Toyota Raize 2025: ¿el SUV barato que seduce en la vitrina pero decepciona en la calle?

1. Resumen general del vehículo

Raize ensamblado en indonesia

El Toyota Raize 2025 es un SUV subcompacto de entrada, concebido para atraer a un público joven con su estilo moderno y tamaño urbano. Aunque lleva el logo de Toyota, su verdadero origen es Daihatsu: fue desarrollado sobre la plataforma DNGA por esta filial japonesa y se vende también como Daihatsu Rocky. El Raize no se ensambla en Japón para nuestra región, sino en Indonesia, desde donde Astra Daihatsu Motor exporta este modelo a más de 50 países. Llegó a Latinoamérica alrededor de 2022 como el SUV más asequible de Toyota, posicionándose por debajo del Yaris Cross. En Perú debutó en 2023 como la camioneta Toyota más económica, buscando captar a quienes compran su primer SUV. En resumen, el Raize es un “Toyota” de alma Daihatsu, fabricado en Asia, que promete la practicidad y confiabilidad de la marca pero a bajo costo.

2. Especificaciones técnicas clave (Latinoamérica)

especificaciones del toyota raise

Las versiones más comunes del Raize en Perú y la región montan un motor 1.2 litros de 3 cilindros Dual VVT-i, atmosférico, que entrega alrededor de 87 HP (87.2 caballos) y 113 Nm de motor. Este motor va acoplado ya sea a una caja manual de 5 velocidades o a una automática CVT (transmisión continuamente variable) con modo secuencial de 7 marchas simuladas. La tracción es delantera (FWD) en todas las versiones regionales – a diferencia de Japón, donde existe opción 4WD. En algunos mercados (ej. México) se ofrece también un motor 1.0 litro turbo de ~98 HP con 140 Nm, pero en Perú únicamente llega el 1.2L aspirado. Todas las versiones en Perú comparten la misma configuración mecánica básica, variando solo el nivel de equipamiento (ej. Base 1.2 MT, Mid 1.2 MT y Mid 1.2 CVT). El Raize mide ~4 metros de largo y cuenta con 5 puertas, espacio para 5 ocupantes y una maletera de ~369 L. Destaca su altura al suelo de 200 mm, útil para caminos irregulares. En seguridad incluye de serie frenos ABS, distribución electrónica (EBD), control de estabilidad y 2 airbags frontales en la versión latinoamericana estándar (en otros países hay variantes con 6 bolsas). En suma, es un SUV ligero (~1 tonelada) con motor pequeño, tracción simple y equipamiento básico enfocado en economía de combustible y movilidad urbana.

3. Rendimiento y manejo: ciudad vs. carretera

Toyota Raize en ciudad Vs carretera

En ciudad, el Raize se desempeña de forma ágil y económica. Su dirección ligera y radio de giro reducido permiten maniobrar fácilmente en calles estrechas y estacionar sin esfuerzo. La suspensión, de tipo McPherson adelante, está calibrada para absorber bien los baches urbanos, y la altura libre evita golpes con rompemuelles o veredas altas. El motor 1.2L, aunque modesto, ofrece una respuesta suficiente a bajas velocidades y el consumo de combustible es destacado – varios propietarios señalan que “probablemente es de los más eficientes” en condiciones normales. Sin embargo, al salir a carretera sus limitaciones se hacen evidentes. Con menos de 90 HP, le cuesta recuperar velocidad y adelantar vehículos largos; de hecho, un dueño afirmó que “en autopista no sirve para rebasar”, debiendo planificar con mucha anticipación los adelantamientos. A 100 km/h o más, el pequeño motor 1.2 va muy revolucionado (sobre 3,000 rpm) y se filtra bastante ruido de motor y viento al habitáculo. La sensación de estabilidad tampoco es su punto fuerte debido a su peso ligero y dimensiones reducidas – a altas velocidades puede sentirse nervioso ante vientos laterales o al cruzarse con camiones. Conductores reportan que “no se siente muy plantado” y otros vehículos tienden a “bulearlo” por su tamaño menor. En rutas de montaña, la combinación de motor pequeño + CVT obliga a acelerar a fondo, elevando ruido y temperatura, aunque el control de descenso (HAC) y la tracción delantera cumplen mientras no se le exija como a un 4×4. En resumen: en ciudad el Raize es cómodo y eficiente, pero en carretera muestra falta de potencia y aplomo, penalizando la experiencia de manejo en viajes largos o sobrepasos frecuentes.

4. Fallas mecánicas y eléctricas comunes

A pesar de ser nuevo en el mercado, el Raize ha presentado ya fallas recurrentes reportadas por usuarios y entidades de seguridad. La más grave fue un defecto en la programación de la ECU del motor que podía afectar el servofreno en condiciones exigentes (altitudes elevadas con frenadas frecuentes). Esto motivó un recall masivo a inicios de 2025: en Perú se convocaron 2,968 unidades Raize (y Agya) fabricadas 2021-2024 para reprogramar la ECU gratuitamente. El problema era que, por un bug de software, el refuerzo de frenado podía reducirse y endurecer el pedal, aumentando la distancia de parada. Toyota corrigió esto vía actualización de la centralita en garantía. Otra falla mecánica seria proviene de las vibraciones excesivas del motor tricilíndrico: se han documentado casos donde la vibración rompió el soporte del múltiple de escape/catalizador, agrietándolo y dañando el sensor de oxígeno. Varios dueños en Panamá y Perú relatan haber tenido que soldar piezas del escape debido a este desperfecto estructural por vibración. También se han reportado filtraciones de refrigerante: un propietario mexicano informó que a los 15,000 km se vació el depósito de coolant por la parte superior del radiador; en el concesionario cambiaron el radiador en garantía y argumentaron (quizá dudando del cliente) que “se había apretado demasiado el tapón”. En la electrónica menor, algunos han tenido problemas con el sistema multimedia (pantalla “congelada” al arrancar el auto), o testigos del tablero encendidos erráticamente: hubo casos en que simultáneamente se encendían luces de check engine, ABS, control de tracción, etc., y el vehículo entraba en modo de emergencia sin acelerar, requiriendo apagar y encender – un usuario de Ecuador afirma que le sucedió repetidamente desde los ~43,000 km y que “ya lo llevé 6 veces al concesionario y vuelve el problema”. Esta situación sugiere alguna falla en sensores o la ECU que costó diagnosticar. En general, las quejas mecánicas más comunes incluyen: vibración notable del motor en ralentí, pequeños ruidos de suspensión o carrocería al pasar badenes (propios de un auto ligero) y embrague ruidoso en unidades mecánicas. Si bien el motor y la transmisión en sí no han mostrado fallos catastróficos tempranos, estos fallos periféricos (ECU de frenos, soportes, electrónica) merman la confianza en la confiabilidad inicial del Raize.

5. Reclamos frecuentes de usuarios (TikTok, YouTube, Facebook, Reddit, X)

En redes sociales abundan testimonios directos de propietarios del Raize, muchos de ellos exponiendo desilusiones y problemas. Uno de los reclamos más repetidos es la falta de potencia y ruidos en carretera: por ejemplo, un usuario en YouTube comentó que tras 1 año con su Raize decidió venderlo porque en autopista no podía ni adelantar y el ruido de motor era muy alto. Varios tiktokers y vloggers también han subido videos advirtiendo sobre este desempeño pobre en subidas o adelantamientos. Otro punto sensible es la vibración y estabilidad: en Reddit un dueño menciona que el Raize “tiembla mucho” y que planea vender el suyo (con dos años de uso) debido a lo incómodo que le resulta manejarlo así. En Facebook se consiguen relatos similares; un miembro de un grupo de autos señaló que la Raize “tampoco sirve en comodidad de manejo porque vibra demasiado” y que lo único positivo que rescata es el respaldo de reventa de Toyota. La sensación de inseguridad es otro tema: algunos conductores expresan que “no se sienten seguros adentro” del Raize, quizá por la ligereza de la carrocería y el hecho de saber que sólo tiene 2 airbags. En cuanto a la calidad interior, abundan quejas sobre los acabados económicos: plásticos duros en tablero y puertas, aislamiento acústico deficiente y ensamblajes simples. Un usuario filipino (mismo modelo) fue contundente: “el interior se ve barato comparado con otros vehículos del mismo precio”. También han circulado quejas en X (Twitter) y TikTok sobre detalles como faros poco potentes de fábrica (especialmente en noches de lluvia) – de hecho un propietario intentó mejorarlos y descubrió que no podía cambiar fácilmente las bombillas LED sin pasar por Toyota. En foros como Opinautos, las opiniones negativas mencionan “latas delgadas”, ausencia de equipamientos modernos y molestia porque Toyota ofrezca sólo 2 bolsas de aire en nuestra región. No todo es negativo: muchos usuarios elogian la economía de combustible, el aire acondicionado “helado” incluso en clima cálido y la facilidad para estacionar. Sin embargo, es claro que existe un consenso en redes de que el Raize sacrificó demasiado en potencia, aislamiento y seguridad, al punto que varios dueños manifiestan arrepentirse: “La voy a vender el año que viene… Lo único bueno de Toyota es el valor de reventa” confesó un usuario decepcionado.

Enlaces a quejas de usuarios en redes y foros:

  • TikTok: Vídeos de @fredy_carpower360 mostrando fallas y consejos sobre el Raize.
  • YouTube: Comentarios de usuarios en video review “2025 Toyota Raize – AutoTV Perú” (Daniel Chavarría) y en “Compré una Toyota Raize 2022 – Opinión” indicando falta de potencia.
  • Facebook: Grupo Toyota Raize Perú – testimonios de vibraciones y garantía (ej: usuario reportó varias visitas a taller por luces de alarma).
  • Reddit: Hilo “¿Comentarios sobre la Toyota Raize?” en r/Gulong – varios dueños discuten vibraciones y planean vender. Otro hilo en r/CarsPH con pros/contras detallados (e.g. ruido exterior alto, interior espartano).
  • Twitter (X): Búsquedas con #ToyotaRaize – comentarios aislados sobre desempeño en pendientes y referencia al recall de frenos.

(Se incluyen referencias a estas fuentes al final del informe.)

6. Durabilidad y confiabilidad en condiciones peruanas

Toyota raize uso urbano

El Toyota Raize encara las condiciones de Perú y Latinoamérica con resultados mixtos en cuanto a durabilidad. Por el lado positivo, muchos propietarios destacan su resistencia estructural en ciudad: la suspensión robusta y el despeje de 20 cm le permiten sobrevivir a rompemuelles, huecos y trochas ligeras sin daños significativos. La simpleza mecánica (motor pequeño sin turbo en Perú, caja CVT sin mucha potencia que gestionar) tiende a minimizar averías graves en los primeros años. Asimismo, al ser un vehículo ligero, componentes como frenos y neumáticos sufren menos desgaste comparados con SUVs más pesados. Dicho esto, la confiabilidad a largo plazo del Raize aún está a prueba, y las altas temperaturas, altitud y uso rudo típicos de nuestra región han sacado a relucir algunas debilidades. La ya mencionada vibración del motor 1.2L ha generado dudas sobre su robustez: un motor de 3 cilindros siempre vibra más que uno de 4, y si bien Daihatsu instaló soportes para absorberlo, los casos de piezas fisuradas (escape) indican que bajo uso intensivo continuo (taxis, viajes diarios largos) podría haber fatiga prematura. Adicionalmente, el episodio del recall de frenos minó la confianza de varios clientes, pues se trataba de una falla potencialmente peligrosa en descensos andinos. En condiciones de costa y clima cálido, el Raize ha respondido bien – no se han divulgado problemas de recalentamiento importantes fuera del tema del radiador puntual. En la sierra, usuarios sugieren conducir con prudencia porque el motor pierde más potencia con la altura (sin turbo) y exigirlo demasiado puede disparar el consumo o encender testigos de check engine. Confiabilidad electrónica: más allá de la ECU reprogramada, el resto de componentes (sensores ABS, inyección, etc.) son de origen japonés/indonesio con estándares Toyota, así que no han dado mayores sorpresas. Sin embargo, la calidad de ensamble general es más cercana a la de un auto económico que a la de un Toyota tradicional: se escuchan algunos grillos (ruidos de plásticos) en cabina con los kilómetros, y la lámina de la carrocería es delgada – susceptible a abolladuras de estacionamiento. En climas húmedos y lluviosos, no hay reportes de filtraciones de agua, lo cual habla bien de la construcción inicial. Resumiendo, el Raize aguanta el trato cotidiano urbano sin mayores quejas, pero quedan interrogantes sobre su durabilidad a largo plazo bajo trabajo pesado (p.ej., taxi en Lima 12 horas al día o trochas serranas diarias). La reputación de confiabilidad Toyota se ve atenuada por ser un modelo nuevo desarrollado por Daihatsu, con algunos detalles ya evidenciados; aún así, si se usa dentro de sus límites y se mantiene adecuadamente, debería brindar varios años de servicio razonablemente confiable – aunque quizás no con la solidez proverbial de un Corolla hecho en Japón.

7. Costo de mantenimiento en Perú (repuestos y servicio)

Costo de servicios toyota raize

El mantenimiento periódico del Raize resulta, en general, accesible comparado con SUVs mayores, aunque no tan barato como un auto chino de similar tamaño. Toyota del Perú promociona un costo sugerido de mantenimiento hasta los 50,000 km de ~S/546 por servicio, lo cual equivale aproximadamente a S/0.11 por km – cifra alineada con vehículos compactos. Este valor incluye mano de obra y consumibles en concesionario para los servicios básicos (cambio de aceite 0W-20 sintético, filtro de aceite, aire, revisión de frenos, etc.). No obstante, algunos propietarios han señalado que en concesionarios oficiales se suelen inflar las facturas agregando tratamientos o limpiadores no solicitados; es recomendable ceñirse al plan de fábrica para no encarecerlo. Los repuestos mecánicos de rutina (filtros, pastillas de freno, bujías) son fáciles de conseguir en Perú a través de la red Toyota y relativamente económicos dada la sencillez del motor 1.2 (compartido con otros modelos Daihatsu en Asia). Un filtro de aire, por ejemplo, ronda los S/50-80 genérico, y pastillas de freno delanteras originales ~S/300 el juego. Donde puede haber inconvenientes es en repuestos de carrocería o específicos de este modelo: al ser importado y reciente, piezas como faros, parachoques o el radiador pueden no estar en stock inmediato fuera de Lima. Algunos talleres reportan demoras de semanas en llegar partes de Indonesia para colisiones. Esto ha llevado a abusos de precio en el mercado negro: un faro LED de Raize puede cotizarse por encima de S/1,200 nuevo. Otro aspecto es que la disponibilidad de servicios fuera de la red oficial es limitada – dado que el motor es poco común aquí, muchos talleres independientes no tienen experiencia previa con él. Aun así, al ser Toyota, varios mecánicos conocen la marca y pueden atenderlo en lo básico. Usuarios en Lima han acusado a ciertos concesionarios de cobrar en exceso por trabajos simples (p.ej. más de S/150 por cambio de batería de llave o actualizaciones de software), por lo que conviene comparar entre distintos concesionarios Toyota o acudir a talleres de confianza después de vencida la garantía. En síntesis, mantener un Raize en Perú no golpea demasiado el bolsillo: los servicios regulares están en línea con un auto económico (unos S/550 cada 10 mil km aprox.), los repuestos de desgaste son razonables y la eficiencia del motor reduce gastos de combustible. Solo se debe considerar un ligero sobreprecio en piezas de colisión y estar atento a prácticas de upselling en la posventa oficial.

8. Valor de reventa y depreciación real en Perú

Si algo mantiene el Raize, es el valor de reventa, fiel al prestigio Toyota. En el mercado peruano de segunda mano, este modelo ha mostrado depreciación moderada, incluso menor a la de algunos rivales. Por ejemplo, un Toyota Raize Mid CVT 2022 con ~32 mil km se oferta cerca de los US$ 15,290 (S/60 mil) en seminuevos de concesionario, cuando su precio nuevo rondó US$18-19 mil; es decir, apenas un 15–20% menos tras ~2 años de uso. De forma similar, particulares en Lima venden Raize 2023 con 15-20 mil km por montos alrededor de US$16,500-17,000, conservando ~80–85% del valor original. Estas cifras superan claramente la retención de valor de SUVs de origen chino o incluso de competidores directos. ¿Por qué sucede? En parte, porque la demanda de vehículos Toyota semi-nuevos es alta – muchos compradores confían en la marca y están dispuestos a pagar casi precio de nuevo por ahorrarse la espera. Además, el Raize ha tenido listas de espera en años recientes, lo que mantiene sus cotizaciones firmes. Un usuario resumió cínicamente su experiencia: “La voy a vender… Lo único bueno de Toyota es el valor de reventa”, implicando que recuperará buena parte de su dinero. En plataformas locales como Neoauto y Mercado Libre se constata que prácticamente no existen Raize por debajo de US$14k, incluso unidades 2022 con uso intensivo (ej. 30-40 mil km). En contraste, modelos como Chevrolet Groove o Hyundai Venue del mismo año sí bajan de ese umbral. Esto sugiere que el blindaje de la marca Toyota protege fuertemente al Raize de la depreciación. Cabe mencionar que versiones con transmisión mecánica podrían depreciarse un poco más por menor demanda (la mayoría prefiere automático en este segmento), pero aun así retienen buen valor comparadas con manuales de otras marcas. En conclusión, el Raize obtiene muy buena nota en valor de reventa: a los 2-3 años de uso sigue costando cercano a su precio original, y para un propietario insatisfecho esto es un alivio ya que puede venderlo sin gran pérdida. Claro está, habrá que ver en el largo plazo (>5 años) si esta tendencia continúa, pero por ahora es de los SUV subcompactos con mejor depreciación en el mercado peruano.

9. Historial de robos: ¿atractivo para delincuentes?

Toyota raize

En materia de robos, el Raize no figura entre los modelos más buscados por la delincuencia en Perú. Las estadísticas de la PNP ubican a camionetas como la Hilux y autos compactos muy populares (Yaris, Probox) en el tope de robos, tanto en asaltos violentos como en hurto estacionado. El Toyota Raize, al ser relativamente nuevo y menos abundante en las calles, no ha atraído mayor atención de ladrones hasta la fecha. Su tamaño subcompacto y perfil familiar hacen que no sea el vehículo predilecto para robo al paso (los delincuentes suelen preferir camionetas grandes o autos medianos de alta demanda). Además, viene de fábrica con inmovilizador electrónico y alarma, lo que dificulta su hurto por métodos tradicionales. Dicho esto, ningún auto es inmune: se han reportado casos aislados de robo de Raize en países vecinos (p. ej. en Filipinas ha habido algunos sustraídos), pero en Perú no hay registros públicos de bandas dedicadas a este modelo. Es más probable que sufra robo de autopartes – por ejemplo, emblemas, aros, e incluso sus espejos retrovisores. En Lima ha habido una ola de robos de logos y letras de marca de vehículos modernos, y el Raize no sería la excepción si se deja en la vía pública sin vigilancia. Sus faros LED podrían ser atractivos para el mercado negro por su alto costo de reposición, y sus llantas de aleación de 16” también podrían ser objetivo de robo ocasional. Por lo demás, este modelo no es particularmente útil para delincuentes (no es muy potente para “raqueteos”, ni tiene piezas intercambiables con vehículos más populares). En suma, el riesgo de robo del Raize es bajo a moderado: no encabeza las listas ni es blanco preferido, pero conviene tomar precauciones básicas (alarma activa, seguro contra robo, estacionarlo en lugares seguros). Su principal salvaguarda es ser un modelo poco común aún en el hampa, y su sistema de seguridad electrónica. No obstante, su marca Toyota siempre podría convertirlo en objetivo a medida que aumente el parque – la reputación de confiabilidad hace que sus piezas tengan mercado. Por ahora, puede decirse que un dueño de Raize duerme más tranquilo que uno de Hilux o Civic, aunque nunca está de más la prudencia.

10. Compatibilidad con accesorios modernos

pantalla android para toyota raize en cardroid.pe

A pesar de ser un modelo económico, el Raize es bastante compatible con accesorios tecnológicos actuales. De fábrica, las versiones peruanas incluyen un sistema multimedia con Apple CarPlay y Android Auto integrados, por lo que ya ofrece conectividad moderna para smartphones sin requerir cambios. Sin embargo, algunos propietarios buscan mejorar o personalizar la experiencia con radios Android de mayor tamaño, cámaras 360°, sensores extra, etc. En ese aspecto, el Raize cuenta con buen soporte en el mercado aftermarket: existen autoradios Android específicos para el modelo, ofrecidos por tiendas especializadas. Por ejemplo, la empresa peruana Cardroid comercializa una pantalla Android homologada para Toyota Raize (años 2020-2024), con marco y conectores dedicados, que convierte el tablero en un centro multimedia estilo Tesla cardroid.pe. Dicha unidad viene con Android 13, pantalla 9” QLED, compatibilidad con mandos al volante y CarPlay inalámbrico, y su instalación es prácticamente plug & play. Esto indica que sí existe un autoradio específico para el Raize en Cardroid.pe, pensado para reemplazar el equipo original sin adaptar cables. Además de radios, hay disponibilidad de cámaras de retroceso y 360° compatibles; de hecho, algunas versiones en otros países traen cámara 360 de serie, por lo que en Perú se puede instalar un kit similar aprovechando las conexiones preexistentes. En tiendas locales (como Mitsui Accesorios o por internet) se consiguen sensores de parqueo adicionales, tiras LED, luces interiores ambient light e incluso kits de sonido diseñados para encajar en los huecos del Raize. El puerto OBD2 del vehículo permite añadir módulos como monitores de presión de neumáticos o asistentes de conducción (por ejemplo, un sensor de punto ciego extra si la versión no lo trajo). También es popular instalar un cubre motor inferior (splash shield) de posventa – muchos dueños lo adquirieron en Asia en portales tipo Lazada para reducir ruido y proteger el motor reddit.com. En resumen, no hay mayores impedimentos para modernizar el Raize: su arquitectura eléctrica es sencilla y ampliamente soportada. El modelo comparte muchos accesorios con el Daihatsu Rocky, lo que ha generado oferta global. Solo hay que cuidar la garantía al hacer modificaciones eléctricas: se recomienda realizarlas en talleres especializados. Pero para quien desee añadir radio Android, CarPlay, cámaras o sensores, el Raize resulta muy adaptable. (Por cierto, en cardroid.pe está disponible la radio Android específica, lo cual confirma que hay soporte dedicado en nuestro mercado).

11. Experiencia posventa en Perú (concesionarios y talleres)

Mantenimiento de toyota raize

El servicio posventa para el Raize en Perú ha tenido luces y sombras. Al ser un modelo de volumen relativamente nuevo, Toyota del Perú y sus concesionarios han intentado brindar buena atención – por ejemplo, durante el recall de la ECU de frenos, muchos clientes reportan que fueron atendidos con celeridad e incluso con vehículo de reemplazo mientras reprogramaban el suyo. La red de concesionarios Toyota es amplia (Lima y provincias), así que la cobertura para mantenimiento y reparaciones está garantizada. No obstante, han surgido quejas puntuales sobre demoras y “abusos”. Algunos propietarios señalan que ciertos concesionarios tardan mucho en obtener repuestos específicos del Raize, al no tener stock local y depender de importación (especialmente en provincias). Esto causa inmovilizaciones prolongadas cuando ocurre un choque o falla poco común. También se ha hablado de costos elevados en la red oficial: por ejemplo, cobrar mano de obra mínima de 1 hora por trabajos sencillos o precios de repuestos bastante altos comparados con alternativas genéricas. Un tema sensible son los reclamos de garantía. Si bien Toyota ofrece 5 años o 150,000 km de garantía en el Raize, hubo casos como el de un usuario que llevó su camioneta repetidamente por un problema electrónico intermitente y la solución definitiva tomó varias visitas. Este cliente manifestó frustración, aunque finalmente la garantía cubrió todo. Por otro lado, varios dueños destacan la seriedad de Toyota al enfrentar fallas: cuando surgió lo del servofreno, Toyota Perú informó al Indecopi de inmediato y se comunicó con los propietarios para agendar el arreglo. En cuanto a talleres oficiales, la calidad de la atención varía: concesionarios grandes como Mitsui o Grupo Pana suelen recibir mejores comentarios, mientras que en algunos más pequeños se mencionan “demoras y falta de comunicación”. Un posible abuso reportado es la insistencia en servicios no necesarios (ej. vender aditivos, alineamientos no requeridos) para engrosar la factura – algo común en la industria, pero que usuarios del Raize han notado. Fuera de la red Toyota, la posventa es limitada pero emergente: ya existen talleres independientes que se especializan en Daihatsu/Toyota compactos donde se puede llevar para segunda opinión o mantenimiento post-garantía a menor costo. También la comunidad en redes (Facebook, foros) se asesora compartiendo experiencias de talleres recomendados. En síntesis, la experiencia posventa del Raize en Perú es aceptable: respalda el producto cumpliendo garantías y con amplia disponibilidad de servicio, pero con áreas de mejora en tiempos y transparencia de costos. No se han visto escándalos de negación de garantías hasta ahora – Toyota suele responder ante defectos – pero el cliente debe estar informado y exigir sus derechos (por ejemplo, los recall son obligatorios y gratuitos). Un consejo para nuevos propietarios: realizar los mantenimientos en concesionario al menos durante la garantía, y documentar cualquier falla recurrente para que Toyota la atienda sin costo. Así se podrá llevar la relación con la marca de forma más fluida y evitar los “abusos” típicos.

12. Evaluación por tipo de usuario

tipo de usuario de toyota raize

Familias: El Raize puede funcionar como vehículo familiar de entrada para una pareja joven con un hijo o para familias pequeñas. Ofrece 5 plazas (las traseras algo justas para 3 niños) y un maletero decente de ~369 L que acomoda una carreola y compras básicas. Para uso urbano-familiar cumple: es fácil de conducir para ambos cónyuges, económico en combustible (importante para el presupuesto familiar) y su posición de manejo elevada da sensación de seguridad a padres primerizos. Sin embargo, para viajes familiares largos puede quedarse corto en espacio (equipaje limitado, plazas traseras estrechas para adolescentes) y en seguridad – solo 2 airbags no son ideales para proteger a toda la familia. Tampoco incluye salidas de aire acondicionado traseras, lo que puede incomodar a los niños en calor. En resumen, apto para familias pequeñas urbanas, pero si la familia crece o se viaja mucho, quizá quede chico en espacio y protección.

Jóvenes y solteros: Este es el público objetivo del Raize. Para un conductor joven (20s-30s) ofrece estilo moderno, pantalla con CarPlay/Android Auto para su música y apps, y bajo consumo para su bolsillo. Es ágil en la ciudad, permitiendo salir con amigos, ir a la universidad o el trabajo sin complicaciones de estacionamiento. Su estética SUV compacta tiene atractivo “cool” y está disponible en colores bitono llamativos en otros mercados (aunque en Perú llegaron menos opciones). Por el lado negativo, a un conductor joven entusiasta podría decepcionarle su desempeño modesto: no es un auto rápido ni pensado para adrenalina, así que si busca emociones al volante, el Raize se sentirá perezoso. Pero para movilidad urbana, es una opción segura y práctica para jóvenes, con el plus del respaldo Toyota. Muchos compradores primerizos lo eligieron por encima de hatchbacks como Yaris por la moda SUV.

Taxistas y choferes de aplicaciones (Uber/Indriver): Algunos Raize ya circulan como taxis urbanos o vehículos de app, aprovechando su economía de combustible y espacio algo mayor al de un citycar. Tiene ventajas: el maletero aunque no enorme, puede cargar 1-2 maletas medianas (suficiente para la mayoría de viajes de aeropuerto), la altura facilita subir y bajar pasajeros, y el costo operativo es bajo (ahorro en gasolina de 1.2L). Además la confiabilidad Toyota da cierta tranquilidad para uso intensivo. No obstante, presenta también contras para servicio público: su tamaño compacto podría ser percibido como menos cómodo que un sedán (espacio trasero limitado para 3 adultos grandes con equipaje). Tampoco sobresale en potencia si se necesita ir con prisa o subir pendientes cargado con 4 pasajeros – podría resultar lento y forzado. Algunos taxistas han mencionado que el aire acondicionado enfría bien incluso lleno, lo cual es positivo en verano. En general, el Raize puede funcionar como taxi en ciudad y es más refinado que un Tico, pero probablemente un sedán como Yaris sea preferible para máximo confort de pasajeros. Aun así, para repartos o uso empresarial ligero el Raize es útil: su espacio trasero con asientos abatibles permite llevar paquetes, y su imagen de SUV compacto resulta presentable para empresas.

Flotas corporativas: Algunas empresas podrían considerar el Raize para flotas de ventas, supervisores o servicio técnico que se mueven mayormente en ciudades. Ofrece la imagen de “camionetita” con el costo de un auto pequeño – atractivo para proyectar solidez de marca sin gastar de más. Su mecánica sencilla implica menos gastos de flota en mantenimiento y combustible. Por ejemplo, una compañía de telecomunicaciones podría entregarlo a supervisores para visitar tiendas: caben equipos básicos, sube a barrios de cerro por su despeje, y lleva el logo de Toyota confiable. Sin embargo, en flotas suele primar la robustez y en eso quizás un modelo como el Suzuki Vitara o un Renault Duster (más rudos) serían preferibles si se anticipa trato duro. El Raize en manos de múltiples choferes podría sufrir más sus delicadezas (ej. los interiores plásticos se rayan fácil, y exigirlo en carretera con exceso de carga no es ideal). Así que como vehículo corporativo urbano funciona bien, pero para flotas exigentes (minería, construcción) no es idóneo.

En suma, el Raize se adapta mejor a usuarios urbanos, parejas jóvenes o como segundo auto familiar. Para entusiastas de la velocidad o familias numerosas se quedará corto. Para taxis y empresas, es usable pero con reservas. Es un vehículo multiuso liviano, cuyo desempeño pleno se aprecia en ciudad y cuya principal gracia es la economía; quien necesite más espacio o potencia deberá mirar un segmento arriba.

13. Comparativa con rivales en Latinoamérica

tabla del toyota raize

El Toyota Raize compite en un segmento muy peleado de SUV subcompactos (A-B). Sus rivales directos en Latinoamérica incluyen modelos como Nissan Kicks, Chevrolet Groove, Kia Stonic, Hyundai Venue, Renault Stepway, Suzuki Vitara Brezza e incluso el Seat Arona, entre otros. Frente a ellos, el Raize destaca en algunos aspectos pero queda rezagado en otros.

Motorización y desempeño: El Raize (87 HP NA o 98 HP Turbo según versión) es de los menos potentes. Un Nissan Kicks trae un 1.6L de ~118 HP, claramente más solvente para carretera. El Chevrolet Groove (origen chino) tiene ~110 HP pero con motor 1.5L que entrega más torque en baja. El Kia Stonic y Hyundai Venue ofrecen motores 1.6 de ~121 HP o turbo 1.0 de 100 HP según mercado; el Venue turbo compite directamente con el Raize turbo en potencia. Así, el Raize atmosférico es el más lento del lote – “bastante lento para ser un crossover”, admitió hasta un dueño satisfecho de la versión turbo. Donde sí gana es en consumo: su pequeño motor y peso (~1,000 kg) le permiten consumos alrededor de 50-55 km/galón combinados, superiores a rivales más pesados.

Espacio y dimensiones: Con ~4,03 m de largo, el Raize es de los más cortos (un Kicks mide ~4,30 m). Su maletero de 369 L empata con el Stonic y supera al Stepway, pero es menor que los ~400 L del Kicks o Arona. En habitabilidad, el Kicks y Vitara ofrecen asientos traseros más holgados para 3 pasajeros, mientras el Raize es más angosto (1,71 m de ancho). Para 4 ocupantes, todos cumplen decentemente, pero para 5 apretados, rivales un poco más anchos son preferibles.

Precio-valor: El fuerte del Raize es ofrecer la marca Toyota a precio contenido. En Perú su rango de US$16k-19k lo hacía más barato que un Kicks (desde ~US$20k) o un Vitara (similar ~US$20k), aunque competía con los chinos (Groove ~US$17k). Muchos clientes optaron por “el Toyota más barato” confiando en su valor futuro y postventa. Sin embargo, si comparamos lo que obtienes por tu dinero, un Chevrolet Groove ofrece motor 1.5 más potente, 4 airbags y pantalla grande por similar precio; un Renault Stepway ofrece motor 1.6 16v 110HP y 4 airbags un poco más barato; y un Suzuki Vitara (aunque más veterano) trae motor 1.6 118HP, 6 airbags (GLX) y más espacio por un poco más de dinero. Así que el Raize gana en precio inicial bajo y economía, pero pierde en prestaciones y seguridad contra varios rivales.

En conclusión, el Toyota Raize sobresale en consumo y valor de reventa, y sirve a quien prioriza marca y eficiencia. Pero en una comparativa global, se ve comprometido en potencia, equipamiento de seguridad y refinamiento frente a sus pares. Quien busque un SUV urbano y confiable podría escogerlo, pero si busca mejor performance o seguridad, opciones como la Nissan Kicks (ya con 6 airbags) o incluso la nueva Kia Sonet/Stonic podrían ser alternativas más equilibradas. Toyota confía en su imagen para competir, pero en este segmento ávido de contenido, el Raize resulta uno de los más austeros, algo que los rivales están aprovechando para diferenciarse.

14. Confort y tecnología interior

interior de toyota raize

El interior del Toyota Raize se caracteriza por la simplicidad funcional, lo cual repercute en un confort adecuado pero no lujoso. En términos de espacio, las butacas delanteras son cómodas para adultos de talla promedio, con asientos relativamente blandos y buena distancia al techo gracias a la altura del vehículo. Sin embargo, la banca trasera tiene cojines algo planos y espacio justo para las piernas si van pasajeros altos adelante – tres adultos viajarán apretados en trayectos largos. Los materiales utilizados evidencian la orientación económica: predominan plásticos rígidos en tablero, paneles de puertas y consola; no hay acolchado suave excepto en el apoyabrazos del conductor en algunas versiones. Esta austeridad ha llevado a comentarios de que “el interior se ve barato” comparado con competidores. No obstante, el ensamble es aceptablemente sólido: no se oyen crujidos graves en las primeras miles de km, aunque usuarios señalan la aparición de pequeños ruidos tipo “grillos” en cabina al circular en caminos irregulares, achacándolos a piezas plásticas que vibran con el motor y el terreno.

En cuanto a tecnología, el Raize ofrece lo básico moderno: todas las versiones vienen con pantalla táctil central (de 7” o 8” según año y mercado) con conectividad Apple CarPlay y Android Auto, una adición muy valorada para la experiencia de usuario. Esta interfaz permite usar apps de navegación, música y mensajería del smartphone directamente en el auto, subsanando la carencia de un navegador nativo. También cuenta con una cámara de reversa de serie en mercados como Perú, la cual cumple su función aunque su resolución es modesta y sufre en condiciones nocturnas. El climatizador (en versiones Mid) es automático digital pero monozona, y curiosamente carece de control de dirección de aire (solo ajusta temperatura y velocidad, con flujo fijo). Aun así, propietarios elogian que el aire acondicionado enfría muy bien incluso con clima extremo. En versiones full de otros países hay elementos interesantes como tablero digital de 7” personalizable y botón de encendido push start, pero en las versiones populares locales el tablero es mixto analógico con pantalla pequeña de información.

Respecto al aislamiento acústico, este es un punto débil del confort: la cabina del Raize deja filtrar bastante ruido externo, tanto del camino como del viento. Conductores mencionan que a velocidades superiores a 80 km/h se escucha el rodar de los neumáticos y el viento contra los espejos de forma notable, debido a la escasa insonorización – “puedo oír mucho el ruido de afuera” comentó un usuario. El motor 3 cilindros también se deja oír dentro, especialmente al acelerar fuerte; tiene un tono ronco típico que penetra la cabina más que en autos de 4 cilindros mejor aislados. Esto puede restar confort auditivo en viajes largos, obligando a subir el volumen de la música.

En comodidades, el Raize trae lo esencial: ventanas y espejos eléctricos, cierre centralizado con control remoto, volante multifunción forrado en poliuretano (no cuero en versiones base), y suficientes portaobjetos (portavasos delanteros, bolsillos en puertas, y compartimento bajo el reposabrazos central en versiones Mid). El espacio de carga es flexible; los asientos traseros son abatibles 60/40, permitiendo ampliar la maletera para objetos grandes. No posee lujo como asientos de cuero, techo solar ni iluminación ambiental – prestaciones disponibles en rivales más costosos como Seat Arona o en versiones tope que aquí no llegaron.

La calidad de marcha en ciudad es confortable: la suspensión filtra bien las imperfecciones a baja velocidad, brindando un andar suave. Pero en carretera irregular, el corto entre-ejes produce rebotes secos en cabina y cierta sensación “brincona”. El aislamiento de la suspensión tampoco es total, percibiéndose golpes fuertes al caer en baches profundos. En resumen, el Raize ofrece un confort de marcha aceptable en entorno urbano, con asientos cómodos y buen aire acondicionado, pero sufre de acabados austeros, insonorización deficiente y equipamiento limitado en comparación con SUVs de gama superior. La tecnología interior cubre las necesidades básicas (conectividad, cámara) pero no deslumbra. Es el tipo de interior práctico y sin pretensiones que uno espera en un vehículo orientado a la funcionalidad más que al lujo.

15. Seguridad activa y pasiva

airbags toyota raize

La seguridad es un ámbito crítico donde el Raize ha quedado en deuda, especialmente en su configuración para Latinoamérica. En seguridad pasiva (protección de ocupantes en choques), las versiones vendidas en Perú y la región traen solo 2 airbags frontales (conductor y copiloto), una dotación mínima hoy en día. No cuenta con airbags laterales ni de cortina, lo que deja descubiertos el tórax y la cabeza de los ocupantes en impactos laterales severos. Esta carencia se reflejó en su resultado de pruebas independientes: en 2024 Latin NCAP evaluó la versión regional más básica del Raize y le otorgó apenas una estrella de cinco posibles. El informe detalló que la estructura se consideró inestable en el choque frontal, y hubo protección pobre para el pecho del conductor; además, la falta de airbags laterales resultó en protección marginal en impactos de costado. La puntuación final fue ~41% en protección de ocupante adulto, un valor bajo que evidencia deficiencias estructurales y de equipamiento. Cabe señalar que Toyota/Daihatsu realizó a mediados de 2023 una revisión de la estructura del Raize tras descubrir irregularidades en pruebas internas – se sospecha que algunos refuerzos se mejoraron después de la producción inicial. Es posible que unidades fabricadas tras ese ajuste sean algo más seguras, pero Latin NCAP no especificó la fecha de fabricación del modelo testeado. En cualquier caso, la ausencia de airbags adicionales limita su calificación. En contraste, en México el Raize se vende con 6 airbags en todas las versiones, lo que habría mejorado la protección lateral (pero esa configuración no es la que recibimos en Perú).

En seguridad activa (prevención de accidentes), el Raize incorpora lo básico obligatorio: frenos ABS en las 4 ruedas con Distribución Electrónica (EBD), y Control Electrónico de Estabilidad (ESC/VSC) de serie. Estos sistemas ayudan a mantener el control en maniobras bruscas o superficies resbalosas – un punto a favor, pues años atrás algunos competidores no traían ESC en versiones base. Además, cuenta con Asistente de Arranque en Pendiente (HAC) que evita que ruede hacia atrás al iniciar en una cuesta. También incluye sensores de reversa y alarma de cinturón desabrochado, elementos simples pero útilesl. No obstante, carece de ADAS avanzados como frenado autónomo de emergencia, alerta de cambio de carril o control crucero adaptativo, asistencias que empiezan a verse en el segmento en modelos más nuevos (por ejemplo, algunas versiones del Nissan Kicks o del VW T-Cross ofrecen AEB). En ese sentido, el Raize se queda rezagado en tecnología preventiva.

El vehículo sí ofrece un par de características destacables de seguridad en versiones superiores de otros mercados: un monitor de punto ciego (BSM) en los espejos y alerta de tráfico cruzado trasero – sistemas que ayudan a evitar colisiones cambiando de carril o retrocediendo. No está claro si dichas funciones están activas en las versiones latinoamericanas (posiblemente solo en la variante Turbo tope de México). En Perú, al menos, no se han publicitado, así que es probable que la versión vendida no las tenga operativas.

En cuanto a la estructura y construcción, el Raize utiliza aceros de alta resistencia en partes de la carrocería, pero como demostró Latin NCAP, su celda de supervivencia no es tan rígida como cabría esperar: la cabina sufrió deformación en el test frontal. Esto es preocupante, dado que la integridad estructural es clave para soportar impactos fuertes. Es posible que, al ser un vehículo ligero y económico, Toyota haya priorizado mantener bajo el peso/coste a costa de algo de rigidez.

En equipos de seguridad secundarios, incluye anclajes ISOFIX para sillas de bebé en los asientos traseros, lo que facilita una instalación segura de sistemas de retención infantil – un punto a favor para familias jóvenes. También trae de serie luces LED diurnas y faros principales LED en muchas versiones, mejorando la visibilidad del auto para otros conductores. Los frenos son de disco adelante y tambor atrás (suficientes por su peso), con distancias de frenado correctas.

Resumiendo, el Raize brinda un paquete de seguridad mínimo indispensable: ESC + 2 airbags + ABS, que cumplen con la normativa pero no ofrecen un margen amplio de protección. Sus rivales más cercanos en precio también a veces escatiman (algunos ofrecen 2 airbags en versiones base), pero la tendencia regional ya va hacia 4-6 airbags, donde el Raize actual queda corto. Si la seguridad es prioridad, este modelo lamentablemente no destaca, al punto que su propio fabricante fue criticado por Global NCAP tras los resultados decepcionantes. Es de esperar que Toyota mejore este aspecto en futuras actualizaciones (posiblemente añadiendo más airbags en Latinoamérica, tal como hizo en México tras el revuelo). Por ahora, el comprador del Raize debe ser consciente de sus limitaciones en seguridad y conducir con precaución extra, aprovechando al máximo las ayudas electrónicas que sí tiene para evitar accidentes en primer lugar.

16. Disponibilidad de versiones en Perú

En el mercado peruano, Toyota comercializa el Raize en unas pocas versiones bien definidas, enfocadas en brindar opciones de transmisión y equipamiento sin complicar demasiado la oferta. Al 2025, las versiones disponibles oficialmente en Perú son:

  • Raize 1.2 MT (Base): Versión de entrada, motor 1.2L, transmisión manual 5 velocidades. Es la más accesible (precio lista ~US$16,830). Viene con equipamiento esencial: 2 airbags, ABS+ESC, aire acondicionado manual, radio con pantalla táctil y 4 parlantes, cámara de retroceso, aros de aleación de 16”, tapiz de tela sencillo, sin luces antiniebla (en base) y sin smart key. Ideal para quien busca el menor precio y no le molesta hacer los cambios.
  • Raize 1.2 Mid MT: Versión intermedia con caja mecánica. Agrega sobre la base algunos extras de confort y estilo. Por ejemplo, en exterior añade neblineros LED y detalles cromados; en interior puede incluir climatizador digital, volante forrado, y asiento del piloto ajustable en altura. Mantiene los mismos 2 airbags. Su precio ronda US$18,420. Es para quien quiere un poquito más de equipamiento manteniendo la transmisión manual.
  • Raize 1.2 Mid CVT: Versión intermedia con transmisión automática CVT. Es la opción más equipada disponible localmente. Incluye lo del Mid MT pero con la comodidad de la CVT y paddle shifts simulando 7 marchas. Tiene también sensores de estacionamiento delanteros y traseros, cámara de retroceso, y en algunas unidades, monitor de punto ciego (según reportes extraoficiales, aunque Toyota no lo destaca). Su precio lista está alrededor de US$19,460mitsuiautomotriz.com. Este es el modelo que la mayoría de clientes particulares elige por la conveniencia de la caja automática en ciudad.

Cabe mencionar que en otros países existen versiones adicionales, como una Raize 1.2 X (más básica aún, con tapabarros negros, enfocada a flotas) o la mencionada Raize 1.0 Turbo (de mayores prestaciones). En Perú por ahora no se ofrece la motorización turbo ni una variante con 4WD. Todas las disponibles son FWD 1.2L y comparten la misma base mecánica. La diferenciación es principalmente en acabados: por ejemplo, la Mid CVT puede tener bitono (techo negro) en algunos colores importados, y viene con smart key de acceso sin llave a diferencia de la base.

La disponibilidad en concesionarios a inicios de 2025 es buena, con stock de estas tres versiones en la mayoría de locales Toyota a nivel nacional, gracias a que el modelo ya se estabilizó en oferta tras la alta demanda inicial. Toyota incluso ofrece su programa Seminuevos Certificados con el Raize, dado que hay suficientes circulando.

En resumen, Perú cuenta con 3 versiones del Raize: Base MT, Mid MT, Mid CVT – cubriendo el espectro desde lo más económico hasta la comodidad automática, pero sin llegar a una versión “full full” con seis airbags u otros lujos. Esto posiciona al Raize peruano más como una opción racional de transporte que como un mini-SUV premium. Los compradores tienen la opción de elegir manual vs CVT según preferencia y presupuesto, sabiendo que en seguridad y motor no hay diferencias entre ellas. Para quien deseaba más potencia o airbags, por ahora la única vía sería importar extraoficialmente la versión turbo, cosa que prácticamente no ocurre. Por tanto, las opciones están claras y acotadas en el mercado local.

17. Opinión final del experto

Puntaje final del toyota raize

El Toyota Raize 2025 se presenta como una apuesta de Toyota por lo práctico y accesible, pero tras un análisis objetivo y severo, queda claro que el modelo tiene deficiencias notables que no pueden pasarse por alto. Como vehículo urbano cumple con solvencia: es económico, fácil de maniobrar y respaldado por una marca de confianza. Sin embargo, las quejas masivas de usuarios y las evidencias técnicas apuntan a que Toyota –a través de Daihatsu– ha recortado esquinas en calidad y seguridad para lograr un precio competitivo. Un experto automotriz no puede sino criticar duramente ciertos aspectos: la decisión de venderlo en Latinoamérica con solo 2 airbags resulta inaceptable en 2025, comprometiendo la seguridad de los ocupantes y quedando muy por detrás del estándar de la industria. Igualmente, el desempeño en carretera es decepcionante; un motor que “no puede con la autopista” como señalaron varios propietarios evidencia que la prioridad fue la eficiencia antes que la versatilidad.

En confiabilidad, si bien no ha habido fallos catastróficos, los problemas de vibraciones rompedoras de piezas (catalizador) y el recall de frenos demuestran que la calidad de ingeniería es cuestionable para llevar el emblema Toyota. La marca suele presumir durabilidad, pero en el Raize esa durabilidad está por verificarse y ya tiene manchas tempranas. La experiencia de manejo tampoco libra: es un vehículo que cumple en lo básico pero no emociona ni proporciona un confort destacado; más bien expone al conductor a ruidos, a sensación de fragilidad en altas velocidades, y a un interior espartano donde se nota la tijera del costo.

Como crítico severo, debo decir que Toyota confía en su reputación para vender el Raize, pero esa confianza puede desgastarse si los usuarios siguen sintiendo que “lo único bueno es el valor de reventa” y poco más. No se le están regalando cortesías a la marca aquí: el Raize, objetivamente, falla en entregar la calidad tradicional de Toyota en apartados clave. Es un “SUV” de papel: aparenta ser una camioneta, pero por construcción y capacidad está más cerca de un compacto económico elevado.

¿Significa esto que es un mal vehículo en términos absolutos? No del todo: tiene méritos en espacio para su tamaño, gran economía de combustible y la red de servicio de Toyota que lo respalda. Para muchos usuarios urbanos puede ser una solución satisfactoria. Pero en comparación con el estándar actual, el Raize queda debiendo en seguridad, potencia y refinamiento. Desde una perspectiva técnica, la calificación global del Raize es baja: Toyota no ha logrado un producto redondo; se siente más un “experimento low-cost” que un digno miembro de la familia Toyota. El experto concluye que, salvo que las prioridades del comprador sean únicamente la economía y la marca, hay opciones más equilibradas en el mercado. Si Toyota quiere mantener su prestigio, deberá corregir las falencias del Raize pronto (más airbags, tal vez un motor híbrido o turbo en toda la gama, mejor aislamiento). Hasta entonces, este modelo recibe una crítica severa: aprueba por poco en lo básico, pero reprueba en lo que realmente importa cuando se busca un vehículo duradero y seguro para la familia.

Confiabilidad mecánica y durabilidad – 5/10

Si bien el Raize comparte la fama de confiabilidad de Toyota en su tren motor sencillo (no suele dejar botado al conductor), las evidencias de fallas tempranas y desgaste inusual reducen su puntuación. La necesidad de un recall masivo por un error de programación crítico en frenos es un golpe fuerte a la confianza. Asimismo, problemas como vibraciones que quiebran soportes del escape o luces de alerta repetitivas muestran que la ingeniería Daihatsu aplicada no alcanzó los niveles tradicionales de robustez. Por otra parte, no se han reportado fallos graves en motor o transmisión – el simple 1.2L y la CVT han funcionado sin desperfectos mayores – y eso rescata algunos puntos. Los mantenimientos preventivos son suficientes para que el Raize siga andando sin dramas en condiciones normales. No obstante, su durabilidad bajo estrés (carga plena, caminos difíciles, uso intensivo) es dudosa; ya hay propietarios planeando venderlo tras un par de años por estas inquietudes. En resumen, confiabilidad promedio: arranca siempre y consume poco aceite, pero pequeños desperfectos y una construcción aligerada limitan su durabilidad a largo plazo. Veredicto: Adecuado para un uso moderado sin mayores sobresaltos mecánicos, pero no inspira la total tranquilidad que uno esperaría de un “Toyota” nuevo – se lleva 5 de 10 estrellas.

Valor de reventa – 9/10

En este apartado el Raize brilla con luz propia. Pocos vehículos subcompactos retienen valor como él, gracias al emblema Toyota y a la fuerte demanda. A pesar de sus falencias, el mercado de segunda mano lo valora alto: es conocido que “lo único bueno es el valor de reventa” llega a decir algún dueño desencantado. Un Raize con un par de años apenas pierde un 15-20%, muy por debajo de la depreciación típica (25-30%) de otros autos económicos. Este rendimiento excepcional se debe a la imagen de confiable y económico, que atrae compradores de seminuevos dispuestos a pagar casi precio de nuevo por evitar esperas. Además, la red Toyota certifica usados, lo que mantiene cotizaciones firmes. El único factor que le resta una estrella y no le da 10 perfecta es la incertidumbre a futuro: si las quejas de calidad proliferan, podría afectarse su reputación y por ende su precio usado en varios años. Pero al día de hoy, es de los mejores de su segmento en reventa. Veredicto: Valor residual altísimo, prácticamente líder entre mini SUVs – 9/10 estrellas.

Seguridad – 3/10

El aspecto más flojo del Raize. Ofrece apenas el mínimo legal en airbags y lo complementa con algunas ayudas electrónicas, pero esto está lejos de lo aceptable en 2025. Latin NCAP lo confirmó con un resultado paupérrimo de 1 estrella debido a protección deficiente y falta de bolsas laterales. Si bien tiene control de estabilidad y frenos ABS, que son vitales, la protección pasiva es insuficiente: en un choque serio, los ocupantes corren más riesgo que en casi cualquier otro SUV moderno, lo cual es grave. No trae asistencias avanzadas de prevención que ya asoman incluso en vehículos de bajo costo. A su favor, los sistemas como ESC y sensores funcionan correctamente y ayudan a evitar percances menores. Pero no es consuelo: Toyota ha quedado muy rezagada aquí, entregando en Latam un vehículo inseguro comparado al estándar global (ellos mismos venden Raize con 6 airbags en otros mercados). Veredicto: Suspenso claro en seguridad, solo rescata puntos por el ESC; protección insuficiente para conductor y familia – 3 de 10 estrellas. (Posiblemente el comprador deberá “conducir con pies de plomo”, porque el auto no perdonará errores igual que rivales mejor equipados).

Costos de mantenimiento y experiencia de usuario – 6/10

Costos de mantenimiento: Puntuación: 7/10. Mantener el Raize no es oneroso. Sus servicios en concesionario tienen precios razonables (alrededor de S/550 por cita hasta 50k km), el motor sencillo consume poco combustible y pocas piezas caras. Además, la disponibilidad de repuestos Toyota y la durabilidad mecánica básica contribuyen a que no haya gastos sorpresivos frecuentes. Sin embargo, algún costo extra viene por repuestos específicos (ej. un faro LED o parabrisas pueden costar bastante) y la necesidad de servicio en red oficial durante garantía, donde algunos trabajos se cobran alto. Aún así, comparado con SUVs más complejas, el Raize es barato de mantener. Por eso roza una nota alta, pero bajamos un punto por los potenciales “extras” no previstos y alguna demora de repuestos que inmoviliza el auto.

Experiencia de usuario (confort + quejas): Puntuación: 5/10. Aquí el Raize queda a medias. En el día a día urbano, muchos usuarios están satisfechos con su maniobrabilidad, visibilidad panorámica y la conectividad del carro – aspectos que hacen agradable conducirlo en ciudad. Pero las múltiples quejas documentadas (ruido interno, vibración, sensaciones de poca solidez) empañan la experiencia. En trayectos largos, el conductor y pasajeros deben tolerar un habitáculo ruidoso y un desempeño modesto, lo que puede generar fatiga y frustración. La calidad percibida del interior es baja, restando puntos en satisfacción, y las limitaciones en comodidad (espacio justo, suspensiones rebotonas con carga) hacen que no todos los viajes sean placenteros. Muchos propietarios iniciales, tras la novedad, han acabado algo desencantados con “los detallitos” del auto, desde la austera atmósfera interior hasta temas más serios como la seguridad ya mencionada. Dicho esto, quienes entienden el propósito del Raize (transporte eficiente de A a B) suelen adaptarse y valorar sus fortalezas. Pero objetivamente, la experiencia de uso es dispar: buena en ciudad ligera, deficiente cuando se le exige o comparado con un vehículo de mayor categoría. Por tanto, se queda con un aprobado simple.

Puntuación final promediada: 5.8/10 (≈ 6/10). A la luz de las categorías evaluadas, el Toyota Raize obtiene un promedio apenas por encima de la mitad de la escala. Sin embargo, debido a sus falencias graves en seguridad y calidad, la calificación global se inclina a la baja – redondeando a 5/10 estrellas. En otras palabras, es un producto cumplidor en ciertas áreas (valor de reventa, economía) pero seriamente comprometido en otras que son cruciales, lo que impide recomendarlo sin reservas. Si bien brilla en algunos apartados, sus puntos débiles pesan lo suficiente para opacar el conjunto, quedando como un vehículo que solo satisfará plenamente a un perfil de usuario muy específico y tolerante con sus limitaciones.

Referencias (formato APA):

  • Autocosmos. (2021, 1 mayo). Toyota Raize, firme candidato a desembarcar en Latinoamérica. Autocosmos Costa Rica. Recuperado de noticias.autocosmos.crnoticias.autocosmos.cr.
  • Rufasto, P. (2023, 17 julio). Toyota Raize 2023, la SUV de la marca japonesa más económica en Perú: ¿cuál es su precio? La República. Recuperado de larepublica.pelarepublica.pe.
  • Visor.ph. (2025, 21 febrero). Toyota PH anuncia major recall for Raize over ECU issue (Frank Schuengel). Recuperado de visor.phvisor.ph.
  • Infobae Perú. (2025, 12 marzo). Inspeccionarán miles de autos Toyota y Honda por fallas que provocarían riesgos de accidentes (A. Delgado Tong). Recuperado de infobae.cominfobae.com.
  • Latin NCAP. (2024, septiembre). Resultado Toyota Raize + 2 Airbags – Latin NCAP 1 estrella. Latin NCAP. Recuperado de motorpasion.com.mxmotorpasion.com.mx.
  • Motorpasión México. (2024, 5 septiembre). El Toyota Raize lo pasa mal en las pruebas de seguridad de Latin NCAP… (Gerardo García). Recuperado de motorpasion.com.mxmotorpasion.com.mx.
  • Opinautos. (2024). Caso Toyota Raize – fallas y problemas reportados por usuarios. Opinautos.com. [Entrada de foro] Ejemplos recuperados de opinautos.comopinautos.com.
  • Reddit (r/CarsPH). (2025). “Brutally honest thoughts about the Toyota Raize” – user reviews thread. [Foro en línea]. Contribuciones destacadas de RespondMajestic4995 & BTSloth, 3 meses atrás. Recuperado de reddit.comreddit.com.
  • Reddit (r/Gulong). (2024). “¿Comentarios sobre la Toyota Raize?” – hilo de discusión. [Foro en línea]. Testimonio de usuario [borrado] indicando planes de venta y opinión sobre reventa. Recuperado de reddit.com.
  • Grupo Pana Seminuevos. (2025). Listado seminuevo Toyota Raize 1.2 MID CVT 2022 (31,659 km). Grupopana.com.pe. Precio de referencia recuperado de grupopanaseminuevos.com.pe.

Enlaces a publicaciones en redes sociales y fuentes de usuario:

  • TikTok (2023): @fredy_carpower360 – Videos virales analizando fallas del Toyota Raize (vibraciones, pruebas en pendientes, etc.).
  • YouTube (2025): Canal AutoTV Perú (Daniel Chavarría)“2025 Toyota Raize – Product Review”. Comentarios de usuarios destacando falta de potencia en autopistayoutube.com.
  • Facebook (2024): Grupo “Toyota Raize Perú Club”. Post de usuario contando visitas a taller por luces de check engine y experiencia con garantía (enero 2024).
  • Reddit (2024): r/Gulong – Usuario (anónimo) señala “tiembla mucho… planeo venderla el año próximo” ref. a Toyota Raizereddit.com. Discusión sobre vibraciones y valor de reventa.
  • Twitter/X (2025): Búsqueda #ToyotaRaize – Menciones aisladas al recall de frenos en Chile y opiniones breves de manejo en cuesta (ej. usuario @Driver_pe, tweet 14/02/2025).

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