado autónomo de emergencia con detección de peatones, control crucero adaptativo, reconocimiento de señales, etc. No cuenta con prueba Latin NCAP aún, pero obtuvo 5 estrellas ANCAP (Australasia) tras mejoras.
Consumo y emisiones~8–9 km/L ciudad, 12–14 km/L en ruta (estimado 2.4L). Diesel Euro V con DPF (filtro partículas) – menor CO₂ que motor gaso, pero emite NOx/partículas (DPF quema hollín periódicamente).~8–10 km/L ciudad, 11–13 km/L ruta (estimado). Diesel Euro V con DPF (algunos reportes de fallas en regeneración). Consumo similar a Hilux; sin versión híbrida ni a gasolina en 2021 (para 2024 se introdujo opción 2.4 gasolina).

Fuentes: Ficha técnica Toyota Perú; Autocosmos (Hilux 2.4); Neoauto/Great Wall; Parabrisas (Prueba Poer); Latin NCAP; ANCAP.

3. Rendimiento y manejo

Poer vs hilux en carretera

Toyota Hilux: En carretera y terreno off-road, la Hilux ofrece un manejo sólido pero de sensación “dura”. Su motor 2.4 turbodiésel (150 HP) entrega aceleración suficiente para un uso normal, con buen torque desde bajo régimen (399 Nm @ 1600–2000 rpm) para mover carga o trepar pendientes. La versión 2.8L brinda mayor potencia (~200 HP) mejorando recuperaciones y sobrepasos, especialmente notable tras el facelift 2021. La tracción 4×4 con reductora le da destacada capacidad todoterreno; combinada con 27 cm de despeje y ángulos favorables, la Hilux supera caminos difíciles con facilidad. La dirección (hidráulica) es firme; el radio de giro es adecuado (≈6.4 m), aunque en ciudad se siente menos maniobrable que SUVs ligeras. En conducción diaria sin carga, la suspensión trasera de ballestas transmite vibraciones y brincos en caminos irregulares, característica común de pickups orientadas al trabajo. Este andar más rígido es el precio de su alta robustez y capacidad de carga. No obstante, con peso en la tolva la marcha se estabiliza y la Hilux se siente más aplomada. Los frenos (discos adelante, tambores atrás) ofrecen distancias de frenado correctas, aunque inferiores a un sistema de 4 discos como algunos rivales. En suma, la Hilux maneja como una “trooper” confiable: desempeño predecible, aptitudes off-road sobresalientes, pero con refinamiento limitado en comodidad de marcha.

Great Wall Poer: Sorprende con un manejo más orientado al confort. Su motor 2.0 turbodiésel (160 HP) es algo más pequeño pero ofrece torque similar (400 Nm) al de Hilux, resultando suficiente para mover sus ~2 toneladas, aunque con aceleración levemente más lenta que el 2.8L de Toyota. La Poer destaca por su dirección eléctrica de asistencia variable, extremadamente suave en maniobras urbanas y estacionamientos. El conductor puede incluso ajustar la sensibilidad de la dirección en tres niveles (ej. modo Comfort vs. Sport), una característica inusual en este segmento que mejora la experiencia urbana. En carretera abierta, la Poer brinda una marcha estable; su mayor distancia entre ejes (3.23 m) contribuye a buen aplomo en línea recta. La suspensión, si bien sigue siendo de ballestas atrás, está calibrada para comodidad del ocupante: absorbe bien las irregularidades pequeñas, aunque puede sentirse saltarina en empedrados pronunciados debido al rebote inherente del eje rígido. En pruebas publicadas se observa que el frenado de 100 a 0 km/h en ~47 m es competitivo gracias a los frenos de disco en las 4 ruedas. La tracción 4×4 con caja reductora de la Poer cumple en off-road ligero o mediano; puede transitar trochas y lodo moderado, aunque su menor reputación en situaciones extremas hace que los usuarios sean más cautos al exigirla. En resumen, la Poer ofrece un manejo más suave y amigable para uso diario, con tecnología de asistencia que alivia el esfuerzo del conductor, a costa de un desempeño off-road aún por comprobarse al nivel “extremo” de la Hilux. Para un usuario promedio, la Poer se siente más cercana a conducir un SUV moderno, mientras la Hilux conserva su carácter de herramienta de trabajo en el volante.

4. Fallas mecánicas y eléctricas comunes

fallas mecanicas great wall POER  y hilux

Toyota Hilux: A lo largo de los años ha demostrado ser muy confiable, pero no está exenta de problemas reportados por usuarios. En modelos recientes (2021+ con motor GD Turbo Diésel) se registran inconvenientes con el sistema DPF (filtro de partículas diésel): si el vehículo se usa principalmente en trayectos cortos o a bajas RPM, el DPF puede obstruirse y requerir regeneraciones frecuentes. Usuarios han reportado tener que forzar regeneraciones manuales repetidas veces desde ~70,000 km, e incluso ingreso de olor a escape en cabina cuando el DPF falla. Toyota actualizó el software y añadió un botón de regeneración en algunos modelos para mitigar esto, pero sigue siendo una falla conocida. Otro punto débil histórico son los inyectores diésel en motores common-rail: con combustible de baja calidad pueden carbonizarse o presentar desgaste prematuro (especialmente en Hilux de generaciones anteriores, p. ej. 2005–2015). De hecho, “pérdida de potencia” y problemas de inyectores figuran entre los reclamos más comunes en Hilux de todas las épocas. También se mencionan casos de dificultad de arranque (motor de arranque o bujías de precalentamiento gastadas). En la parte eléctrica, la Hilux suele ser sencilla, aunque algunos han reportado fallos en módulos como el relé de la bocina/airbag o fusibles quemados (especialmente al instalar accesorios no originales). Finalmente, en unidades con mucho uso off-road, es posible el desgaste prematuro de bujes de suspensión y amortiguadores, manifestándose ruidos o vibraciones en camino irregular. En general, son fallas puntuales considerando la gran cantidad de Hilux en circulación; la camioneta tiene fama de “indestructible”, con costos de reparación razonables y amplia disponibilidad de repuestos cuando algo falla.

Great Wall Poer: Al ser un modelo relativamente nuevo, su lista de fallas comunes aún se está descubriendo. Sin embargo, se han identificado tres áreas problemáticas principales según foros de propietarios: (1) la caja automática – algunos dueños informan tirones, resbalamiento de marchas o mensajes de error en las Poer con transmisión automática de 8 velocidades, a veces solucionados con reprogamación de software o cambios de sensor en garantía; (2) el sistema de infoentretenimiento – se mencionan fallos en la pantalla táctil o en la cámara 360°, como reinicios aleatorios o desconexiones de Bluetooth; (3) el sistema DPF – al igual que en otras marcas, algunas Poer presentan alertas de filtro particulado lleno a pocos kilómetros, requiriendo regeneraciones forzadas o incluso un reemplazo temprano del filtro. Adicionalmente, usuarios han reportado que la calidad de algunos componentes menores no es óptima: por ejemplo, vibraciones o ruidos en cabina a ciertas RPM, focos LED que se queman prematuramente, o sensores (de estacionamiento, presión de neumáticos) que dan lecturas erróneas ocasionales. En los sitios de quejas, los problemas más comunes de la Poer registrados incluyen: “se apaga el motor súbitamente”, “fallas del sistema eléctrico”, dificultad de encendido (botón start/stop parpadeando) y avisos de error de 4×4. Por ejemplo, se documentaron al menos 7 casos de apagado inesperado en marcha, a veces atribuidos a sensores defectuosos o actualizaciones de ECU pendientes; también 6 casos de fallas eléctricas diversas (p.ej. fusibles, relés de computador) y 5 casos de problemas de arranque. Una falla particular reportada en Poer mecánicas es el desgaste del cilindro de embrague: en Perú, un propietario indicó que el cilindro maestro de embrague de su Poer 4×4 mecánica presentó fugas y quedó inoperativo alrededor de 70,000 km, y que el distribuidor negó el cambio en garantía. Esta queja sugiere un posible punto débil en la versión manual bajo uso severo. En resumen, si bien muchos usuarios no han sufrido grandes problemas, la Poer muestra fallas iniciales típicas de un modelo nuevo, sobre todo en electrónica y afinamiento de componentes, que requieren atención de la garantía. Es esperable que Great Wall vaya corrigiendo estos detalles en sucesivas revisiones (muchos casos parecen resolverse con updates de software o refuerzos de piezas).

5. Reclamos frecuentes de usuarios

Quejas de usuarios de poer y hilux

En la era de las redes sociales, es fácil recopilar opiniones y quejas de los propietarios. A continuación se resumen reclamos frecuentes de usuarios reales de Hilux y Poer (2021+), con base en comentarios en foros, TikTok, Facebook y YouTube:

  • Hilux – Suspensión rígida y confort: Un reclamo constante entre propietarios particulares es la dureza de la suspensión de la Hilux cuando está descargada. Varios usuarios en redes indican que “es saltarina en ciudad y caminos bacheados”, lo cual coincide con su configuración orientada a carga. Aunque esperable en una pick-up, quienes migran desde autos o SUVs lo notan negativamente. Sin embargo, muchos admiten que se soluciona colocando algo de peso o mejorando amortiguadores. Otro aspecto mencionado es el nivel de equipamiento interior: algunos compradores hubieran deseado que, por el precio, la Hilux incluya más comodidades (ej. aire acondicionado automático, más USB, tapizados más refinados), especialmente en versiones de entrada. “Toyota es garantía, pero viene básica” resumen en algunos foros, comparándola con competidores que ofrecen más gadgets por el mismo precio.
  • Hilux – DPF y alertas de motor: Como se señaló, numerosos usuarios han compartido en Facebook/TikTok su frustración con la luz de advertencia del DPF encendida. Videos en TikTok muestran procedimientos para forzar la regeneración cuando el indicador de DPF no se apaga. También en foros como Opinautos se leen testimonios: “Tuve que regenerar el DPF 8 veces y limpiarlo 6 en el concesionario” comenta un argentino con Hilux 2018, mientras otro señala el elevado costo de cambiar el filtro fuera de garantía. Aunque la situación parece afectar a una minoría (usualmente por mal uso del vehículo para trayectos cortos), se ha convertido en un tema frecuente en comunidades de pickups modernas.
  • Hilux – Pequeños fallos corregibles: Otros reclamos aislados incluyen: vibraciones en la columna de dirección o en pedales (a veces relacionadas a neumáticos desbalanceados de fábrica), ruidos de viento a alta velocidad en versiones con accesorios (ej. snorkel o deflectores), y en unidades muy nuevas, algunos casos de filtración de agua en cabina (ej. por burletes mal alineados, resueltos en garantía). Cabe mencionar que, dada la popularidad de Hilux, en grupos de Facebook muchos usuarios buscan soluciones para personalizar o mejorar aspectos menores – p.ej., instalar espuma para reducir el ruido de la tapa de la tolva, cambiar los parlantes estándar por unos de mayor fidelidad, etc. En general, los reclamos públicos hacia Hilux suelen ser menos graves y más relacionados a expectativas de confort que a fallas graves: la comunidad tiende a reconocer que el vehículo “es espartano pero no falla”, atribuyendo su éxito a esa confiabilidad aunque sacrificando lujos.
  • Poer – Calidad de acabados y detalles: Los primeros compradores de la Great Wall Poer han elogiado mucho su equipamiento, pero también han señalado deficiencias en acabados. Un comentario con muchos “me gusta” en YouTube resume: “Tengo una Poer tope de gama… lo malo es la calidad de la pintura, ¡horrible!”, indicando que la capa de pintura sería delgada o delicada, susceptible a rayarse con facilidad. Varios propietarios concuerdan en foros que la pintura y el barniz no tienen la misma resistencia que en pickups japonesas, por lo que recomiendan aplicar recubrimientos protectores. Asimismo, se han publicado quejas de ruidos interiores: algunos escuchan crujidos en el tablero o en los forros de puertas al pasar por baches, atribuibles a plásticos de ajuste imperfecto. Estos ruidos suelen aparecer tras pocos miles de km, lo cual decepciona a quienes esperaban nivel “Toyota”. En contrapartida, hay usuarios que han desmontado paneles y colocado espumas aislantes, reportando mejoría – es decir, son solucionables, pero implican un esfuerzo extra del dueño.
  • Poer – Servicio postventa y garantía: Un reclamo que se ha vuelto frecuente en grupos de Facebook de Great Wall Perú es la respuesta del servicio técnico ante fallas. Por ejemplo, el caso del cilindro de embrague mencionado: el usuario afectado publicó su molestia porque el representante (Derco) no reconoció el cambio en garantía, calificándolo de pieza de desgaste. Otros comentaron haber tenido que esperar varios días por repuestos específicos no disponibles de inmediato (aunque finalmente entregados). No obstante, también existen muchos comentarios positivos de usuarios satisfechos con la atención; el blog AbogadoMotor destacó que contra sus expectativas iniciales, no recibió prácticamente comentarios negativos de la Poer en sus redes, a diferencia de otras camionetas chinas. Esto sugiere que si bien hay reclamos, la mayoría de propietarios nuevos están contentos o al menos sus problemas han sido resueltos sin escalar. En redes como TikTok, algunos propietarios muestran sus Poer modificadas con orgullo, defendiendo la marca. Por ejemplo, frente a críticas de que “por ese precio mejor una Hilux usada”, responden resaltando los features modernos y que hasta ahora “no me ha dado ni una falla grave”. Con todo, los reclamos más frecuentes en la Poer giran en torno a: fallas menores de electrónica (sensores, alarmas falsas), calidad de pintura, y preocupación por la disponibilidad de repuestos en el futuro. Aún no hay reportes masivos de fallas catastróficas de motor o transmisión, lo cual es buena señal para un modelo relativamente nuevo.

6. Durabilidad y confiabilidad

Toyota Hilux: La Hilux se ha ganado su reputación de confiabilidad a pulso. Su nombre es prácticamente sinónimo de durabilidad extrema – famoso es el caso de Top Gear donde una Hilux viejo siguió funcionando tras todo tipo de maltratos. En el contexto peruano, esta camioneta es habitual en minas, construcción y la selva, operando en condiciones severas durante años. Esto ha generado una confianza tal que muchos dueños afirman que “una Hilux te dura toda la vida”. La ingeniería probada de su motor y chasis le permite alcanzar altísimos kilometrajes (200k+ km) con relativamente pocos inconvenientes de motor o tren de transmisión, siempre que se mantenga adecuadamente. De hecho, la fiabilidad legendaria es uno de sus mayores atributos según la prensa especializada. Toyota respalda esto con una garantía sólida (en Perú, 5 años o 150,000 km). Además, las piezas genuinas Toyota son conocidas por su calidad; incluso unidades antiguas de Hilux aún operan con sus componentes originales. Un indicador de confiabilidad es la fuerte demanda de Hilux seminuevas: muchos compradores confían en un Toyota usado más que en otro nuevo de marca menos conocida. No obstante, la Hilux no es indestructible – ya mencionamos posibles fallas en inyectores o DPF –, pero la ventaja es que cuando algo falla, suele ser reparable fácilmente. La amplia red de servicio Toyota en Perú y la abundancia de repuestos (originales y alternativos) incluso en provincias, garantizan que una Hilux difícilmente quede fuera de operación mucho tiempo. En resumen, la Hilux destaca sobremanera en confiabilidad: aguanta abuso, el paso del tiempo y mantiene desempeño consistente, atributos críticos para quien valora un vehículo “para todo terreno” en el largo plazo.

Great Wall Poer: Al ser un modelo relativamente nuevo (3-4 años en el mercado), su durabilidad a largo plazo aún está en evaluación. No cuenta con décadas de histórico como la Hilux, pero las señales iniciales son positivas con salvedades. En Chile –uno de los mercados con más Poer vendidas hasta ahora– la camioneta se posicionó bien en ventas y “a la fecha, el resultado es positivo”, con una gran cantidad de comentarios favorables de propietarios según reportó AbogadoMotor en 2025. Muchos dueños elogian la robustez percibida del chasis y la suspensión; varios han utilizado la Poer en rutas difíciles (ej. trochas andinas, arena de playa) con buen resultado, sin grietas de chasis ni fallas estructurales. Great Wall ha mejorado la calidad respecto a generaciones previas (como la Wingle), y eso se refleja en que la Poer no ha presentado fallos graves generalizados de motor o caja en sus primeros años. No obstante, la confiabilidad percibida aún es menor que la de Hilux, simplemente porque la marca es nueva para muchos. Algunos propietarios manifiestan dudas sobre cómo la Poer envejecerá después de 5-10 años: ¿surgirán problemas eléctricos serios? ¿Corroerá la carrocería más rápido? Son incógnitas que solo el tiempo aclarará. Por lo pronto, Great Wall ofrece una garantía de 3 años o 100,000 km (inferior a la de Toyota), lo que sugiere una expectativa razonable de vida sin fallas mayores en ese periodo, pero quizá prudencia de la marca al no extenderla más. Un punto a observar será la retención de solidez de la cabina: la presencia de numerosos componentes eléctricos (sensores ADAS, módulos electrónicos) podría significar más puntos potenciales de fallo con los años – algo que los vehículos sencillos de antes no tenían. Dicho esto, la base mecánica (motor 2.0 y transmisión) es de diseño relativamente sencillo y viene utilizándose en otros modelos de GWM, con buenos resultados conocidos en mercados asiáticos. Por ejemplo, en Australia la “GWM Ute” (misma Poer) obtuvo 5 estrellas ANCAP en seguridad, lo que implica que su estructura es sólida. En conclusión, la Poer apunta maneras de ser confiable, pero aún debe probarse en el largo plazo. Quienes la poseen en Perú por 1-2 años reportan satisfacción en general, pero habrá que ver en 2026+ si mantiene esa calificación. Por ahora, es alentador que no existan alertas rojas de fallos críticos – la mayoría de problemas se han resuelto – pero la Hilux todavía lleva ventaja en la confianza “ciega” que inspira por su trayectoria comprobada.

7. Costo de mantenimiento en Perú

costo mantenimiento hilux y poer

Toyota Hilux: Mantener una Hilux no suele ser económico ni extremadamente costoso, ubicándose en la media-alta del segmento. Toyota Perú publica un costo referencial de mantenimiento de ~S/806 hasta los 20,000 km (promedio por servicio), lo cual implica que las revisiones periódicas (cada 5,000 km o 6 meses típicamente) rondan S/400 a S/800 según kilometraje. Estos precios en concesionario incluyen mano de obra especializada y repuestos originales (ej. filtros, aceite 100% sintético, etc.). Si bien en talleres independientes podría abaratarse algo, muchos propietarios mantienen la garantía usando servicio oficial los primeros años. La ventaja de la Hilux es la disponibilidad de repuestos: hay abundantes proveedores locales (Toyota y terceros) de piezas como filtros, pastillas de freno, correas, etc., lo cual mantiene precios competitivos. Por ejemplo, un cambio de aceite con filtro puede costar similar a pickups de otras marcas (~S/300-400). En cuanto a componentes mayores: embrague, amortiguadores, inyectores, son relativamente accesibles por la amplia oferta (p.ej. un inyector original Toyota puede costar $200-$300, mientras uno reconstruido mucho menos). Además, la Hilux tiene muchos equivalentes alternativos: repuestos genéricos o marcas OEM (Denso, Aisin, etc.) que reducen costos de mantenimiento fuera de garantía. Un rubro donde sí puede ser más oneroso es en neumáticos (usa llantas All-Terrain grandes, ~S/800 c/u marcas premium) y frenos (cambio de forros de freno traseros, etc., puede requerir mano de obra especializada). En general, mantener la Hilux en buen estado requiere inversión, pero compensa con intervalos de falla prolongados – es decir, quizás pague uno más en el mantenimiento preventivo, pero se evitan reparaciones mayores. También influye el uso: una Hilux usada intensamente en obra tendrá gastos mayores (rotura de bujes, alineamientos frecuentes) comparada con una de uso particular moderado. Por último, la Hilux tiene a favor la red de servicio Toyota: más de 20 concesionarios en Perú, lo que facilita encontrar taller cerca, incluso en provincias, y eleva la calidad del mantenimiento (aunque a un costo ligeramente mayor que un taller genérico).

Great Wall Poer: El costo de mantenimiento de la Poer, en sus primeros años, tiende a ser inferior al de la Hilux en ciertos aspectos, aunque con algunas consideraciones. Derco (representante de GWM en Perú) suele ofrecer precios de servicio competitivos para marcas chinas, a fin de atraer y fidelizar clientes. No se publican abiertamente los costos como Toyota, pero propietarios mencionan que las revisiones periódicas de la Poer en concesionario rondan entre S/500 y S/700, dependiendo del kilometraje, ubicándose ligeramente por debajo de Toyota. Esto se debe en parte a que el aceite especificado puede ser semi-sintético (según kilometraje) y a menores costos de mano de obra. Además, durante la garantía de 3 años, algunos mantenimientos pueden estar incluidos o con descuento promocional. Donde la Poer podría resultar más costosa es en la disponibilidad y precio de repuestos específicos: piezas fuera de lo común (p.ej. un sensor de radar de punto ciego, o una óptica LED) pueden no tener stock local abundante y habría que importarlas, con costos elevados. Sin embargo, los repuestos de desgaste regular – filtros, pastillas de freno, correas – ya se encuentran en el país a precios razonables, a veces intercambiables con otras marcas chinas. Un ejemplo: el filtro de aceite diésel de la Poer puede costar ~S/60-80, comparable al de Hilux. Por otro lado, la Poer incluye más gadgets electrónicos que podrían requerir calibración o mantenimiento (ej. cámaras, sensores ADAS); aunque no son consumibles tradicionales, su eventual recalibración tras un choque menor sí implicaría costos en servicio especializado. Hasta el momento, quienes llevan su Poer al servicio oficial destacan que los costos son moderados y la atención es buena, pero existe la preocupación de cómo será el soporte a mediano plazo si Derco deja de representar la marca (un riesgo hipotético). En el mercado aftermarket, al ser la Poer relativamente nueva, todavía no abundan repuestos genéricos: es decir, a diferencia de Hilux, no hay tanta oferta de terceros, por lo que dependencia del concesionario es mayor en estos primeros años. Esto podría cambiar conforme aumente el parque de Poer y más proveedores traigan repuestos alternativos. En síntesis, mantener la Poer cuesta ligeramente menos en lo rutinario (servicios, insumos), pero con la salvedad de posibles gastos mayores o esperas si ocurre una avería poco común. La recomendación para dueños de Poer es seguir estrictamente el mantenimiento preventivo indicado por el fabricante, para evitar que pequeñas fallas (ej. en DPF) escalen a reparaciones costosas fuera de garantía.

8. Valor de reventa y depreciación en Perú

hilux vs poer depreciacion

En el mercado peruano, las pick-ups mantienen en general buen valor, pero la Toyota Hilux se destaca como una de las que menos se deprecia. Según datos de portales de compraventa, la Hilux es reconocida por retener su valor a lo largo del tiempo. Esto se refleja en los precios de segunda mano: por ejemplo, una Toyota Hilux Doble Cabina 4×2 diesel del 2021 con ~59,000 km se oferta en alrededor de US$ 25,800 (aprox. S/95 mil), cuando su precio nueva rondó los US$ 31–32 mil; es decir, apenas ~20% de depreciación en 4 años. Incluso unidades muy usadas encuentran comprador debido a la demanda: la Hilux encabezó el ranking de vehículos más robados en 2022 justamente porque es muy solicitada en el mercado negro y de repuestos, un indicador indirecto de su alto valor de reventa. En general, una Hilux bien mantenida puede venderse rápida y cerca de su precio original aún tras varios años – muchos compradores confían en la marca Toyota y están dispuestos a pagar más por una usada, sabiendo su longevidad. Además, hay preferencia por ciertas versiones: en Perú, la Hilux doble cabina 4×4 (especialmente motor 2.8L SRV o la 2.4L SR) son las más buscadas, y se revenden más rápido que variantes menos comunes (como cabina simple o gasolina). Las de color blanco o plata (populares en minería/construcción) también tienen salida rápida en flotas. Todo esto hace que la Hilux tenga un índice de depreciación anual bajísimo, situándose entre 5% y 7% anual, que es excelente para un vehículo.

La Great Wall Poer, al ser una opción más nueva y de marca emergente, sufre una depreciación mayor. No obstante, sorprende que no se devalúa tanto como solían hacerlo los vehículos chinos de antaño. Un caso concreto: una Poer 2021 Doble Cabina 4×4 con ~80,000 km se encontró publicada en US$ 19,000 (S/ ~72 mil) en provincia; considerando que su precio nueva fue ~US$ 21–22 mil, la depreciación rondaría 15% en ~2 años, lo cual es bajo. Sin embargo, este dato puntual puede estar influido por la escasez de vehículos durante la pandemia, que mantuvo altos los precios de segunda mano. En promedio, se estima que la Poer pierde alrededor de 10-12% de valor anual en sus primeros años. Una Poer 2021 con poco kilometraje (≤20k km) podría venderse cerca de US$ 21k (si nueva costó US$24k), mientras que con más uso o desperfectos, el valor cae más abruptamente pues los compradores son más precavidos. También influye el desconocimiento del público: al revender una Poer, el vendedor enfrenta un mercado más reducido de interesados que en el caso de Hilux. Hay que encontrar a alguien convencido de la marca o buscando específicamente ese modelo. Por ende, las Poer usadas suelen demorar más tiempo en concretar venta. Según comentarios en foros, algunos dueños tardaron 2-3 meses en vender su Poer, mientras una Hilux equivalente podía colocarse en semanas. Ahora bien, dentro de la oferta de Poer, las versiones más equipadas (4×4 LUX automática) parecen sostener mejor su valor relativo que las base 4×2: los compradores de segunda mano valoran los extras (techo solar, cuero, etc.) pero igual esperan un descuento significativo respecto a una nueva. Otro factor: la garantía de 3 años transferible – una Poer vendida con 1 año de uso aún en garantía es atractiva, pero una con >3 años sin garantía pierde más valor de golpe. En resumen, la Hilux gana claramente en valor de reventa: es casi un “activo” que conserva capital, mientras la Poer se deprecia más al estilo de un vehículo normal, aunque quizás menos de lo que algunos esperarían (gracias a su buena recepción inicial). Un punto a monitorear es cómo será la depreciación de Poer a 5+ años; si GWM continúa sólido en Perú, es posible que su reventa mejore. Pero por ahora, para alguien que compra nuevo pensando en vender en unos años, la Hilux ofrece mayor seguridad de recuperar la inversión.

9. Historial de robos

hilux vs poer historial de robos

El tema de robos es importante en Perú, y aquí la Hilux lamentablemente es protagonista. Según estadísticas oficiales de la Policía Nacional del Perú, la Toyota Hilux fue el vehículo más robado en 2022 a nivel nacional. Esto se debe a que los delincuentes la prefieren por su alto valor de reventa y versatilidad: puede usarse para minería ilegal, narcotráfico (en zonas agrestes) o desmantelarse para vender repuestos. Tracklink reporta que la Hilux, al retener tanto su valor, es muy atractiva para el mercado negro de autopartes. En Lima, bandas han estado implicadas en robos de decenas de Hilux 4×4 para estos fines. Por ende, ser propietario de una Hilux implica un riesgo elevado de robo o asalto para quitársela, especialmente en algunas regiones. Muchos dueños invierten en GPS ocultos y seguros completos (incluso empresas instalan cortacorrientes remotos) para mitigar este riesgo.

En contraste, no hay registros notorios de robos de Great Wall Poer en las estadísticas. Al tener menor presencia en el parque automotor y menor valor percibido por delincuentes, no es un objetivo principal. Los ladrones suelen preferir modelos donde las piezas tengan salida masiva; dado que la Poer comparte menos unidades vendidas, sus repuestos no son tan solicitados en canales ilegales. Esto no significa que esté exenta – cualquier vehículo puede ser robado – pero ciertamente la tasa de robo de Poer es ínfima comparada con Hilux. De hecho, en 2022 no figura entre los modelos más robados. Algunos propietarios de Poer han expresado que se sienten más tranquilos en ese aspecto, aunque igual toman precauciones básicas (alarmas, trabapalanca, GPS) porque, al fin y al cabo, es una camioneta nueva y atractiva.

En resumen, la Hilux tiene un historial negro de robos en Perú por su alto valor y demanda ilegal, liderando lamentablemente las estadísticas, mientras la Poer pasa prácticamente inadvertida para la delincuencia, al menos hasta 2025. Este contexto influye tanto en costos de seguro (la Hilux paga primas más altas, ver siguiente sección) como en las medidas de seguridad que debe tomar el dueño.

10. Costo del seguro estimado en Perú

El costo de asegurar una camioneta suele reflejar su riesgo de robo y costo de reparación. En el caso de la Toyota Hilux, el seguro vehicular es considerado caro dentro de su categoría. Las aseguradoras clasifican a la Hilux con prima alta debido a su alta siniestralidad por robo – de hecho muchas pólizas exigen instalar GPS rastreador obligatorio para Hilux, dada su posición como la más robada del país. Para dar una idea, cotizaciones de seguro todo riesgo (cobertura completa) para una Hilux 2023 valorizada en ~$35k, con uso particular en Lima, arrojan primas anuales del orden de US$ 1,800 a 2,500 (S/ 7,000 a 9,500). Por ejemplo, un cotizador muestra alternativas de ~US$2,340 anuales incluyendo IGV. Esa cifra es notablemente mayor que la de un auto compacto y supera ligeramente la de otras pickups menos robadas (p.ej. una Mitsubishi L200 puede rondar $1,500–$1,800). Además, a menudo se pide deducible elevado y dispositivos de seguridad extra. En cuanto al SOAT (seguro obligatorio contra accidentes), la tarifa es estándar por ser vehículo de categoría camioneta, aproximadamente S/ 50 mensuales si se prorratea. Donde el costo se dispara es en la póliza voluntaria todo riesgo como indicamos. Esto significa que proteger una Hilux es oneroso: quien la compra debe considerar este gasto fijo en su presupuesto. No obstante, muchas empresas aseguran flotas Hilux con convenios que reducen algo el costo por volumen.

Para la Great Wall Poer, el seguro tiende a ser más accesible. Al no estar en la lista negra de robos, algunas aseguradoras la clasifican con riesgo medio. Una prima típica de seguro completo para Poer podría situarse entre US$ 1,200 y 1,600 anuales (S/ 4,600 – 6,100), aproximadamente un 30% menos que la Hilux equivalente. Esto, claro, varía con el perfil del conductor y cobertura, pero en general la Poer se beneficia de ser menos atractiva para ladrones y tener un valor comercial más bajo. Adicionalmente, algunas compañías ofrecen descuentos por ser vehículo nuevo de marca emergente. Es posible encontrar pólizas cercanas a US$1,000 para cobertura básica (choque, robo, daños a terceros) con deducibles altos. Cabe señalar que, a medida que GWM gane participación, las aseguradoras ajustarán sus datos de siniestralidad; pero hasta 2025, la Poer no muestra alta siniestralidad, por lo que asegurarla es relativamente económico comparado con la Hilux. Importante: siempre conviene incluir coberturas contra robo, dado que aunque la incidencia sea baja, el costo de reposición sería significativo. Un punto a favor para la Poer es que, por su equipamiento, muchas ya vienen con sistemas de alarma y rastreo integrados, lo cual puede ayudar a reducir la prima (algunas pólizas lo consideran). En suma, el seguro de la Hilux cuesta bastante más que el de la Poer en Perú – prácticamente reflejando el riesgo estadístico de cada una. Para un uso personal, este es un gasto anual en el que la Poer permite ahorro, mientras la Hilux demanda invertir por seguridad la suma considerable que mencionamos.

11. Compatibilidad con accesorios modernos

accesorios de poer y hilux

Toyota Hilux: Gracias a la enorme popularidad global de la Hilux, existe un mercado aftermarket amplísimo para accesorios. En Perú se consigue de todo: barras antivuelco, coberturas de tolva (liners, tapa retráctil), estribos, snorkels de admisión elevada, kits de suspensión elevada, winches, parachoques metálicos off-road, etc. La compatibilidad es excelente ya que muchos accesorios de Hilux global encajan en las tailandesas/argentinas vendidas localmente. Además, Toyota ofrece su propia línea TRD de accesorios (rines, overfenders, molduras) y en concesionarios locales hay catálogos de accesorios originales y genéricos. Por el lado tecnológico, la Hilux desde 2019-2021 incorporó head unit con pantalla táctil (6 a 9 pulgadas según versión) que soporta Android Auto y Apple CarPlay en los modelos más recientes – esto permite integrar smartphones para navegación, música y demás. En versiones anteriores, muchos usuarios instalaron radios aftermarket con CarPlay fácilmente, dado el espacio 2DIN disponible. La camioneta también es compatible con cámaras de retroceso (algunas versiones ya traen de fábrica, en otras se puede añadir y el radio Toyota lo acepta). Asimismo, equipos modernos como barras LED de iluminación, sensores de estacionamiento, etc., pueden añadirse sin mayor complicación eléctrica, dado que la Hilux aún utiliza un sistema eléctrico relativamente sencillo de 12V y hay abundante documentación de instalación. Un aspecto a mencionar es la facilidad de modificación: talleres locales están familiarizados con la Hilux, así que personalizarla con accesorios no presenta sorpresas. Por ejemplo, es común ver Hilux con upgrade de suspensión, neumáticos más grandes y accesorios de expedición (carpas, portaequipajes), todo plug-and-play. En resumen, la Hilux es un sueño para entusiastas: es altamente compatible con accesorios modernos, tanto en equipamiento tech (conectividad móvil) como en aditamentos utilitarios o estéticos.

Great Wall Poer: Al ser más reciente, su oferta de accesorios es más limitada pero creciendo. Great Wall (GWM) a nivel global ofrece algunos accesorios originales: ej. barra deportiva cromada, bed-liner para la tolva, cobertor rígido de maletero, estribos laterales, y bullbar delantero. En Perú, Derco suele traer algunos de estos bajo pedido para la Poer, aunque la disponibilidad inmediata puede ser menor que en Toyota. No obstante, la Poer viene de serie con muchos elementos que en Hilux serían accesorios: por ejemplo, protectores plásticos en guardafangos, estribos laterales, cámara 360°, sensores de punto ciego – estos ya están integrados de fábrica en la versión full, por lo que el usuario quizá no necesite añadirlos. En cuanto a compatibilidad, físicamente la Poer es similar en dimensiones a otras pickups, así que accesorios genéricos (como barras LED, compresores de aire portátiles, cajas de herramientas para la tolva) se pueden instalar sin problema. Algunos propietarios han adaptado accesorios de la Ford F-150 (por ejemplo, luces LED adicionales o sistemas de sonido) en la Poer exitosamente. Donde hay cierta limitación es en accesorios de performance: lift kits o suspensiones aftermarket específicos para la Poer son escasos fuera de China. Sin embargo, marcas de 4×4 empiezan a lanzar kits universales que pueden calibrarse para la Poer. Electrónicamente, la Poer es muy avanzada: trae de fábrica Apple CarPlay/Android Auto en su pantalla de 9”, cargador inalámbrico de celular, puertos USB múltiples e incluso sistemas ADAS. Esto hace que no sea tan necesario añadir módulos electrónicos externos. Un tema es la compatibilidad de software: siendo un sistema propietario chino, es menos personalizable que una unidad Android genérica; pero recibe actualizaciones de la marca. Usuarios más tech han logrado agregar dashcams integradas y vincularlas a la pantalla, aunque requiere conocimientos. En cuanto a accesorios exteriores, ya hay en Mercado Libre y AliExpress numerosos ítems para la Poer (denominada también GWM Cannon/Ute en otros países): cobertores de retrovisor, parrillas personalizadas, kits de iluminación, etc., que pueden importarse. En síntesis, la Poer soporta bien la adición de accesorios, pero la variedad local es menor en comparación a la Hilux. Con el paso del tiempo y aumento de unidades, es de esperar que más tiendas traigan accesorios dedicados. Por ahora, un dueño de Poer puede equiparla con lo esencial (forros, portabicicletas, barras) sin inconvenientes, y disfrutar de la gran cantidad de gadgets modernos ya incluidos de fábrica, algo en lo que supera a la Hilux base.

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12. Experiencia posventa en Perú

hilux vs Poer postventa servicios

Toyota Hilux – Servicio postventa de primera: Comprar una Hilux en Perú conlleva el respaldo de Toyota del Perú, conocido por brindar excelente atención postventa. La red de concesionarios y talleres autorizados Toyota cubre las principales ciudades (Lima, Arequipa, Trujillo, Cusco, etc.), sumando más de 30 puntos de servicio. Esta cobertura significa que, ante cualquier problema o mantenimiento, el propietario de una Hilux casi siempre tendrá un taller relativamente cerca con personal capacitado. La experiencia posventa de Toyota se caracteriza por profesionalismo y cumplimiento: los mantenimientos se realizan en tiempo, se entregan checklist de 21 puntos, y normalmente el vehículo es devuelto limpio y dentro del plazo indicado. Los clientes valoran la seriedad en garantías: si alguna pieza falla dentro del periodo, Toyota suele reemplazarla sin objeciones (claro está, cumpliendo las condiciones). Además, existe disponibilidad de vehículos de cortesía en algunos talleres, lo que facilita la vida al cliente durante una reparación prolongada. Un aspecto muy positivo es la comunicación proactiva: Toyota envía recordatorios de servicio, lleva historial detallado de cada unidad (consultable en cualquier concesionario) y hasta realiza campañas de llamado a revisión (recall) de manera transparente cuando se detecta algún defecto de fábrica en cierto lote. Esto ocurrió, por ejemplo, con un recall global de airbags Takata hace unos años, que en Perú se manejó eficientemente contactando a dueños de Hilux afectadas. Todo lo anterior genera en el cliente Hilux una tranquilidad postventa: sabe que su inversión está respaldada. Por supuesto, no todo es perfecto: algunos usuarios encuentran los costos de servicio oficiales algo elevados (como mencionamos, aunque competitivos para el segmento, siempre habrá opciones más baratas fuera). También, en temporadas altas los talleres oficiales pueden tener agenda llena, requiriendo programar con días de anticipación. Pero comparado con la experiencia posventa de marcas menos establecidas, Toyota lleva ventaja clara. Cabe anotar que muchos mecánicos independientes en Perú también conocen al dedillo la Hilux, de modo que tras la garantía, el dueño tiene la opción de mantenerla con su mecánico de confianza sin mayor riesgo, dado lo común del modelo. Esto amplía aún más la red “posventa” efectiva de la Hilux más allá de la oficial.

Great Wall Poer – Postventa en desarrollo: La experiencia posventa para la Poer depende en gran medida del representante local, Derco. En ciudades principales, Derco cuenta con talleres autorizados GWM (Great Wall Motor) – en Lima, por ejemplo, tienen sedes en Surquillo y Ate. La atención que reportan los dueños de Poer ha sido mixta pero mayormente satisfactoria en cuanto a mantenimientos: entregas puntuales y precios razonables. Sin embargo, cuando se trata de reparaciones bajo garantía, ha habido algunos roces. Un caso citado fue el del cilindro de embrague donde el cliente sintió que Derco no respaldó adecuadamente (no reconociendo el cambio como garantía). Si bien podría ser un hecho aislado, evidencia que la red posventa de Great Wall aún afina sus políticas. En otros países, Great Wall ha mejorado su atención – por ejemplo en Chile, extendieron garantías en algunos casos especiales –, por lo que es probable que en Perú la marca vaya ganando confianza y agilidad en posventa con el tiempo. De momento, la disponibilidad de repuestos en stock es un área a mejorar: ciertos repuestos pueden demorar semanas si no están en almacén nacional, ya que deben importarse desde China. Derco, no obstante, ha ido aumentando su inventario a medida que crecen las ventas de Poer y otros modelos GWM. Algunos propietarios comentan que para piezas menores (filtros, pastillas) no tuvieron problema, pero para un parabrisas y un sensor específico sí esperaron más de 20 días. La comunicación con el taller también ha sido dispar: hay clientes contentos con asesor de servicio dedicados, y otros que tuvieron que insistir para obtener información de su reparación. Esto es típico de una red posventa en consolidación. Por suerte, la Poer comparte ciertos componentes con otros vehículos (ej. motor similar al de Haval H9 diesel), lo cual ayuda a que los técnicos ya estén familiarizados. Además, Derco suele capacitar a su personal con ingenieros chinos de GWM periódicamente, lo que eleva la calidad técnica. Un elemento positivo es que la mayoría de usuarios han podido solucionar sus inconvenientes en garantía sin costo; Great Wall parece estar respondiendo correctamente en cambios de piezas defectuosas (e.g. cambios de centralitas de infoentretenimiento o sensores ABS cuando fallaron). La clave para el dueño de una Poer es mantener el plan de mantenimiento oficial durante la garantía, para asegurar respaldo completo. Fuera de Lima, la red es más limitada – talleres Derco en provincias atienden varias marcas (Suzuki, Mazda, GWM, etc.), quizás sin stock pleno de repuestos Poer, pero pueden gestionar pedidos. Esto puede traducirse en tiempos de reparación más largos en provincia comparado con la inmediatez que Toyota puede tener (dado su mayor arraigo). En resumen, la posventa de Great Wall/Poer está en crecimiento: cumple con lo esencial, pero aún no alcanza la cobertura ni la reputación de la de Toyota. Los propietarios deben ser un poco más pacientes y proactivos, aunque la tendencia apunta a mejoras conforme aumenten las Poer en circulación y la marca busque afianzarse cuidando a sus clientes.

13. Impacto ambiental y consumo

Consumo de combustible: Tanto la Hilux como la Poer emplean motores turbodiésel modernos de 4 cilindros, relativamente eficientes para el tamaño del vehículo. En condiciones reales de ciudad, la Hilux 2.4 suele rendir entre ~8 a 9 km por litro de diésel (alrededor de 11–12 L/100km) dependiendo del tráfico, pudiendo bajar a ~7 km/L en congestión pesada urbana debido a su peso y aerodinámica de pickup. En carretera abierta a 90-100 km/h, mejora a unos 13–14 km/L (7–7.5 L/100km). La versión 2.8L, pese a ser más potente, tiene consumos similares o ligeramente mejores en ruta gracias a que trabaja más relajada (incluso reportes de ~15 km/L a velocidad constante). La Poer 2.0, según usuarios, brinda consumos muy parejos a los de Hilux: alrededor de 8 km/L en ciudad y hasta 12–13 km/L en carretera. Es posible que en ciudad la Poer sea un poco menos eficiente si se pisa a fondo (por el menor desplazamiento, debe esforzarse más en aceleraciones bruscas), pero su transmisión de 8 marchas ayuda a optimizar el régimen y muchos dueños logran ~9 km/L en uso mixto, lo cual es competitivo. En resumen, ninguna de las dos es particularmente ahorradora – son vehículos grandes y pesados (2 toneladas) – pero rinden decentemente para ser 4×4 diésel. Un punto a favor es que el diésel en Perú suele costar un poco menos que la gasolina de 90/95, así que el gasto por kilómetro puede resultar conveniente frente a camionetas a gasolina de similar tamaño.

Impacto ambiental: Ambos modelos, al ser diésel, emiten menos CO₂ por km que un equivalente a gasolina, debido a la mayor eficiencia energética del diésel. Sin embargo, emiten óxidos de nitrógeno (NOx) y material particulado que afecta la calidad del aire si no se controlan. Para mitigar esto, incorporan filtros DPF y catalizadores. La Toyota Hilux en su versión global 2021 cumple aproximadamente con norma Euro 5 (en algunos mercados Euro 6 con AdBlue, aunque en Latinoamérica muchas llegaron sin urea). El DPF atrapa las partículas de hollín y luego las quema, reduciendo drásticamente la emisión visible de humo negro – una Hilux nueva bien mantenida prácticamente no echa humo. No obstante, como ya vimos, el DPF requiere regeneraciones y ha causado problemas cuando el uso no es ideal, lo que indirectamente también es un tema ambiental (un DPF obstruido emite NOx y consume más combustible). La Great Wall Poer igualmente viene con DPF y en mercados vecinos declara norma Euro 5. En Chile, por ejemplo, se vende con DPF y posiblemente EGR para NOx, cumpliendo Euro V. Por tanto, en emisiones reguladas ambas están parejas. Quizás un detalle: la Hilux lleva más tiempo refinando su calibración de emisiones, mientras la Poer tuvo algunos tropiezos (casos de DPF tapado prematuro, indicio de que la gestión electrónica podría no ser óptima en ciertas condiciones). En cuanto a huella de carbono, un propietario de cualquiera de las dos generará unas emisiones de ~220-250 gramos CO₂/km. No son vehículos “ecológicos” per se, pero tampoco terriblemente más contaminantes que otros utilitarios diésel. Ninguno ofrece versiones híbridas o eléctricas (aunque globalmente Toyota tiene una Hilux a hidrógeno en prototipo y GWM ha mostrado interés en pickups eléctricas a futuro, en 2025 aún no disponible nada de eso en Perú).

Otros aspectos ambientales: La producción y disposición final de estas camionetas también importa: Toyota tiene políticas de reciclaje y reducción de plásticos en su manufactura, y un amplio soporte post-consumo (recolección de baterías, etc.). Great Wall viene mejorando en ese aspecto pero aún no tiene tantos programas visibles de sustentabilidad en la región. En ruido, los motores diésel modernos son más silenciosos que los antiguos, pero la Hilux sigue sonando un poco más “industrial” al arrancar en frío comparada con la Poer, cuyo motor está bien encapsulado y produce menos vibración percibida en cabina. Para quien busca reducir impacto ambiental, la mejor práctica con estas pickups es llevarlas bien afinadas (un motor en buen estado contamina mucho menos) y usar diesel de bajo azufre (En Perú el Diésel B5 S50 o similar), lo cual ambos modelos requieren. En conclusión, ninguna destaca especialmente en lo ambiental: son vehículos utilitarios convencionales. Cumplen normas actuales, ofrecen buen consumo considerando su tamaño, pero si la prioridad es ecología, quizás mirar hacia SUVs híbridas sería más coherente. Dentro de su segmento, al menos ofrecen durabilidad – lo cual en sí es ecológico, pues una Hilux puede durar 20 años en servicio, aprovechando al máximo los recursos invertidos en fabricarla.

14. Evaluación por tipo de usuario

Hilux Vs Poer - Tipo de usuario

Usuario particular urbano (uso diario y familiar): Para alguien que vive en ciudad y quiere la camioneta como vehículo personal/familiar, la Great Wall Poer resulta muy atractiva. Ofrece un andar más cómodo en asfalto, dirección ligera para maniobrar en tráfico y dimensiones apenas mayores pero manejables. Su interior rico en amenidades (pantalla grande, asientos cómodos, buen sistema de audio) la hace sentir más SUV que camión, lo cual la familia apreciará en trayectos diarios. La Hilux, por otro lado, puede sentirse más tosca en el día a día urbano: suspensión dura en baches, radio de giro mayor que sedanes (aparcar requiere más espacio) y un interior funcional pero sin lujos en versiones base. No obstante, la Hilux también puede servir de vehículo familiar – muchas personas la usan así sin problemas – y tiene a favor un aire de estatus/tranquilidad (saber que difícilmente te dejará botado). Pero considerando solo la comodidad urbana, la Poer lleva ventaja: piensa en aquel usuario que la usa para ir a la oficina, salir los fines de semana con la familia, etc.; este perfil valorará el confort adicional de la Poer. También, la tecnología de ayuda al conductor (como sensores 360°) de la Poer facilita el uso cotidiano (menos estrés al estacionar, detectar motos en punto ciego, etc.), mientras la Hilux en 2021 carece de esas asistencias en la mayoría de versiones.

Usuario aventurero/off-road recreativo: Aquí la balanza se inclina hacia la Hilux. Quien busca una camioneta para escapadas a trocha, playa, montaña los fines de semana, y quizá equiparla con implementos off-road, encontrará en la Hilux un aliado probado. Su chasis resistente, mayor disponibilidad de talleres 4×4 que la conocen, abundancia de accesorios off-road dedicados y reputación de “indestructible” la hacen preferida de aventureros. La Hilux puede ser modificada (lift, snorkel, etc.) con facilidad y aguantará rutinas exigentes de off-road (vadeo de ríos, rutas pedregosas) sin problemas serios. La Poer también es 4×4 y podrá llevarte a muchos sitios – de hecho trae control de descenso y buenas aptitudes – pero un usuario muy entusiasta podría desconfiar de su performance en situaciones extremas por ser nueva en el terreno. Por ejemplo, para expediciones remotas (días en zonas sin asistencia), la Hilux da más confianza por la disponibilidad de repuestos improvisados y mecánicos que la conocen hasta en lugares recónditos. Un aventurero promedio que haga off-road ligero/medio, sin embargo, puede disfrutar perfectamente la Poer; pero si hablamos de “overlanding” duro, la Hilux se considera una apuesta más segura.

Usuario de trabajo o carga pesada: Si el propósito principal es utilizar la camioneta para negocio, cargar materiales, flota empresarial, etc., la Hilux destaca por su enfoque utilitario. Empresas constructoras, agroindustria, minería suelen optar por Hilux (u otras japonesas) por su trayectoria de durabilidad bajo maltrato. La Hilux tiene capacidad de carga ligeramente mayor y se siente más adecuada para ese trajín diario de cargar/descargar, entrar a obra, etc. Su interior más básico incluso es una ventaja cuando se usa como vehículo de trabajo rudo (fácil de limpiar, menos cosas que se puedan romper). La Poer, aunque puede cargar casi una tonelada, está más orientada al usuario particular: su cama viene forrada y bonita, su interior de cuero podría dañarse si se usa con ropa o herramientas sucias constantemente, y sus sensores/cámaras podrían ser un exceso en ambiente de trabajo (incluso potenciales puntos de falla si se golpean). Además, para flotas, la Hilux ofrece planes corporativos, stock de repuestos en volumen, y fácil reventa cuando toque renovar – aspectos que un gerente de flota valora. Por ende, para uso laboral intenso, la Hilux es la elección lógica, mientras la Poer encajaría mejor en pequeños emprendedores o profesionales independientes que combinan el trabajo con el uso personal y quieren más confort.

Usuario preocupado por presupuesto y valor: Para alguien cuyo factor clave es el presupuesto inicial, la Great Wall Poer tiene la ventaja clara de un precio más bajo a igualdad de equipamiento. Con lo que cuesta una Hilux básica 4×2, uno podría comprar una Poer 4×4 full equipo. Si su intención es tener una camioneta doble cabina sin gastar de más, la Poer es muy tentadora. Sin embargo, debe valorar también la depreciación: si piensa vender en pocos años, tal vez la Hilux le convenga a largo plazo porque recuperará más dinero (como vimos en reventa). Si es un usuario que suele cambiar de vehículo cada 2-3 años, la Hilux es casi una inversión segura, mientras la Poer podría representar perder un porcentaje mayor. Pero si el plan es usarla muchos años hasta que “rinda su vida útil”, entonces la ecuación se invierte: la Hilux costará más al inicio por un valor extra que quizás no sea aprovechado al extremo, mientras la Poer habrá brindado un servicio similar por menos dinero. Así, para un usuario ahorrativo pero informado, la Poer ofrece más valor inmediato (más features por dólar), y la Hilux más valor a futuro (reventa, longevidad).

Usuario que valora la marca/prestigio: Aquí entra lo subjetivo, pero muchos compradores peruanos consideran el “caché” o prestigio de marca. La Toyota Hilux tiene un prestigio altísimo; poseer una Hilux se asocia con éxito, confiabilidad y buen estatus, por lo que algunos la eligen también por imagen. Por el contrario, Great Wall aún arrastra ciertos prejuicios (la idea de “auto chino” que algunos tienen, aunque esto ha ido cambiando). Así, un usuario que quiera un vehículo que le dé tranquilidad psicológica y reconocimiento probablemente se sienta más cómodo con la Hilux – sabe que su elección difícilmente será cuestionada. En cambio, quien es más abierto a probar cosas nuevas y no le importan los logos, puede optar por la Poer y ser incluso pionero ante sus conocidos, mostrando los beneficios inesperados de la marca.

En conclusión, la Hilux y la Poer satisfacen perfiles algo distintos: la Hilux para el tradicionalista, el que prioriza robustez comprobada, alto uso laboral o reventa; la Poer para el innovador, el que busca comodidad de auto moderno en formato pickup, aprovechando un mejor precio de entrada. Ambos, no obstante, solapan en un amplio rango de uso mixto (trabajo-casa), donde la decisión vendrá a las prioridades personales de cada usuario.

15. Comparativa con rivales directos

El segmento de pick-ups medianas en Perú es muy disputado. La Toyota Hilux tiene como rivales tradicionales a la Mitsubishi L200, Nissan Frontier, Mazda BT-50 (gemela de la Ford Ranger en mecánica), Ford Ranger, Chevrolet D-Max (Isuzu) e incluso la Volkswagen Amarok. Por su parte, la Great Wall Poer compite tanto contra esas establecidas como contra otras chinas emergentes: JAC T8 Pro, Changan F70 (también vendida como Peugeot Landtrek), Maxus T60, Foton Tunland, JMC Vigus, entre otras.

Hilux vs rivales tradicionales: La Hilux suele salir bien parada en comparativas por su confiabilidad y red de soporte, pero algunos rivales la superan en áreas puntuales. Por ejemplo, la Mitsubishi L200 (conocida también como Tritón) ofrece un desempeño off-road formidable (incluso mejor ángulo ventral y Super Select 4WD), y ha ganado popularidad en flotas mineras; sin embargo, su motor 2.4 turbo puede ser menos potente que el 2.8 de Hilux, y su reventa no es tan sólida. La Nissan Frontier destaca por su confort de marcha (suspensión trasera multilink en modelos recientes) y equipamiento, pero ha tenido historiales de problemas en ejes traseros en versiones muy cargadas, lo cual merma la confianza. La Ford Ranger aporta tecnología y potencia (motor 3.2L o biturbo 2.0 en últimas versiones, mucha electrónica) y es muy cómoda, aunque su mantenimiento es más caro y la red Ford más pequeña en Perú. La Hilux se ubica como “balance ideal” entre esas: quizás no es la más potente ni la más cómoda, pero es la más equilibrada con un fuerte plus en confiabilidad. No en vano, en rankings regionales suele quedar primera; por ejemplo, en Chile figuró #1 entre las mejores pick-ups, seguida de L200, y curiosamente en 3er lugar la Great Wall Poer, indicador de que las chinas ya se cuelan entre los top.

Poer vs otras pickups chinas: Great Wall no es la única marca china en el segmento, pero sí la que más agresivamente apuntó al mercado “premium” con la Poer. Sus rivales chinas tienen pros y contras: la Changan F70 (alias Peugeot Landtrek) ofrece también un buen acabado y motor 2.0 turbodiésel de similar potencia, con respaldo de Astara Perú; es muy comparable en propuesta a la Poer, incluso compartieron desarrollo con Peugeot. La Poer compite ventajosamente con más equipamiento de seguridad (6 airbags vs 2 en Landtrek inicial) y un interior más refinado, mientras la F70/Peugeot tiene quizás mejor calibración de suspensión y la chapa europea de Peugeot para algunos. La Maxus T60 es otra rival, conocida por precio contenido y buen motor 2.8L (150 HP) de origen VM Motori; no tiene el nivel de acabados de la Poer pero se vende bien en flotas. La Poer se diferencia situándose como la pick-up china “premium”: en una comparativa hipotética entre chinas, probablemente la Poer sería elegida como la más completa en conjunto (de hecho, en varios países sudamericanos ha ganado comparativas contra JAC, Foton, etc., por su combinación de estilo, potencia adecuada y seguridad). Un caso concreto es Argentina, donde la revista Parabrisas destacó a la Poer como “una sorpresa” muy favorable en su test, enumerando lo mejor y peor y posicionándola como seria competidora de las tradicionales. También en Chile la Poer escaló a top 3 de ventas de camionetas, solo detrás de Hilux y L200, superando a Ranger, Navara, etc. Esto habla de que su competitividad es real. Aun así, frente a rivales japonesas y americanas, la Poer todavía carga la duda de su rendimiento a largo plazo. Muchas empresas que comprarían 50 Hilux de una vez, no se arriesgan aún a comprar 50 Poer para trabajo rudo. Pero a nivel particular, cada vez más usuarios comparan y ven que por el precio de una Hilux básica obtienen una Poer full equipada – y eso inclina la balanza para algunos.

Comparación resumen: Hilux domina en legado, postventa y reventa; la Poer (y chinas similares) están recortando distancia en características y prestaciones. Donde antes la brecha era grande en calidad percibida, hoy una Poer se siente tan moderna y bien terminada como una Amarok o Ranger, por ejemplo. Rivaliza en potencia con las de entrada (no con las más potentes), pero cumple la mayoría de tareas. La verdadera prueba para la Poer es el tiempo y la aceptación del público conservador. Por ahora, la evidencia es que Great Wall Poer ha logrado situarse como la rival más seria de las japonesas en el terreno de precio/valor, incluso por encima de varias marcas tradicionales en oferta-precio. Esto beneficia al consumidor, pues obliga a todos los fabricantes a mejorar sus productos o precios para no quedarse atrás.

16. Evaluación del confort y tecnología interior

Poer vs Hilux interior

Toyota Hilux – Interior funcional pero austero: El habitáculo de la Hilux privilegia la practicidad y la resistencia. Los acabados son predominantemente plásticos duros de alta durabilidad (tablero, paneles de puerta), con algunos apliques metálicos o satinados en versiones altas. Esto hace que el interior se pueda limpiar fácilmente y tolera bien el maltrato, pero la sensación táctil es menos “premium”. Los asientos en la Hilux estándar vienen en tela resistente; solo en versiones SRV top hay cuero sintético. La postura de manejo es erguida, tipo camión, con ajuste manual de asiento (altura en versiones altas) y de volante en dos ejes (tilt & telescopic). En modelos 2021 se mejoró el aislamiento acústico respecto a años anteriores, pero todavía se percibe el ronroneo del motor diésel en cabina a altas RPM – la insonorización es buena, mas no excelente, pues la Hilux prioriza ventilación y robustez (ej. las puertas tienen menos sellos dobles que vehículos de lujo). En términos de espacio, la cabina doble de la Hilux acomoda cómodamente a cuatro adultos; cinco ya van justos en anchura en el asiento trasero, aunque el espacio para piernas detrás es suficiente. Comparada con la Poer, la Hilux es un poco más estrecha y su distancia entre ejes menor se traduce en ligeramente menos espacio para piernas atrás. Aun así, dos o tres pasajeros atrás viajan bien, con respaldo algo vertical pero típico de pick-up. Los huecos y portaobjetos abundan (consola central, doble guantera en panel, posavasos retráctiles, etc.), muy útiles para uso diario.

En tecnología, la Hilux fue poniéndose al día: desde 2019 incluye una pantalla táctil de infoentretenimiento de 6.5 a 8 pulgadas (según versión), con conectividad Bluetooth, USB y, en modelos 2021, integración Apple CarPlay/Android Auto de forma nativa. Esto significa que ya ofrece navegación vía Google Maps o Waze, streaming de música y asistente de voz a través del celular, lo cual era una queja en generaciones previas que tenían sistemas anticuados. El sistema de audio en versiones base es básico (4 parlantes) y mejora a 6 parlantes en SRV, con calidad aceptable pero no excepcional – de nuevo, fácilmente mejorable con aftermarket. En cuanto a instrumentos, la Hilux lleva un cluster analógico con tacómetro y velocímetro grandes, y una pantalla multifunción de ~4.2” monocroma o TFT a color en el centro (depende versión). Esta pantalla brinda info de la computadora de viaje: consumo, autonomía, brújula, estado 4×4, etc. Es útil pero no tan vistosa como un panel digital completo. Sobre climatización, la mayoría de Hilux en Perú traen aire acondicionado manual (solo la SRV tiene climatizador automático bizona desde 2021). Cumple su labor enfriando rápidamente la cabina (el A/C de Toyota es potente), aunque los mandos son analógicos y simples. Otros amenities: vidrios eléctricos en las 4 puertas (one-touch solo para conductor en algunas), cierre centralizado con control, volante multifunción (audio, teléfono, menú) y en SRV control crucero simple. No hay techo corredizo disponible, algo que la competencia como Poer sí ofrece. En iluminación interior, es básica (domo central y luz en zona de carga en algunas).

En resumen, el interior de la Hilux se siente sencillo pero muy sólido. No deslumbrará a quien busque lujo, pero tampoco decepciona en ergonomía: todo está bien ubicado y es fácil de usar, incluso con guantes de trabajo. Esa filosofía “tool-like” ha sido parte del encanto para unos y desventaja para otros. En comodidad de marcha, los asientos frontales brindan buen soporte (semi-buckets), pero la banca trasera es plana y de ángulo recto, adecuada para trayectos cortos/medios; en viajes largos, los pasajeros traseros pueden sentir algo de fatiga, que es común en pickups de cabina doble por la posición. La Hilux incluye detalles prácticos como ventilas de aire para plazas traseras en algunas versiones (no dedicadas, sino bajo los asientos delanteros). En seguridad interior, todas tienen cinturones de 3 puntos y apoyacabezas en las 5 plazas, así como anclajes ISOFIX para sillas de bebé en el asiento trasero – un punto importante para uso familiar.

Great Wall Poer – Interior confortable y cargado de tecnología: La Poer sorprende gratamente al ingresar: su acabado y diseño interior rompe el paradigma de “camioneta utilitaria”. Muchos elementos hacen que uno se sienta en un SUV moderno: superficies acolchadas en la parte alta del tablero y en apoyabrazos de puertas, insertos decorativos en símil madera o aluminio cepillado (según versión) y asientos revestidos en cuero ecológico con patrones cosidos. El panel de a bordo presenta un estilo más sofisticado, con líneas envolventes y una gran pantalla central de 9” estilo flotante. Esta pantalla tiene gráficos nítidos y responde bien al tacto; es compatible con Apple CarPlay y Android Auto, ofreciendo así navegación y apps integradas. Además, muestra la imagen de la cámara 360° cuando está activa: un punto destacable es que la Poer viene con visión periférica y sensores, lo que ayuda al estacionar y aumenta la sensación de vehículo premium. El tablero de instrumentos es digital en las versiones altas: consiste en una pantalla LCD que puede cambiar de estilo de visualización, mostrando velocímetro, tacómetro, modos de tracción y hasta gráficos del vehículo (por ejemplo, indica en qué modo 4×4 está con un dibujo). Esto le da un toque futurista que ninguna otra pickup del segmento tenía en 2021. Los asientos delanteros son otro punto fuerte: ambos con ajuste eléctrico en la versión tope, calefaccionados (algo casi exclusivo de la Poer en esta categoría) y con espuma de buena densidad que resulta cómoda en viajes largos. La posición de manejo es elevada pero más “de auto” que en la Hilux, gracias a la regulación telescópica del volante y a un apoyo lumbar presente. En la fila trasera, la Poer brilla: su distancia entre ejes mayor se traduce en espacio trasero superlativo. Parabrisas la señaló como “la mejor habitabilidad trasera de la categoría, sin dudas”. Tres adultos pueden sentarse con holgura en ancho y con excelente espacio para piernas; el respaldo tiene una inclinación ligeramente más cómoda que en Hilux. Además, cuenta con un apoyabrazos central abatible con portavasos para los de atrás. Incluso trae techo solar eléctrico en la versión Premium, una característica de confort/luz que no ofrecen las rivales japonesas.

En términos de tecnología y gadgets interiores, la Poer viene muy completa: climatizador digital de una zona (en lugar de perillas manuales), con salidas de aire para plazas traseras; encendido por botón y arranque remoto desde el llavero (puedes encender el motor a distancia, útil para climatizar antes de entrar); freno de mano electrónico con función Auto-Hold (mantiene frenado en semáforos automáticamente); espejo retrovisor con anti-encandilamiento; y múltiples tomas de carga: dos USB frontales (uno de datos, otro carga rápida) y curiosamente uno en el techo cerca del retrovisor pensado para conectar una dashcam. También tiene cargador inalámbrico para smartphone en la consola central. Estas amenidades hacen la vida a bordo muy agradable. La iluminación interior es LED, y trae luz ambiental suave en algunos contornos (depende mercado). Por el lado de infoentretenimiento, el sistema es bastante moderno: soporta comandos de voz básicos (en inglés o chino, el español limitado), y se integra con el panel digital para mostrar indicaciones de navegación, etc. Un detalle curioso es el sistema de proximidad chismoso: los sensores y cámaras de la Poer son tan proactivos que a veces resultan intrusivos – Parabrisas notó que cuando detecta objetos cercanos, baja el volumen del radio y emite alertas sonoras, activando la cámara automáticamente, lo cual si bien útil, puede volverse molesto si uno está en tráfico denso, y a veces hay que apagarlo manualmente. Esto indica que la interfaz no es perfecta: demasiada “cháchara electrónica” que puede requerir acostumbrarse o configurarla. También mencionaron que el sistema de mantenimiento de carril se muestra siempre en el tablero y es algo engorroso cambiar esas opciones. No deja de ser notable que ofrezca estas funciones de asistencia avanzada en el interior – adaptativo, frenado autónomo, etc., se configuran mediante el volante multifunción.

La calidad percibida en la Poer es alta para su precio: volante forrado en cuero con costuras, botones bien terminados, paneles ajustados (aunque como vimos, algunos propietarios han oído crujidos, posiblemente unidades iniciales). En aislamiento acústico, la Poer impresiona: a velocidades urbanas es muy silenciosa, el motor apenas se oye; ya en carretera se percibe algo de ruido aerodinámico y de rodadura, pero sigue siendo más silenciosa que la Hilux, gracias al trabajo en sellos de puertas y parabrisas laminado. La suspensión, al ser más suave, también filtra baches menores sin trasladar golpes secos a la cabina, lo que suma a la sensación de comodidad.

En conclusión, la Poer ofrece un nivel de confort interior y tecnología superior al de la Hilux en sus versiones comparables. Donde la Hilux es espartana, la Poer es sofisticada. Esta diferencia es intencional: Great Wall apuntó al usuario particular que quiere una experiencia placentera. La Hilux, en cambio, mantiene un interior orientado a la función. Dicho esto, algunos apreciarán la simplicidad de la Hilux (menos elementos que puedan fallar, cabina más utilitaria), mientras otros preferirán el lujo y conveniencia de la Poer. Es una cuestión de prioridades, pero objetivamente la Poer entrega más comodidades modernas, acercándose a lo que ofrece una camioneta de alta gama, y la Hilux se queda con lo esencial bien hecho.

17. Seguridad activa y pasiva

hilux vs Poer seguridad

En materia de seguridad, ambas camionetas han avanzado muchísimo respecto a generaciones anteriores, aunque existen diferencias en enfoque.

Seguridad en Toyota Hilux: La Hilux ofrece un sólido paquete de seguridad pasiva: desde 2019 todas las Hilux doble cabina para Latinoamérica vienen con al menos 3 airbags (frontales y rodilla), y las variantes vendidas en Perú 2021 incorporan 7 airbags en las versiones más equipadas (frontales conductor/pasajero, laterales delanteros, de cortina en ambas filas y uno de rodilla para el conductor). Esto, sumado a una carrocería con alta rigidez torsional y refuerzos laterales, le permitió obtener la máxima calificación en pruebas de choque. En efecto, la Hilux doble cabina obtuvo 5 estrellas Latin NCAP para protección de adultos y niños, en el protocolo vigente hasta 2019. Latin NCAP señaló estructura estable en impacto frontal y excelente protección lateral, destacando la presencia de control electrónico de estabilidad (ESC) y anclajes ISOFIX de serie. Cabe aclarar que esa calificación aplica a las unidades con 7 airbags y ESC; la Hilux básica con 3 airbags fue evaluada aparte con 4 estrellas (buen resultado también). A partir de 2022, Toyota empezó a introducir su suite Safety Sense en Hilux en algunos mercados (frenado autónomo, alerta de cambio de carril, etc.), pero en Perú esas asistencias no estuvieron presentes aún en 2021 (posiblemente se incorporaron en el modelo 2023). Por ende, en seguridad activa, la Hilux 2021 peruana cuenta con lo estándar: frenos ABS en las 4 ruedas, repartidor electrónico de frenado (EBD), control de estabilidad (ESC) y tracción, asistente de partida en pendiente (HAC), y en algunas versiones bloqueo de diferencial trasero. Todos estos sistemas la hacen muy segura en maniobras exigentes: por ejemplo, el ESC previene derrapes en curvas o evitando obstáculos, algo fundamental dado el alto centro de gravedad de una pickup. En pruebas de esquiva (moose test), la Hilux se ha comportado aceptablemente dentro de los límites de su diseño. Adicionalmente, incluye luces antiniebla en la mayoría de versiones, y faros delanteros halógenos (en SRV son Bi-LED) que brindan buena iluminación nocturna. Una característica de seguridad práctica es la estructura del chasis diseñada para colisiones: la Hilux incorpora deformadores programados al frente y refuerzos en cabina, además de un sistema de desactivación de combustible en caso de choque fuerte, reduciendo riesgo de incendio. Resumiendo, la Hilux ofrece seguridad comprobada y robusta, avalada por pruebas independientes (Latin NCAP) y la confianza de su construcción.

Seguridad en Great Wall Poer: Great Wall dotó a la Poer de un paquete de seguridad sorprendentemente completo, con la intención de igualar o superar a las marcas establecidas. Empezando por la seguridad pasiva, todas las Poer Doble Cabina vienen con al menos 4 airbags (frontales y laterales), y las versiones tope traen 6 airbags (añaden cortinas para ambas filas), quedando solo por detrás de Hilux en el airbag de rodilla que la Poer no tiene. La carrocería de la Poer emplea aceros de alta resistencia en zonas críticas y ha sido probada en choques internos; si bien Latin NCAP no la ha evaluado hasta 2025, la ANCAP australiana otorgó 5 estrellas a la GWM Ute (Poer) en 2021 luego de que GWM reforzara el diseño de los airbags de cortina y pretensores. Esto indica que estructuralmente la Poer protege bien a sus ocupantes en impactos frontal y lateral. Cabe destacar que la versión evaluada contaba con todas las ADAS activas funcionando, lo cual también contribuye al puntaje. Entrando a seguridad activa y asistencias, la Poer sobresale: además de ABS, EBD, control de estabilidad y tracción estándar, y asistente en pendientes igual que Hilux, añade un arsenal ADAS en la versión Premium. Esto incluye: Alerta de cambio de carril y asistencia de mantenimiento de carril (advierte si el vehículo se desvía y puede realizar pequeñas correcciones en volante); Sistema de frenado autónomo de emergencia (AEB) con detección de vehículos y peatones (frena el auto automáticamente si detecta una colisión inminente y el conductor no reacciona); Control crucero adaptativo (mantiene distancia programada con el de adelante, frenando y acelerando según tráfico); Alerta de punto ciego en los espejos (indica si viene un vehículo en carril adyacente no visible); Alerta de tráfico cruzado trasero al dar marcha atrás (muy útil saliendo de estacionamientos); y Reconocimiento de señales de tránsito (lee señales de velocidad y las muestra al conductor). Este conjunto de asistencias coloca a la Poer a la vanguardia de la seguridad activa en pickups medianas – ninguna otra rival ofrecía todo eso en 2021. En pruebas de desempeño de estas ADAS, medios chilenos y argentinos han informado que funcionan correctamente, aunque con alguna sensibilidad alta (como la alerta de colisión que suena temprano, o la cámara 360 que se activa con frecuencia). No obstante, es preferible un falso positivo que un sistema inactivo cuando se necesita.

Además, la Poer equipa monitor de presión de neumáticos (TPMS), mejora para la seguridad preventiva, y frenos de disco en las 4 ruedas con buen desempeño (ya mencionado su frenada de 47.2 m). También tiene característica de seguridad post-accidente: destraba puertas automáticamente al detectar choque, y corta la bomba de combustible. Un posible punto débil era la ausencia de prueba Latin NCAP, pero confiando en ANCAP y la construcción robusta que se percibe, la Poer parece muy bien posicionada. Quizá donde Toyota aún lleve ventaja es en la fineza calibración ESC o ABS por su experiencia, pero no hay quejas significativas de la Poer al respecto.

En resumen, en seguridad la Great Wall Poer iguala e incluso supera en tecnología a la Hilux, ofreciendo ADAS que la Hilux 2021 no tenía. La Hilux, por su parte, tiene la tranquilidad de una estructura y equipamiento ya validados por Latin NCAP, con 5 estrellas en la mayoría de variantes. Para un usuario promedio, ambos modelos brindan un alto nivel de seguridad activa (frenos, estabilidad) y pasiva (airbags, carrocería fuerte). Si se valoran las asistencias avanzadas (conducción semiautónoma nivel 2), la Poer lleva ventaja. Si se prioriza un historial comprobado y quizás una percepción de seguridad “probada en campo” (incluyendo situaciones de rescate y choque real), la Hilux da más confianza por su reputación. En todo caso, es positivo que ya podamos hablar de pick-ups chinas con 5 estrellas ANCAP y múltiples airbags – hace una década eso era impensable. Hoy, Hilux y Poer pueden llevar con seguridad a la familia, al trabajo y de regreso, contando con numerosas capas de protección para sus ocupantes.

18. Disponibilidad de versiones en Perú

Toyota Hilux: En el mercado peruano, Toyota ofrece una amplia gama de versiones de Hilux para distintos requerimientos. Según catálogo 2021-2022, estaban disponibles al menos 8 versiones oficiales, combinando opciones de cabina, tracción, motor y equipamiento:

  • Hilux Cabina Simple 4×4: Versión de trabajo con cabina de 2 puertas, motor 2.4 turbodiésel (2GD) y tracción 4×4 manual (ideal para carga pesada, cuenta con mayor espacio de cama). Equipamiento básico, enfoque utilitario.
  • Hilux Cabina & Chasis 4×4: Similar a cabina simple pero sin tolva, para instalar carrocerías especiales (cisterna, furgón, etc.). Motor 2.8 turbodiésel (1GD) en esta configuración, alta versatilidad para conversiones.
  • Hilux Doble Cabina 4×2 SR: Versión de entrada para uso particular/empresarial, 4 puertas, motor 2.4 diesel, tracción 4×2. Equipamiento SR (básico): 3 airbags, A/C manual, radio con BT, tapizado tela. Es la más asequible de cabina doble.
  • Hilux Doble Cabina 4×4 SR: Agrega tracción 4×4 part-time al motor 2.4. Misma configuración de equipamiento SR austero. Muy demandada por quien necesita 4×4 al menor costo, p.ej. empresas contratistas.
  • Hilux Doble Cabina 4×4 SR A/T: Variante SR con transmisión automática de 6 marchas (mantiene motor 2.4). Apunta a usuarios que prefieren comodidad de manejo. Su precio es bastante mayor que la manual, reflejando la caja automática.
  • Hilux Doble Cabina 4×4 SRV 2.8: Versión tope de gama con motor 2.8L (204 HP) manual 6 vel. Equipamiento SRV: 7 airbags, cuero, climatizador bizona, pantalla táctil grande, faros LED, etc. Es la variante lujosa orientada a particulares exigentes.
  • Hilux Doble Cabina 4×4 SRV 2.8 A/T: La más equipada de todas, con el motor 2.8 y transmisión automática de 6 vel. Incluye todo el equipamiento de la SRV manual, sumando quizás barra antivuelco o detalles estéticos. Es la más costosa y completa, ideal para quien quiera todas las comodidades sin sacrificar capacidades.

Cabe señalar que las nomenclaturas SR y SRV son heredadas: SR (Semi-Rustic, se podría bromear) es básica, SRV es Super Recreational Vehicle (según Toyota Arg). En Perú las versiones pueden nombrarse ligeramente distinto comercialmente, pero esencialmente son esas combinaciones. También existieron ediciones “Hilux Legend” o similares con accesorios TRD, pero son marginales. En cuanto a motorizaciones predominantes, el 2.4 turbodiésel es el más común en ventas (por economía y suficiente rendimiento), mientras el 2.8 queda para un porcentaje menor de usuarios que buscan máxima potencia. No se comercializan Hilux a gasolina ni versiones deportivas (en otros países hay 4.0L V6 gas pero no en Perú).

Great Wall Poer: La Poer en Perú tiene una oferta más reducida de versiones, enfocada principalmente en el segmento particular. Originalmente (2021) se introdujo en dos versiones principales: Poer 4×2 Mecánica (RWD, caja manual 6) y Poer 4×4 Lux (4WD, caja manual 6, más equipada). Posteriormente se sumó la opción Automática 4×4. Para 2023-2024, GWM ofrece la Poer en acabados Standard y Luxury, con opciones de tracción. En el sitio de GWM Perú se listaba: Poer Mecánica 4×2 STD (versión estándar tracción simple, motor 2.0 diesel, con equipamiento básico pero ya con pantalla y 4 airbags) con precio base alrededor de $18,990; luego la Poer 4×4 en versión Luxury (full) manual, con todos los extras, y finalmente la Poer 4×4 Automática Luxury como tope de gama, cuyo precio alcanza ~$33,000 (al añadirse nuevo motor 2.4 en 2024). Es decir, en 2021-22 esencialmente habían:

  • Poer 4×2 MT Standard: Doble cabina, 4×2, manual, nivel de entrada (equipamiento decente: 4 airbags, cámara retroceso, sin algunas asistencias avanzadas).
  • Poer 4×4 MT Luxury: Doble cabina, 4×4 con reductora, manual, nivel tope (6 airbags, ADAS, cuero, techo solar, etc. Completa).
  • Poer 4×4 AT Luxury: Doble cabina, 4×4, caja automática 8 vel, nivel tope (mismo Luxury con caja automática, siendo la más cómoda y costosa).

No se ofrece Poer cabina simple ni chasis; la marca reserva la línea “Wingle” para usos más comerciales con cabina simple. Tampoco hay versiones “básicas” de trabajo con equipamiento muy pelado – la Standard ya viene relativamente bien dotada. Gran parte de clientes particulares optó por la 4×4 Luxury, pues por un precio competitivo obtenían la camioneta full. Las 4×2 han sido menos demandadas, pero atraen a quienes quieren el look y espacio de una pick-up sin necesidad de 4×4 (y ahorrando unos miles de dólares). En cuanto a motorización predominante, hasta 2023 todas las Poer en Perú usan el diésel 2.0L de 160 HP. En 2024 GWM introdujo una Poer actualizada con motor 2.4L diésel de 183 HP (y quizás opción gasolina 2.0T de similar potencia para ciertos mercados), pero está por confirmarse su disponibilidad masiva. Por tanto, la gran mayoría de Poer circulando en Perú comparten la misma mecánica 2.0. Esto unifica el mantenimiento y hace que Great Wall concentre sus repuestos en un solo motor.

Respecto a colores y extras, la Hilux ofrece típicamente 5-6 colores (blanco, plata, gris, negro, rojo, a veces azul) y la Poer similares (blanco, plata, negro, azul, naranja en lanzamientos). En disponibilidad, Toyota suele tener stock constante de Hilux en diversos concesionarios (aunque en años de alta demanda hubo listas de espera), mientras que la Poer, al ser importada en volúmenes menores, podría requerir espera para ciertas combinaciones (p.ej. en 2022 hubo clientes esperando semanas por la versión automática azul).

En suma, Toyota brinda mayor variedad de versiones ajustadas a todo perfil (desde laboral básico hasta full lujo), y Great Wall simplifica la oferta en unas pocas versiones enfocadas en particulares medianamente equipadas hacia arriba. Esto refleja su estrategia: Hilux abarca todo el espectro de mercado, Poer va tras el cliente de gama media y alta que busca alternativa. Para un comprador, es más fácil encontrar “la Hilux exacta” que se adapte a su necesidad, mientras que con Poer quizás deba elegir entre las pocas disponibles (aunque igualmente cubren lo esencial: 4×2 o 4×4, manual o auto). Ambos modelos ofrecen tracción 4×4 con reductora en sus variantes off-road, algo clave.

19. Opinión final del experto

Toyota Hilux – La elección segura y resistente: La Hilux, con décadas de liderazgo, se reafirma en 2021+ como una camioneta prácticamente “todoterreno” en el sentido más amplio: es igualmente apta para el trote rudo del trabajo pesado, para viajes de aventura en condiciones difíciles, o para el día a día sin mayor sobresalto. Su mayor fortaleza radica en la confiabilidad mecánica y soporte postventa, atributos invaluables en un vehículo pensado para durar muchos años. Si bien en comodidad y tecnología no es la más avanzada, Toyota ha ido incorporando las funciones esenciales (conectividad smartphone, mejor audio, más airbags) manteniendo su ADN de durabilidad. Quien compra una Hilux difícilmente se arrepiente: sabe que obtiene un producto cuyos “costos ocultos” (mantenimiento, reparaciones, depreciación) serán bajos en el largo plazo, y que además cuenta con un valor de reventa excepcional en Perú. En manejo, la Hilux puede sentirse algo arcaica comparada con opciones más modernas, pero esto es parte de su encanto para muchos – es una herramienta robusta, honesta en sus reacciones y de la cual uno puede fiarse en entornos extremos. Para el usuario particular promedio, la Hilux ofrece la tranquilidad absoluta de tener un vehículo que lo acompañará por años sin dar sorpresas desagradables. Sus contras – suspensiones firmes, interior espartano en versiones base, seguro caro – son relativamente menores frente a sus pros. Especialmente en el Perú, donde el servicio Toyota y la disponibilidad de repuestos son sobresalientes, la Hilux es una compra “a prueba de tontos”: no destaca por extravagancias, pero tampoco falla en lo fundamental. Es el estandarte de su segmento, y aunque la competencia se ha puesto al día en varios aspectos, la Hilux mantiene esa combinación equilibrada de atributos que la hacen número uno en ventas y en preferencia histórica.

Great Wall Poer – La nueva competidora, sorprendentemente capaz: La Poer llega al ring con mucha fuerza, desafiando la noción de que “china = inferior”. Este modelo ha demostrado que un fabricante emergente puede ofrecer un producto bien construido, seguro y muy bien equipado, a un precio competitivo. Tras analizarla en detalle, queda claro que Great Wall hizo la tarea: la Poer cumple con los estándares clave (motor durable, chasis robusto, 4×4 eficaz) y además supera las expectativas en confort y tecnología. Para un usuario particular, la experiencia de conducción y disfrute diario de la Poer es francamente superior en aspectos como comodidad interior, silencio, gadgets, etc., frente a pickups tradicionales pensadas más para trabajo. Esto hace de la Poer una opción sumamente atractiva para quien prioriza esas cualidades “de auto moderno” sin renunciar a la practicidad de una pick-up. No todo es perfecto: la marca aún tiene terreno por ganar en confiabilidad percibida, red de servicio y reventa, factores en los que la Hilux aventaja ampliamente. Sin embargo, tras estos años iniciales, la Poer ha dado pocas malas noticias – la mayoría de sus dueños están contentos – indicando que su calidad real está por encima de lo que muchos esperaban. En definitiva, la Poer se consolida como la mejor pick-up de origen chino en el mercado actual peruano, y una alternativa válida incluso frente a las consagradas, siempre y cuando el comprador entienda y acepte el compromiso: obtiene lujo y ahorro inicial, a cambio de asumir un riesgo ligeramente mayor en aspectos como valor futuro o pequeñas fallas de “juventud” del modelo. Es, usando un símil, como ese retador joven que, sin tener la experiencia del campeón, exhibe talento y habilidades novedosas que podrían cambiar el juego.

Al final del día, ¿cuál destaca más y por qué? Si ponemos todo en la balanza, la Toyota Hilux sigue destacando como la opción más completa y segura en el largo plazo para el mercado peruano. Su liderazgo en confiabilidad, amplio respaldo postventa, excelente reventa y versatilidad probada en todo escenario le dan una ventaja sustancial, especialmente para usuarios que buscan un vehículo “para toda la vida” o para trabajo sin contratiempos. La Hilux sobresale porque cumple bien en todos los apartados críticos (durabilidad, potencia adecuada, seguridad, soporte), sin presentar flancos débiles importantes – es una apuesta casi garantizada, algo muy valioso al invertir una suma considerable.

Por otra parte, la Great Wall Poer destaca en un nicho específico: el del comprador que prioriza comodidad, modernidad y costo-beneficio. Allí, la Poer brilla al ofrecer prestaciones de camionetas de gama alta a precio de gama media. En usos particulares, orientados a ciudad y recreación moderada, la Poer puede incluso superar la experiencia que brinda una Hilux base, gracias a sus extras y suavidad. Sin embargo, globalmente considerada, la Poer aún está en proceso de ganarse el estatus que la Hilux ya tiene. En conclusión, la Hilux sobresale como mejor opción integral (especialmente pensando en usos intensivos, valor futuro y tranquilidad total), mientras la Poer sobresale como alternativa innovadora para quienes valoren equipamiento y confort y estén dispuestos a sacrificar algo de la certeza que ofrece Toyota en pos de un vehículo más lujoso por menos dinero. Ambos son excelentes en sus propios enfoques, pero ante la pregunta directa, la Hilux se lleva el “veredicto experto” como la pick-up más redonda y recomendable para el usuario peruano promedio, sin desmerecer el impresionante avance que representa la Poer en el segmento.

20. Puntuaciones separadas (Hilux vs. Poer)

A continuación se resumen las calificaciones comparativas de ambos modelos en aspectos clave, en una escala de 1 a 10 (siendo 10 la puntuación óptima):

CategoríaToyota HiluxGreat Wall Poer
Confiabilidad mecánica9/10 – Sobresaliente historial de fiabilidad, muy pocos problemas graves reportados. Alta longevidad incluso en uso severo.7/10 – Buen desempeño inicial sin fallas críticas conocidas, pero falta de historial a largo plazo. Algunos casos de fallas menores (sensor, DPF) reducen la confianza plena.
Valor de reventa10/10 – Líder en retención de valor. Depreciación mínima (~20% en 4 años) y altísima demanda de usados. Se vende rápido y a buen precio.6/10 – Depreciación moderada-alta (~10-15% anual). Menor base de compradores, ventas más lentas. Pierde más valor al salir de garantía. Aun así, mantiene mejor valor que pickups chinas previas.
Seguridad9/10 – Estructura robusta y 7 airbags disponibles. 5★ Latin NCAP en versiones recientes. Buen ESC y frenos. Carece de ADAS avanzados en 2021, pero fundamentalmente muy segura.8/10 – 6 airbags y electrónica avanzada (ADAS) en versión full. Probable 5★ ANCAP, aunque sin Latin NCAP oficial aún. Ofrece asistencias inéditas en el segmento, pero su efectividad real aún se sigue evaluando.
Costo de mantenimiento8/10 – Mantenimiento razonable y accesible dada la red Toyota. Repuestos abundantes y relativamente económicos. Puede ser ligeramente costoso en concesionario, pero se compensa con pocos arreglos inesperados.7/10 – Servicios oficiales con costo moderado (algo menor que Toyota). Repuestos de rutina disponibles, pero piezas específicas pueden tardar/importar. Red de talleres más limitada eleva potencial costo/tiempo en reparaciones mayores.
Experiencia de usuario7/10 – Experiencia de manejo robusta pero menos refinada. Interior cómodo pero básico en versiones estándar. Ideal para trabajo y uso mixto, quizá menos placentera para uso 100% urbano/familiar.9/10 – Muy satisfactoria para uso personal: manejo suave, interior amplio y lleno de comodidades. Nivel de equipamiento y detalles modernos que brindan agrado diario. Penaliza un poco la percepción de marca emergente para algunos usuarios.

Justificación: La Hilux obtiene calificaciones top en confiabilidad y reventa debido a su desempeño histórico intachable en esos rubros, y sobresale en seguridad y mantenimiento con puntuaciones altas. Donde puntúa más bajo es en experiencia de usuario, reflejando su ride más rústico. La Poer, por su parte, brilla en la satisfacción del usuario (confort/tecnología) y obtiene buena nota en seguridad gracias a sus sistemas avanzados, pero cae en reventa (incertidumbre de valor futuro) y algo en confiabilidad por ser aún nueva en el mercado. En general, las puntuaciones reflejan que Hilux domina en los aspectos duros de valor y confiabilidad, mientras Poer destaca en la vivencia cotidiana y equipamiento, quedando un escalón por detrás en garantía de largo plazo.

21. Puntuación general final (veredicto)

Hilux vs poer transformers

Puntuación general Toyota Hilux: 9.0/10
Puntuación general Great Wall Poer: 7.5/10

En el veredicto final, la Toyota Hilux se alza con la puntuación más alta, consolidándose como la mejor opción integral entre las dos. Su calificación de 9/10 refleja su sobresaliente equilibrio de virtudes: es sumamente confiable, segura y mantiene un valor de reventa inigualable, todo respaldado por la amplia red y experiencia Toyota en Perú. La Hilux cumple o excede las expectativas en los factores críticos que preocupan al comprador peruano – durabilidad, soporte postventa, y robustez comprobada – permitiéndole obtener esta nota casi perfecta. Aunque no encabeza en modernidad de equipamiento, esto no ensombrece su desempeño global, pues en los apartados esenciales puntúa excelente. Un 9 sobre 10 indica que es difícil encontrarle fallas significativas: la Hilux es prácticamente el “estándar de oro” de las pick-ups, y solo pequeños detalles (rigidez de manejo, menor tecnología de confort) le impiden alcanzar la perfección absoluta para todos los usuarios.

Por su parte, la Great Wall Poer obtiene un 7.5/10, una calificación muy respetable para una debutante en el segmento medio-alto. Esta puntuación evidencia que la Poer es un producto notablemente competitivo, que sobresale en ciertos rubros (confort, tecnología) pero al que aún le quedan puntos por madurar. Un 7.5 equivale a “buena/notable”: la Poer demuestra ser una camioneta buena en casi todo y excelente en algunos aspectos, pero arrastrando una leve penalización por la incertidumbre en confiabilidad a largo plazo y valor futuro. El comprador de la Poer obtiene un vehículo que, en el día a día, puede sentirse de 10 puntos en satisfacción – especialmente comparando lo pagado por lo obtenido – pero el experto modera la nota considerando el panorama completo: su menor trayectoria implica un riesgo que debe contemplarse, de ahí que su general baje a 7.5. Con todo, esta puntuación es testimonio de cuánto han mejorado los fabricantes emergentes; la Poer no se queda en la mitad del tablero, sino que compite cerca de veteranos de renombre, quedando a solo 1.5 puntos de la Hilux.

Veredicto: La Toyota Hilux 2021+ se erige como la camioneta más recomendable para el público peruano que busca un vehículo confiable, durable y con excelente respaldo, especialmente si el uso incluye trabajo o largas distancias fuera de ciudad. Su combinación de atributos le otorga la ventaja global en esta comparativa. Mientras tanto, la Great Wall Poer aparece como la mejor alternativa moderna para el comprador que prioriza comodidad y tecnología, ofreciendo una relación valor/precio difícil de ignorar. Si el objetivo es un uso particular no extremo y se está dispuesto a apostar por una marca emergente, la Poer brindará grandes satisfacciones y podría ser la compra inteligente. No obstante, si se busca minimizar cualquier riesgo y asegurar el máximo retorno y tranquilidad, la Hilux sigue siendo la campeona indiscutible, justificando su costo inicial más alto con creces a lo largo de los años. En síntesis, la Hilux destaca más por su excelencia integral y trayectoria, pero la Poer ha llegado fuerte, añadiendo presión al segmento – una señal positiva de que el beneficiario final será el consumidor, quien ahora tiene dos excelentes opciones en distintos frentes para elegir.

Fuentes: Comparativa propia basada en datos de Latin NCAP, ANCAP, fichas técnicas oficiales y reseñas en medios (Parabrisas, AbogadoMotor, Tracklink, Libero, Opinautos, etc.), además de listados de mercado (Neoauto, Autocosmos) y testimonios de usuarios en redes. Las calificaciones son asignadas por el analista en función de dichos informes objetivos y la experiencia sectorial.

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