Ranger Vs Hilux : La Ford Ranger 2025 Destruye el Imperio de la Hilux 2025: ¿Está Muerta la Leyenda de Toyota?

1. Resumen General de Cada Modelo

Ford Ranger 2025: La nueva generación de la Ford Ranger llega completamente renovada, posicionándose como una de las pickups medianas más avanzadas tecnológicamente. Fabricada en Argentina para la región, adopta un diseño más robusto y moderno, con influencias del estilo F-150 en su frontal. Incorpora motores diésel EcoBlue de última generación en distintas configuraciones (4 cilindros Turbo y Bi-Turbo, y un potente V6 en la versión tope), mejorando notablemente potencia y torque respecto a su predecesora. Destaca por su setup de chasis optimizado: tiene mayor distancia entre ejes y trocha más ancha que la generación anterior, lo que redunda en mejor estabilidad y espacio en cabina. La Ranger 2025 ofrece además nuevas tecnologías de asistencia al conductor (según versión), un interior completamente rediseñado con pantalla táctil vertical tipo tablet (SYNC 4) y 7 airbags de serie. Ford busca con esta Ranger combinar la versatilidad de trabajo (1 tonelada de carga, bastidor reforzado) con un nivel de comodidad y conectividad superior, apuntando a usuarios que usan la camioneta tanto para el trabajo como para la vida familiar y recreativa.

Toyota Hilux 2025: La Hilux es un icono de durabilidad en el mundo de las pickups y la edición 2025 reafirma esa reputación. Ensamblada en plantas de Argentina o Tailandia (según lote) para el mercado latinoamericano, mantiene su arquitectura tradicional de chasis de largueros y eje rígido trasero, pero con mejoras constantes en respuesta a la competencia. El diseño recibió un facelift en los últimos años: parrilla trapezoidal cromada, faros LED más agresivos y apliques robustos que realzan su presencia. Si bien estructuralmente es continuista, Toyota ha afinado la Hilux en suspensión y motor: el motor turbodiésel 1GD de 2.8 litros ahora entrega ~201 HP, con un torque mayor disponible a bajo régimen (hasta 500 Nm con caja automática), mejorando aceleración y capacidad de carga. La Hilux 2025 ofrece también más equipamiento en seguridad – en versiones altas incluye 7 bolsas de aire y controles de tracción/estabilidad – y una cabina renovada con pantalla táctil de 8-9’’ compatible con Android Auto/Apple CarPlay. Aun así, en su esencia sigue siendo la Hilux de siempre: fiable, apta para castigo y altamente valorada en reventa, cualidades por las que es preferida en entornos rurales, industria y por usuarios que buscan “una camioneta para toda la vida”.

2. Tabla Comparativa de Especificaciones Técnicas Clave (Perú) Ranger vs Hilux

A continuación se comparan las especificaciones técnicas principales de todas las versiones oficiales de Ford Ranger 2025 y Toyota Hilux 2025 disponibles en Perú:

Ford Ranger 2025 – Versiones y Especificaciones (Perú)

Versión	Motor (cilindros)	Potencia	Torque	Tracción	Transmisión	Dimensiones (L/A/Al en mm)
Ranger XL 4×2 MT Diésel	2.0L Turbo (L4)	170 HP @ 3500 rpm	405 Nm @ 1750 rpm	4×2 (trasera)	Manual 6 velocidades	5350 / 1910 / 1870 aprox. (cabina doble)
Ranger XL 4×4 MT Diésel	2.0L Turbo (L4)	170 HP @ 3500 rpm	405 Nm @ 1750 rpm	4×4 Part-Time	Manual 6 velocidades	5350 / 1910 / 1880 aprox. (4×4 añade altura)
Ranger XLS 4×2 MT Diésel	2.0L Turbo (L4)	170 HP @ 3500 rpm	405 Nm @ 1750 rpm	4×2 (trasera)	Manual 6 velocidades	5350 / 1910 / 1870 aprox.
Ranger XLS 4×4 MT Diésel	2.0L Turbo (L4)	170 HP @ 3500 rpm	405 Nm @ 1750 rpm	4×4 Part-Time	Manual 6 velocidades	5350 / 1910 / 1880 aprox.
Ranger XLT 4×4 AT Diésel	2.0L Bi-Turbo (L4)	210 HP @ 3750 rpm	500 Nm @ 1750 rpm	4×4 Part-Time	Automática 10 velocidades	5370 / 1910 / 1880 aprox. (equipamiento extra aumenta peso)
Ranger Limited 4×4 AT Diésel (LTD)	3.0L Turbo (V6)	250 HP @ 3250 rpm	600 Nm @ 1750 rpm	4×4 Part-Time	Automática 10 velocidades	5370 / 1910 / 1890 aprox. (V6 añade peso)
Ranger Raptor 4×4 AT (especial)	3.0L Bi-Turbo (V6, gasolina)	397 HP @ 5650 rpm	583 Nm @ 3500 rpm	4×4 Permanente	Automática 10 vel. (off-road)	5360 / 2028 / 1920 (suspensión deportiva)

Notas: Todos los motores diésel de Ranger cuentan con Common-Rail e intercooler. La versión Raptor (gasolina) es importada en volúmenes limitados, enfocada en alto desempeño off-road (no incluida en precios regulares). Las dimensiones de largo/ancho/alto varían ligeramente según accesorios (ganchos, estribos, neumáticos). Capacidad de carga útil ~900 kg en versiones diésel estándar; Raptor ~700 kg (suspensión de alto rendimiento). Tanque de combustible ~80 L. Frenos delanteros de disco ventilado y traseros de tambor en versiones estándar; Raptor trae discos en las cuatro ruedas. Dirección asistida electrónicamente en toda la gama.

Toyota Hilux 2025 – Versiones y Especificaciones (Perú)

Versión	Motor (cilindros)	Potencia	Torque	Tracción	Transmisión	Dimensiones (L/A/Al en mm)
Hilux Cabina Simple 4×2 Chasis 2.4 (Work)	2.4L Turbo (4L)	148 HP @ 3400 rpm	400 Nm @ 1600 rpm (40.7 kgm)	4×2 (trasera)	Manual 5 velocidades	5075 / 1800 / 1690 (chasis sin tolva)
Hilux Cabina Simple 4×4 Chasis 2.8 (Work)	2.8L Turbo (4L)	201 HP @ 3400 rpm	420 Nm @ 1400 rpm (MT) 500 Nm @ 1600 rpm (AT)	4×4 Part-Time	Manual 6 vel. / Aut. 6 vel.	5070 / 1855 / 1795 (chasis)
Hilux Cabina Doble 4×2 2.4 STD	2.4L Turbo (4L)	148 HP @ 3400 rpm	400 Nm @ 1600 rpm	4×2 (trasera)	Manual 6 velocidades	5325 / 1800 / 1795 (doble cabina base)
Hilux Cabina Doble 4×2 2.4 SR	2.4L Turbo (4L)	148 HP @ 3400 rpm	400 Nm @ 1600 rpm	4×2 (trasera)	Manual 6 vel. (Aut. 6 vel. opcional)	5325 / 1800 / 1795
Hilux Cabina Doble 4×4 2.4 SR	2.4L Turbo (4L)	148 HP @ 3400 rpm	400 Nm @ 1600 rpm	4×4 Part-Time	Manual 6 vel. (Aut. 6 vel. opcional)	5325 / 1855 / 1815 (4×4 agrega altura y overfenders)
Hilux Cabina Doble 4×4 2.8 SR	2.8L Turbo (4L)	201 HP @ 3400 rpm	420 Nm @ 1400-3400 rpm (MT)	4×4 Part-Time	Manual 6 velocidades	5325 / 1855 / 1815
Hilux Cabina Doble 4×4 2.8 SRV	2.8L Turbo (4L)	201 HP @ 3400 rpm	500 Nm @ 1600-2800 rpm (AT)	4×4 Part-Time	Automática 6 vel.	5325 / 1855 / 1815
Hilux Cabina Doble 4×4 2.8 SRV AT	2.8L Turbo (4L)	201 HP @ 3400 rpm	500 Nm @ 1600-2800 rpm (AT)	4×4 Part-Time	Automática 6 vel.	5325 / 1855 / 1815
Hilux GR-Sport 4×4 AT (especial)	2.8L Turbo (4L)	202 HP @ 3400 rpm	500 Nm @ 1600 rpm (AT)	4×4 Part-Time	Automática 6 vel. (suspensión GR)	5325 / 1870 / 1815 (monotubo GR, neumáticos AT)

Notas: Motores diésel Toyota GD con inyección common-rail e intercooler. El motor 2.4L (código 2GD-FTV) entrega ~150 HP y ~400 Nm, mientras el 2.8L (1GD-FTV) entrega ~201 HP; su torque varía con la transmisión: ~42.7 kg·m (420 Nm) en versiones mecánicas y hasta ~50.8 kg·m (~500 Nm) en automáticas. Todas las Hilux 2025 incluyen tracción trasera o 4×4 desconectable con caja de transferencia manual electrónica (H2-H4-L4) y reductora. Suspensión delantera independiente de doble horquilla y trasera de eje rígido con ballestas. Frenos delanteros de disco ventilado y traseros de tambor. Capacidad de carga útil ~1000 kg (según versión) y tanque de combustible ~80 L. Las dimensiones de ancho/alto difieren en versiones equipadas (los modelos 4×4 SR/SRV tienen vías ensanchadas con overfenders, de ahí ancho ~1.855 m vs ~1.800 m en modelos 4×2 básicos). La Hilux GR-Sport añade suspensión deportiva monotubo y detalles Gazoo Racing, sin aumentar potencia pero optimizada para off-road severo.

3. Rendimiento y Manejo en Ciudad, Carretera, Carga y Off-Road – Ranger Vs Hilux

En ciudad: La Ford Ranger 2025 ofrece una conducción más refinada que generaciones previas. Su nueva suspensión (con recalibración de resortes y amortiguadores) y el chasis ensanchado brindan un rodaje más suave en baches urbanos, acercándose al confort de un SUV. La dirección eléctrica es liviana para maniobrar y el radio de giro es competitivo, aunque sigue siendo un vehículo grande (5.35 m de largo) que puede sentirse ancho en calles estrechas. La aceleración urbana con el motor 2.0 turbodiésel es ágil gracias al buen torque a bajas rpm (405 Nm desde ~1750 rpm), permitiendo despegues rápidos en semáforos incluso con carga moderada. La caja automática de 10 marchas en la Ranger XLT/Limited realiza cambios imperceptibles, optimizando el consumo en tramos detenidos y mejorando la respuesta en tráfico intermitente. Por su parte, la Toyota Hilux mantiene un comportamiento más rústico en ciudad: su suspensión trasera de ballestas, pensada para soportar 1 tonelada, tiende a transmitir las irregularidades cuando la camioneta va vacía – varios dueños mencionan que “la suspensión es dura” y algo rebotona en asfalto irregular. No obstante, Toyota ha ido afinando este aspecto; la Hilux 2025 incorpora mejoras que suavizan ligeramente el andar (nuevos bujes y calibraciones). En agilidad urbana, el radio de giro de la Hilux es bueno y su visibilidad panorámica excelente por la posición de manejo alta. El motor 2.8 diésel (201 HP) brinda empuje suficiente, pero la entrega de potencia es más lineal y menos “vigorosa” en bajas que la Ranger Bi-Turbo; en ciudad, usuarios reportan consumos del orden de 7 a 10 km/L para la Hilux 2.8 AT dependiendo del tráfico, similar a la Ranger (la Ranger 2.0 Bi-Turbo ronda 8–9 km/L en ciudad en uso real). En resumen, la Ranger se siente más cómoda y silenciosa en entornos urbanos (mejor aislación de cabina, menos ruido de motor), mientras la Hilux se percibe más rígida pero ágil y de fácil mantenimiento para el día a día citadino.

En carretera: Ambos modelos ofrecen excelentes aptitudes ruteras, pero con matices. La Ranger V6 3.0 (250 HP, 600 Nm) sobresale en adelantamientos y arrastre en pendientes pronunciadas – su potencia es superior a casi todo rival, permitiéndole mantener cruceros altos con menor esfuerzo. La Ranger Bi-Turbo 2.0 (210 HP) también brilla en carretera: la caja de 10 marchas mantiene al motor en su punto óptimo, logrando recuperaciones rápidas sin necesidad de reducir varias marchas (por ejemplo, al adelantar de 80 a 120 km/h la Ranger baja suavemente de 10° a 7° o 6° marcha entregando todo el torque). Además, la Ranger incluye modos de manejo que ajustan la respuesta del motor/transmisión; en modo Eco reduce consumos y en modo Sport estira cambios para mejor reacción. Su estabilidad en línea recta a alta velocidad es muy sólida gracias al aumento de trocha y a un centro de gravedad bien balanceado – se siente plantada y con menor body-roll que la generación anterior, dando confianza al conductor. La Hilux, con su motor 2.8L actualizado, también mantiene cruceros de 120 km/h sin dificultad; de hecho, su torque máximo de 500 Nm (en AT) le permite recuperar velocidad dignamente, aunque su caja automática de 6 marchas es más lenta y a veces debe reducir 1 o 2 cambios más que la Ranger para lograr el mismo empuje en adelantamiento. En cuanto a consumos en ruta, la Hilux 2.8 AT suele rondar ~11 km/L (hasta ~9 L/100 km) en conducción moderada, mientras la Ranger 2.0 Bi-Turbo puede estirarse a ~13–14 km/L gracias a la 10ª marcha y su motor más pequeño. La estabilidad y frenado de la Hilux a alta velocidad ha mejorado con los controles electrónicos, pero algunos usuarios mencionan sensación de ligera inestabilidad de la zaga en baches rápidos (“un poco inestable al ir rápido en ripio o curvas” según opiniones). La Ranger, al equipar frenos de disco traseros en la versión Raptor y un avanzado control de estabilidad, transmite más aplomo en maniobras evasivas. En resumen, para viajes largos por carretera la Ranger ofrece mayor comodidad de marcha (menor vibración, cabina más silenciosa) y potencia sobrante para adelantamientos, mientras la Hilux brinda un manejo seguro y predecible, con la ventaja de su sencillez mecánica que inspira confianza en trayectos extensos.

Bajo carga y trabajo: En este aspecto, la Hilux demuestra por qué es tan apreciada en labores duras. Su suspensión trasera está diseñada para llevar carga pesada de forma constante; con 700–1000 kg en la tolva, la camioneta se asienta y en realidad su ride mejora (el peso aploma las ballestas). Agricultores, mineros y constructores suelen destacar que la Hilux “aguanta castigo” llevando equipamiento por trochas difíciles sin daños en chasis ni tren motriz – la robustez de sus componentes es comprobada por años. Además, el esquema mecánico tradicional (eje rígido, menos electrónica compleja en versiones base) la hace más resistente a sobrecargas ocasionales. Por su parte, la Ranger también ofrece 1 tonelada de carga útil y un chasis muy reforzado en esta generación (incrementó secciones de largueros); puede desempeñarse igualmente bien cargada, pero su enfoque es ligeramente más lifestyle. La suspensión de la Ranger está ajustada para un balance entre confort y carga, por lo que con peso máximo puede asentir un poco más (hace bottom-out antes que la Hilux en baches fuertes, debido a tarado algo más blando para confort). Dicho esto, la Ranger V6 con su enorme torque de 600 Nm ofrece una ventaja clara al remolcar o subir pendientes con carga: tiene más sobrante de fuerza que la Hilux (cuyo torque es 420–500 Nm). Por ejemplo, para arrastrar un tráiler o remolque pesado en altura, la Ranger V6 va más desahogada. En contraste, la Hilux cuenta con relaciones de diferencial cortas en versiones mecánicas que le otorgan fuerza bruta en primera marcha para sacar cargas desde parado (ideal para obras). Otro punto práctico: la facilidad de mantenimiento bajo uso rudo. Muchos operadores señalan que la Hilux, al tener mecánica muy extendida, consigue repuestos en cualquier provincia rápidamente y los mecánicos conocen sus “mañas” – esto minimiza tiempos muertos en flotas. La Ranger demanda a veces equipo de diagnóstico especializado en temas electrónicos, lo cual en zonas remotas es menos accesible. Resumiendo: para carga continua y trabajo diario extremo, la Hilux ofrece una confiabilidad y robustez ligeramente superiores (menos probabilidades de fallos con abuso constante), mientras que la Ranger puede hacerlo casi a la par pero sumando mayor potencia – siendo ideal para quien combine trabajo con necesidad de desempeño (por ejemplo, halar una lancha, transportar maquinaria a buen ritmo en carretera, etc.).

Off-road y rutas rurales: Ambos modelos cuentan con tracción 4×4 de caja reductora tradicional, aptos para terracería, barro y ascensos difíciles. La Hilux tiene una larga historia en terrenos extremos: su nombre es sinónimo de fiabilidad en expediciones. En caminos rurales rotos, la Hilux 2025 mantiene esa reputación – su bastidor reforzado soporta flexiones sin inconvenientes y los ángulos todo-terreno son buenos (ataque ~29º, salida ~26º en doble cabina 4×4. Su despeje al suelo de ~286 mm en las versiones 4×4 le permite sortear huellas profundas y obstáculos rocosos. Un punto fuerte es la sencillez de su 4×4: mediante perilla o palanca (según versión) se conecta la doble tracción y la marcha baja (L4) de forma mecánicamente confiable, sin depender de complejos sistemas – ideal en zonas donde la electrónica severa podría fallar. Además, el control de tracción activo de Hilux está calibrado para el barro y tierra, frenando ruedas que patinan y enviando potencia a las que traccionan, mejorando su capacidad de avance en condiciones resbalosas. La Ranger, especialmente en sus versiones avanzadas y la Raptor, eleva el nivel off-road con tecnología: ofrece modos de terreno (ej. Mud/Ruts, Sand en la Raptor) que ajustan acelerador, cambios y control de tracción para optimizar el avance. La Ranger Raptor incluso incluye amortiguadores Fox de competición, bloqueo de diferenciales delantero y trasero y neumáticos todo terreno de fábrica, permitiéndole “volar” por dunas y caminos de alta velocidad donde la Hilux estándar no podría mantener el ritmo. En la Ranger estándar XLT/Limited, el 4×4 también cumple muy bien: trae bloqueo de diferencial trasero y control de descenso en pendientes, ayudándole a encarar obstáculos técnicos. Su ángulo de ataque (~30º) y despeje (~235 mm en XLT, algo menor que Hilux) la limitan solo levemente en trialeras muy pronunciadas, pero para la mayoría de rutas 4×4 cumple sin problemas. Algunos aficionados off-road señalan que la Hilux tiene una ligera ventaja en confiabilidad “cuando estás en medio de la nada”, gracias a menos riesgo de sobrecalentamiento de transmisiones o fallos electrónicos – de hecho en expediciones por zonas remotas de Perú (selva, montaña) la Hilux suele ser la montura predilecta. No obstante, la Ranger ofrece un manejo más estable y preciso en off-road moderado; su suspensión delantera y dirección tienen mejor tacto a velocidad, lo cual se aprecia en trochas amplias. Conclusión off-road: Si se trata de trabajo rural pesado o travesías de muchos días lejos de asistencia, la Hilux es la “apuesta segura” por su simplicidad probada; en cambio, para uso recreativo 4×4, deportes de aventura o competencia amateur, la Ranger (y especialmente la Raptor) brinda mayores capacidades dinámicas y potencia para disfrutar la conducción todoterreno.

4. Análisis de Fallas Mecánicas y Eléctricas Comunes (Ranger vs Hilux)

Toyota Hilux – fallas reportadas: Pese a su fama de indestructible, la Hilux no está exenta de problemas, algunos mencionados en redes y foros por usuarios. Una de las fallas modernas más comentadas involucra el sistema DPF (filtro de partículas diésel) en motores 2.8. Varios propietarios han reportado que, después de ciertos kilómetros, el filtro DPF comienza a obstruirse frecuentemente. Por ejemplo, un usuario de una Hilux SW4 2.8 indicó: “Desde los 70.000 km tengo problemas con el filtro DPF. He hecho la regeneración manual al menos 8 veces… en concesionaria lo han limpiado unas 6 veces… y el filtro sigue fallando”. Este problema se traduce en aumento del consumo, humo y necesidad de visitas recurrentes al taller. Incluso otro propietario contó que tras ~110,000 km le informaron que debía reemplazar el DPF a un costo altísimo (unos 9 millones de pesos argentinos) justo fuera de garantía– mostrando la gravedad al no resolverse con limpiezas. Toyota ha intentado mitigar esto actualizando software y recomendando estilos de manejo que permitan regeneraciones completas, pero sigue siendo una queja en Hilux euro 5/6 en diversos países (especialmente en usos urbanos intensivos). Otra falla conocida en Hilux (generación 2016+) es un ruido o crujido en la suspensión trasera. Usuarios en Argentina describieron un crujido metálico al pasar resaltos, atribuible a falta de lubricación en componentes del eje trasero; la solución involucró perforar una pieza y aplicar lubricante, e incluso en casos cambiar el eje completo en garantía. Es una falla más que nada molesta (no compromete seguridad), pero recurrente en algunos lotes – “ese dichoso crujido en el eje trasero” menciona un afectado. En modelos más antiguos de Hilux (2005–2015) las fallas comunes incluían desgaste prematuro de bujes de suspensión, fugas en la bomba de inyección o problemas de arranque en frío, pero Toyota solucionó varios de esos en la generación actual. Eléctricamente, algunos propietarios han referido fallos aislados de alternador y que “se agota mucho la batería” en Hilux diésel recientes si se usan muchos accesorios eléctricos con el motor apagado (quizá por alternadores de menor amperaje en versiones base). También se han visto casos de mal funcionamiento del PCS (Sistema de Pre-Colisión) en versiones con Toyota Safety Sense – con mensajes de error falsos que a veces requieren recalibración del radar. Sin embargo, en general la Hilux 2025 no presenta fallas crónicas graves a gran escala; sus problemas suelen aparecer tras muchos kilómetros o por cuestiones de accesorios. Su motor y transmisión tienen reputación sólida – no hay informes significativos de fallos catastróficos de motor en la 8va generación salvo casos aislados (en la 7ma gen. hubo reportes de fisura de cabezas de motor 3.0, pero en la actual 2.8 eso no se ha masificado). En resumen, las fallas más comunes de Hilux giran en torno a DPF y detalles de ruidos/sensores, más que a componentes vitales, acorde con su imagen de confiabilidad.

Ford Ranger – fallas reportadas: Al ser un modelo de nueva generación, la Ranger 2025 ha tenido algunos problemas iniciales (“de niñez”) compartidos en redes, especialmente en mercados como Argentina donde se lanzó primero. Un caso son las alertas electrónicas múltiples en unidades cero kilómetro: Un usuario de Ranger Limited V6 reportó en un foro: “Me salen las siguientes fallas en la nueva Ranger: ‘sistema para mantener carril averiado, requiere servicio’, ‘falla asistencia dirección, requiere servicio’, ‘Asistente Pre Colisión no disponible’, etc. Apago el vehículo y al volver a prenderlo desaparece.”. Es decir, errores intermitentes de los ADAS (sistemas avanzados de asistencia) que se resolvían al reiniciar. Varios dueños confirmaron la misma experiencia, e incluso uno tuvo la camioneta en taller 3 semanas sin encontrar solución. Al final Ford identificó el origen en una falla de software en el módulo de dirección asistida y lanzó una reprogramación para corregirlo. Esta clase de inconveniente muestra que la Ranger nueva, por su alta complejidad electrónica, sufrió algunos bugs iniciales. Otro problema referido: un sobrecalentamiento del líquido de transmisión automática. En España, un propietario de Ranger Wildtrak V6 señaló que la temperatura de la caja se aproximaba al máximo en trayectos largos, algo que el concesionario achacó curiosamente a los neumáticos de fábrica (medida más grande) – explicación que el usuario cuestionó porque la Ranger Raptor con ruedas similares no sufre eso. Es un caso aislado, pero sugiere que quizás la programación de la transmisión o el enfriador de aceite requerían ajuste (posiblemente ya atendido por Ford vía recall o actualización). En cuanto a la mecánica del motor 2.0 Bi-Turbo, en la generación anterior (Ranger 2019-2022) hubo reportes en algunos países de rotura de la correa de distribución húmeda (bañada en aceite) antes de tiempo, causando contaminación del aceite con residuos. De hecho, un propietario menciona como “lo peor” de su Ranger nueva que “Ford modificó su software para impedir la regeneración activa ya que una regeneración insuficiente podría diluir el aceite del motor”, refiriéndose a que la marca hizo un update para evitar que el gasoil no quemado por el DPF se mezcle con el aceite (diluición que afectó a algunas Rangers y Transit 2.0). Esto indica que Ford abordó proactivamente un posible fallo preventivamente vía software, aunque el hecho de necesitarlo implica que la cuestión de dilución de aceite/DPF en la Ranger Bi-Turbo existía (menor a 5% de unidades, según datos extraoficiales). Otros problemas mecánicos comunes en Ranger T6 (modelo anterior) incluían: fugas de aceite en la tapa de punterías, fallos del sensor de cigüeñal (que encendían luz de motor) y desgaste del embrague en versiones manuales bajo uso intenso. En la Ranger 2025, al compartir cierta base con la anterior, no sería sorprendente algún caso de fuga menor de aceite – por ejemplo un usuario comentó: “Fuga de aceite en tapa de punterías (2 veces) con menos de 20k km”para una Ranger reciente. Sin embargo, no es algo generalizado. Fallas eléctricas: se han visto quejas de sensores de estacionamiento o cámara 360 que dejan de funcionar esporádicamente (reemplazados en garantía) y uno que otro “check engine” sin causa grave (apagado con scanner). La calidad de armado interior de la nueva Ranger ha sido mayormente elogiada, aunque algún propietario pudo mencionar ruidos de plásticos si se conduce en terreno muy malo – nada inusual. En síntesis, la Ford Ranger 2025 presenta más complejidad electrónica, lo que ha derivado en alertas o ajustes de software durante su lanzamiento. A nivel mecánico estructural, no se han documentado fallas masivas (el motor V6 3.0 es derivado de F-150 con buen historial, y el 2.0 Bi-Turbo ya lleva años usándose). Las incidencias que sí destacan son de tipo electrónico (ADAS, calibraciones) y han sido atendidas por la marca vía campañas. No obstante, la percepción entre algunos usuarios es que la Hilux “falla menos” en el sentido de menos mensajes de error y menos visitas a taller, mientras la Ranger – al ser más vanguardista – puede requerir más calibraciones hasta estar 100% fina.

5. Reclamos Frecuentes de Usuarios (Redes Sociales y Foros)

Los usuarios en foros, grupos de Facebook y comentarios en videos suelen ser muy honestos sobre qué les molesta de sus pickups. A continuación resumimos los reclamos más frecuentes para cada modelo, respaldados con citas:

• Suspensión dura y brincos en Hilux (vacía): Es quizás la queja número uno de la Hilux en redes. Muchos propietarios describen que sin carga la camioneta “es saltarina” en caminos irregulares. En un resumen de 207 opiniones de dueños, lo negativo más mencionado fue precisamente “la suspensión es dura… tosca y dura”. Un usuario comenta que la amortiguación se siente rígida y transmite las imperfecciones, algo corroborado por varios que dicen “un poco dura las suspensiones”. Este comportamiento se mitiga con peso, pero sigue siendo un rasgo característico que algunos aceptan por la durabilidad, mientras otros lo critican al compararla con rivales más confortables.
• Inestabilidad de la parte trasera de Hilux en ciertas condiciones: Ligado a lo anterior, algunos señalan que a alta velocidad en autopista o sobre ripio rápido, la cola de la Hilux puede sentirse ligera. Frases como “A altas velocidades tiende a moverse la carrocería… un poco inestable al ir rápido en ripio” aparecen entre las opiniones negativas recopiladas. Esto refleja la configuración de eje rígido + caja liviana que, sin carga, puede rebotar. Es un punto de queja común en comparación con pickups con suspensiones más sofisticadas (ej. Nissan Frontier con muelles helicoidales traseros). Pese a tener control de estabilidad, físicamente la Hilux puede deslizar levemente de atrás en baches – no es peligroso si se conduce prudentemente, pero los usuarios lo notan.
• Consumo de combustible (en ambas): Varios usuarios reclaman que estas camionetas gastan bastante diésel, especialmente en ciudad. En Hilux se lee “el consumo es alto… gastadora”, mientras de la Ranger (particularmente las versiones gasolina anteriores o la 2.5 nafta) dicen “gasta mucha gasolina sobre todo en ciudad… no tiene potencia en subidas”(en referencia a la Ranger 2.5L a gasolina). Si bien las versiones diésel actuales han mejorado consumos, sigue siendo un tema donde los usuarios quisieran ver más eficiencia, dada la escalada del precio del combustible. En foros peruanos algunos comparan consumos y argumentan que la diferencia Hilux vs Ranger diésel es mínima, pero la percepción general es que “todas estas 4×4 medianas gastan bastante en tráfico pesado”.
• Fallas eléctricas y de sensores (Hilux): Aunque Toyota tiene fama de electrónica confiable, algunos dueños se quejan de “algunas fallas eléctricas” esporádicas. Comentarios mencionan problemas con elevavidrios automáticos que dejan de funcionar (requiriendo reinicio del módulo) o sensores de aire acondicionado que fallan. En el resumen de opiniones negativas de Hilux, “fallas constantes de la parte electrónica” figura como uno de los puntos mencionados– no se detallan todas, pero por ejemplo se conocen casos de fusibles quemados por instalación de accesorios o conectores flojos de fábrica que causan que la luz de ABS se encienda sin motivo. Si bien son casos contados, existen en las discusiones en grupos.
• Calidad de algunos acabados interiores (Ranger): Usuarios de Ranger anteriores a 2023 a veces se quejaron de ruidos en el interior con el uso (plásticos sueltos, asientos que chirrían). En la nueva Ranger 2025 todavía no hay mucho historial, pero alguna queja menor aparece: un propietario en México dijo “los plásticos del pickup, ganchos de amarre interiores, son de calidad mejorable” (mencionó “Plásticos pick up” como punto flojo). Sin embargo, en general la nueva Ranger ha recibido elogios en calidad, así que este reclamo ha disminuido. Aun así, al comparar con la solidez espartana de Hilux, algunos podrían decir que la Ranger tiene “más cosas que se pueden romper” en cabina (pantallas, etc.), lo que se refleja en comentarios de usuarios tradicionales.
• Disponibilidad de repuestos y soporte (Ranger): En foros peruanos y argentinos, algunos dueños de Ford se quejan de demoras para obtener repuestos en garantía. Por ejemplo, en el caso de las fallas ADAS, un usuario comentó “el concesionario no responde… esperando hace semanas”, evidenciando frustración con el servicio posventa (tema que ampliamos en sección posventa). Si bien es un reclamo orientado a la marca más que al vehículo, aparece frecuentemente: “lo peor es la espera por repuestos” dicen algunos. En cambio, raramente se ve esa queja en Hilux, donde Toyota tiene mejor récord de stock. Este diferencial en atención al cliente emerge en redes, influyendo en la percepción: hay grupos donde ex-usuarios de Ranger pasan a Hilux justamente cansados de esos inconvenientes logísticos.
• Otras quejas específicas: Vale mencionar algunas puntuales: Usuarios de Hilux en climas cálidos han reportado que el aire acondicionado podría ser más potente para la cabina doble (no es recurrente, pero existe la comparación con otros que congelan más). De la Ranger, algún conductor mencionó que la suspensión es muy rígida en la Raptor para uso diario (por los amortiguadores off-road) – “suspensión muy rígida” aparece en una opinión. También, en mercados con Ranger a gasolina, se critica la falta de potencia (no aplicable a Perú que trae diésel turbo). En Hilux, usuarios han criticado que en versiones base todavía venga con frenos traseros de tambor y menos airbags, percibiéndolo como “cost-cutting” de la marca a pesar del precio.

En resumen de reclamos: los usuarios de Hilux suelen enfocarse en su comodidad y pequeños detalles (suspensión, ruidos, DPF), mientras los de Ranger a menudo mencionan temas tecnológicos o de servicio (alertas electrónicas, espera de repuestos). Ambos grupos coinciden en querer menor consumo de combustible. Estas voces de usuarios reales ayudan a pintar la imagen: la Hilux es amada por su confiabilidad pero criticada en confort, y la Ranger es apreciada por su performance pero vigilada de cerca en cuanto a que no aparezcan fallitas de electrónica que mermen la experiencia.

(Fuentes: comentarios agregados de propietarios en Opinautos, TikTok y foros especializados citados línea a línea.)

6. Durabilidad y Confiabilidad a Largo Plazo (ranger vs hilux)

Toyota Hilux – durabilidad legendaria: La Hilux se ha ganado su reputación de “indestructible” tras décadas de uso exigente en todos los rincones del mundo. En Perú no es la excepción: es común ver Hilux de 15 o 20 años en buen estado mecánico, e incluso modelos de los 90 funcionando en zonas altoandinas. Los propietarios reales suelen opinar que lo mejor de la Hilux es su robustez y confiabilidad. En una recopilación de opiniones, palabras como “duradero, robusto, confiable”, “indestructible, jamás me ha dejado botado” se repiten frecuentemente. Esto se refleja en que, con mantenimiento adecuado, el tren motriz (motor y transmisión) de Hilux suele superar los 300 mil km sin reparaciones mayores. La construcción mecánica simple (por ejemplo, la ausencia de turbo de geometría variable en el 2.4 base, o el uso de inyectores de buena calidad Denso) redunda en menos cosas que puedan fallar. Un punto de durabilidad destacable: el chasis y carrocería resisten muy bien la corrosión y los esfuerzos – la Hilux tiene tratamiento anticorrosivo en el acero galvanizado de la tolva y protección en bajos, lo cual en climas costeros o trocha fangosa prolonga su vida estructural. Usuarios de flota mencionan que las Hilux soportan sobrecargas ocasionales y abuso (frenazos con carga, manejar en trocha a velocidad) con mínima incidencia de grietas o daños. Además, la disponibilidad de repuestos genuinos y alternativos incluso en pueblos apartados hace que cualquier desperfecto se solucione rápido, manteniéndolas operativas (un factor crucial en confiabilidad percibida). En síntesis, a largo plazo la Hilux está probada para durar: motores diésel robustos (el 1KD 3.0 y ahora el 1GD 2.8 han mostrado longevidad; algunos casos de Hilux 2016+ con más de 250k km reportan sin abrir motor), componentes de suspensión heavy-duty y electrónica mínima indispensable (menos módulos susceptibles). Esto no quiere decir que nunca falle nada – embragues, bujes, amortiguadores eventualmente requieren cambio –, pero su frecuencia de reparaciones mayores es menor que muchas rivales. No por nada, en ambientes severos (minería, selva) la Hilux sigue siendo primera opción, pues “aunque se maltrate, aguanta”.

Ford Ranger – confiabilidad mejorando, pero con historial mixto: La Ford Ranger, especialmente las fabricadas en Argentina desde 2012, han ido mejorando en confiabilidad, pero todavía cargan con algunos signos de interrogación a largo plazo frente a Toyota. En la generación T6 (2012-2022) hubo muchos usuarios satisfechos alcanzando altos kilometrajes – por ejemplo, motores Puma 3.2 de 5 cilindros con 200,000 km funcionando bien – pero también se documentaron fallas costosas en algunas unidades (p.ej., recalentamiento de la junta de culata en el 3.2, o problemas de inyectores en el 2.2). Sin embargo, la nueva Ranger 2025 estrena motorizaciones y componentes que en teoría corrigen varias de esas cuestiones: el motor 2.0 Bi-Turbo tiene cadena de distribución (no correa, evitando mantenimiento complejo) y se usa desde 2018 en miles de vehículos con buen récord; el motor 3.0 V6 diésel deriva del probado “Lion” de F-150 europeo, conocido por su robustez en servicio pesado. Aún es pronto para datos de campo de >100 mil km en la Ranger nueva, pero Ford afirma haber realizado tests extremos de durabilidad equivalentes a 10 años de uso, reforzando ejes, sellos y demás. No obstante, en la percepción popular, la Hilux todavía aventaja a la Ranger en confiabilidad a largo plazo. Encuestas con usuarios suelen dar a Hilux 5/5 en confiabilidad y a Ranger 4/5. Por ejemplo, algunos propietarios de Ranger resaltan potencia y comodidad pero citan como lo peor la preocupación por “sus fallas en sensores que terminan siendo recurrentes”o “que mucho falla por el momento”– comentarios que reflejan la cautela con la que ven la durabilidad electrónica de Ford. Cabe destacar que Ford ha mejorado su control de calidad: gran parte de la mala fama provenía de modelos antiguos. Las Ranger recientes incorporan mejores materiales (por ejemplo, mangueras de silicona en intercooler, turbos BorgWarner más resistentes, etc.). Aun así, en el largo plazo (5-10 años), es posible que una Ranger requiera algo más de atenciones: los módulos electrónicos (de ABS, 4×4, etc.) de Ford tienden a ser más sensibles a fluctuaciones de voltaje o mala tierra, por lo que en vehículos añejos pueden aparecer luces de falla que obliguen a reprogramar o cambiar sensores. También, la disponibilidad futura de repuestos podría jugar en contra: Toyota suele mantener stock de piezas por décadas, mientras de Ford a veces es necesario importar bajo pedido para modelos fuera de producción mucho tiempo. En cuanto a la carrocería y chasis, la Ranger es duradera – no se conocen casos de chasis doblados sin accidentes (salvo sobrecargas extremas), y la pintura/latonería es de buena calidad aunque quizás no tan resistente a rayones finos como la de Hilux. Con todo, la Ranger puede ser un vehículo confiable a largo plazo si se mantiene bien, pero requiere un mantenimiento más preciso (no descuidar cambios de aceite de caja 10AT, cuidado con calidad de diésel para evitar daño en bi-turbo, etc.). Hilux, por su parte, tolera un poco más de negligencia (ej. se ha visto Hilux que aguantan combustible de menor calidad mejor que otras). En resumen, la Hilux lleva ventaja en confiabilidad percibida y comprobada – es la pick-up que uno escoge si planea quedársela 15 años. La Ranger, con todos sus avances, probablemente ofrecerá también larga vida útil, pero el tiempo dirá si iguala el récord de “indestructibilidad” de Hilux. Por ahora, la evidencia sugiere que a 8-10 años la Hilux sufre menos desgastes críticos que la Ranger, cuyo tren motriz complejo podría requerir más renovaciones (turbo, bomba de combustible, etc.) si el uso fue severo.

7. Costos de Mantenimiento en Perú (Concesionario vs Taller Independiente)

Mantener una pick-up 4×4 moderna no es barato, pero hay diferencias entre marcas y opciones para abaratar fuera del concesionario.

En concesionarios oficiales, los costos de mantenimiento de ambas suelen ser elevados, especialmente en los primeros 5 años cuando muchos usuarios siguen el plan para no afectar garantías. Por ejemplo, Ford publica precios referenciales: un mantenimiento típico de 10,000 km para Ranger diésel en Lima cuesta alrededor de S/1,500 (incluyendo repuestos y mano de obra). De hecho, el plan completo de 10k a 90k km sumaba más de S/5,000 para la Ranger 3.2 en 2022. Toyota no publica abiertamente cada precio, pero usuarios reportan cifras similares o ligeramente menores para la Hilux. Un asesor de Toyota consultado indicó que el servicio de 10,000 km de Hilux ronda los S/1,200 (incluye aceite 8 litros 15W40, filtros de aceite y aire, revisión general). A 20,000 km, que suma filtro de combustible, el costo sube a ~S/1,500. Y los servicios mayores (40k, 80k) donde se cambian todos los fluidos (caja, diferenciales) pueden costar S/2,000 o más. Estos montos son del orden de 4-6% del valor del vehículo por año, en línea con estimaciones generales de seguros: en Perú un seguro y mantenimiento para autos nuevos puede costar entre $8 y $150 mensuales dependiendo valor– en el caso de una pickup de ~$35k, estaríamos cerca del tope de ese rango.

La Hilux suele tener mantenimientos ligeramente más económicos en concesionario que la Ranger. ¿Por qué? Toyota tiende a tener mayor volumen y por ende algunos repuestos (ej. filtros) a menor costo unitario. Además, la Hilux tiene intervalos de servicio cada 5,000 km en condiciones severas (recomendado) pero oficialmente 10,000 km, similar a Ranger (Ford es cada 10,000 km o 1 año). Donde se ve diferencia es en los “paquetes”: Toyota ofrece el “Mantenimiento Conveniente” con planes prepagados con descuento de ~20%, algo que usuarios aprovechan. Ford por su parte a veces incluye los 2 primeros servicios gratis en promociones, pero fuera de eso, sus precios son un poco más altos en mano de obra. En general, un plan anual en concesionario podría promediar S/3,500 – S/4,500 al año para Hilux y S/4,000 – S/5,000 al año para Ranger (incluyendo uno o dos servicios y piezas de desgaste menores).

En talleres independientes, el panorama cambia: Muchos propietarios optan por realizar mantenimientos fuera una vez vencida la garantía para ahorrar. Aquí la Hilux lleva ventaja porque sus repuestos son muy comunes. Un cambio de aceite + filtro para Hilux con aceite de buena calidad puede costar S/400 – S/600 en un taller de confianza (la mitad o menos que en la casa). Los filtros de aire y combustible para Hilux (marcas OEM como VIC o Sakura) son asequibles y abundantes, dado que el motor 2GD/1GD se usa mucho. Además, hay gran cantidad de mecánicos familiarizados con Hilux, lo que reduce el tiempo invertido (y por tanto costo de mano de obra). La Ranger puede mantenerse fuera también, pero con matices: si bien el motor Puma 2.0 usa aceite sintético similar y filtros que se consiguen (Motorcraft, etc.), algunos talleres no tienen tanta experiencia con la nueva Ranger, así que cobran más “por seguridad”. Un caso citado en foros: un propietario de Ranger mencionó pagar ~S/800 en un taller independiente por el servicio de 20k (usando aceite importado) que en Ford costaba casi el doble. Eso indica que sí hay ahorro, pero no tan pronunciado como en Hilux donde la red de servicio informal es más amplia.

Otro factor: los costos de piezas de desgaste. Pastillas de freno originales Toyota ~S/600 par delantero, equivalentes para Ranger ~S/700. Amortiguadores: uno original Hilux ~S/450, Ranger ~S/500. Diferencia no muy grande. Sin embargo, en piezas mayores la disparidad crece: un inyector common-rail Denso de Hilux puede costar S/1,800 (y hay alternativos reconstruidos más baratos), mientras un inyector Delphi o Bosch piezoeléctrico de Ranger Bi-Turbo supera los S/3,000 y es más difícil de encontrar fuera de Ford. Esto influirá a largo plazo en costos si fuese necesario.

En conclusión, mantener la Hilux suele ser ligeramente más barato y sencillo. Los concesionarios Toyota tienen fama de cobrar fuerte, pero se compensa con la opción de muchos talleres especializados en diesel Toyota a nivel nacional que hacen buen trabajo a menor precio. La Ranger, al ser más nueva y menos difundida, por ahora tiene menos opciones especializadas fuera del concesionario (aunque sí existen talleres Ford en Lima y ciudades grandes). En concesionario, ambos son vehículos costosos de mantener, pero necesarios para garantizar rendimiento óptimo. Como referencia final: el portal Comparabien estima que el costo de mantenimiento anual de un vehículo de este tipo puede rondar $100 mensuales en promedio (unos S/400 mensuales), lo cual coincide con los cálculos mencionados para Hilux/Ranger. Así que el comprador debe presupuestar adecuadamente este rubro.

8. Valor de Reventa y Depreciación en Perú (Neoauto, OLX Autos, MercadoLibre)

El valor de reventa es un punto fuerte de la Toyota Hilux y tradicionalmente un talón de Aquiles de muchas Ford. En el mercado peruano actual, esta tendencia se mantiene:

• Toyota Hilux: Es posiblemente la pickup mediana con mejor valor de reventa. La demanda por Hilux usadas es altísima – desde mineras que compran lote de semi-nuevas hasta agricultores que prefieren “una Hilux de segundo uso antes que otra nueva china”. Esto se traduce en precios muy sostenidos. Por ejemplo, se encuentran Hilux del año 2020 (versión SRV, doble cabina 4×4) con ~50,000 km vendiéndose alrededor de US$ 34,000. Considerando que su precio nueva en 2020 pudo ser unos US$38k, significa apenas ~10% de depreciación en 3 años, algo extraordinario. Incluso Hilux de 2014 con 134 mil km se ofertan en ~US$26 mil, lo cual refleja ~65-70% de su valor original después de 9-10 años – porcentaje altísimo. Un detalle: hay Hilux versiones básicas de trabajo muy cotizadas; por ejemplo, una Hilux 4×2 diésel 2016 puede costar todavía US$20k si está en buen estado. Además, las Hilux se venden rápido. En Neoauto suele haber 40 o 50 Hilux en venta, pero también se sabe (por los vendedores) que “no duran mucho el aviso”. La rotación es alta: unidades publicadas tienden a recibir ofertas serias en pocas semanas, a veces días si el precio es competitivo. Esto se debe a la confianza general del comprador peruano en la marca Toyota y en que “Hilux no defrauda” a futuro, sumado a la disponibilidad de crédito (los bancos tasan bien una Hilux usada, facilitando préstamos).
• Ford Ranger: Ha mejorado su valor de reventa respecto a décadas pasadas, pero aún así queda por detrás de Hilux. Una Ranger del 2020 XLT 4×4 con ~60,000 km se puede encontrar en ~US$ 23,000 – 26,000, dependiendo equipamiento. Por ejemplo, en Neoauto figuran Ranger 2020 mecánica con 66k km a US$22,800, y otra 2022 automática con 45k km a US$26,000. Si consideramos que una Ranger XLT 2020 nueva costó ~US$36k, la depreciación en 3 años sería del orden de 30-35%. Es significativamente mayor que la Hilux. El mercado de segunda mano de Ranger es más reducido: en Neoauto suelen haber 15-20 Rangers a la venta nada más. Esto indica menor liquidez – cuesta un poco más venderla, hay menos interesados. De hecho, muchos terminan vendiendo un poco por debajo del valor deseado tras negociaciones. Algunos factores: la percepción de mantenimiento más caro y la abundancia de Hilux en el mercado hacen que el comprador común prefiera pagar más por la Hilux que optar por una Ranger usada a menor precio. No obstante, las Ranger tienen su nicho: suelen ser atractivas para entusiastas que buscan más equipamiento por menos dinero. El tiempo promedio de venta de una Ranger usada podría ser mayor (tal vez un par de meses en encontrar comprador, frente a pocas semanas de la Hilux). Además, se deprecia especialmente fuerte la versión a gasolina (2.5L) – esas Rangers gasolina usadas casi no tienen mercado, bajando mucho de precio (p.ej., una Ranger 2021 2.5 cabina simple se ha visto en OLX a US$17k cuando nueva costó 27k). Las versiones diésel se defienden mejor, pero igual ceden valor.
• Comparación porcentual: A los 5 años, una Hilux suele retener ~70% de su valor inicial o más (dependiendo kilometraje), mientras una Ranger rondaría 60% o menos. A los 10 años, una Hilux bien cuidada podría valer ~50% del original (increíble pero cierto, por la inflación y demanda), en cambio la Ranger tal vez ~30-35%. Esto implica que el costo por depreciación de Hilux es bajísimo. Por eso muchas empresas las compran: al renovar flota recuperan buena parte. Por ejemplo, OLX Autos (que compra usados) cotiza una Hilux 2019 en cerca de S/120 mil y una Ranger 2019 similar en ~S/90 mil, según datos de comerciales recientes.
• Tasa de rotación: En portales como Neoauto y MercadoLibre, la Hilux figura consistentemente en el top de búsquedas en la categoría camionetas, indicando que hay múltiples interesados por cada unidad publicada. Por otro lado, la Ranger aparece más esporádicamente en los rankings. Esto sugiere que la Hilux tiene una rotación más rápida: se transan más Hilux de segunda mano mensualmente que Rangers. Incluso en provincias alejadas, una Hilux usada es prácticamente una moneda fuerte – se permuta por terrenos, por maquinaria, etc., algo que raramente se ve con una Ranger.
• Valor futuro y tendencias: Con la entrada de nuevas pick-ups chinas baratas, uno podría pensar que bajaría la reventa de Hilux/Ranger, pero en la práctica esas alternativas no han mermado el valor Toyota (más bien han afectado a otras marcas japonesas con menor reputación). Es probable que la Hilux siga liderando en valor de reventa mientras mantenga su prestigio. La nueva Ranger 2025, al ofrecer tanta mejora, podría cerrar un poco la brecha en el futuro – si demuestra confiabilidad, más gente podría considerarla y sus usadas valorizarse mejor. Aún es temprano para saber. Por ahora, la realidad: Hilux es la campeona de valor de reventa en pickups, y la Ranger ofrece una relación valor/precio atractiva en el mercado de segunda mano (es una buena compra usada porque obtienes más por menos, pero como propietario inicial aceptas mayor depreciación).

En conclusión, desde el punto de vista financiero, la Hilux es casi imbatible en preservar valor (un activo seguro), mientras la Ranger se deprecia más rápido. Quien compra una Hilux nueva prácticamente “estaciona el dinero” con muy poca pérdida en años, en cambio con la Ranger debe asumir una depreciación más convencional. Esto debe ponderarse al decidir: el mayor precio inicial de Hilux a menudo se recupera al venderla, algo a tomar en cuenta por los compradores.

9. Historial de Robos en Perú

El riesgo de robo es un factor real a considerar, especialmente para pickups deseadas en el mercado negro. En Perú, lamentablemente las Hilux encabezan la lista de vehículos robados en los últimos años. De acuerdo a investigaciones policiales, “las camionetas 4×4 de la marca Toyota Hilux eran las preferidas de los delincuentes en Lima”. De hecho, en julio de 2024 se desarticuló una banda que había logrado robar más de 150 camionetas Hilux en 5 años en Lima Norte, muchas veces con complicidad de policías. Estas Hilux eran llevadas a regiones como Satipo (selva central) para luego ser vendidas ilegalmente o usadas en actividades como minería ilegal y narcotráfico. La Hilux es tan codiciada por los ladrones por su alto valor de reventa (incluso en países vecinos) y porque una vez sacada de zonas urbanas es difícil de recuperar.

En contraste, la Ford Ranger no aparece tan frecuentemente en estadísticas de robo. No es que sea inmune – sí se han robado Rangers, pero no a un nivel alarmante. Por ejemplo, la Diprove (Policía de robo de vehículos) registra más casos de Toyota, Nissan y Hyundai en general. La Ranger puede ser objetivo ocasional, pero los delincuentes suelen preferir Hilux o incluso Nissan Frontier/NP300 porque tienen salida más fácil. En medios locales no abundan noticias de “robo de Ranger”, mientras de Hilux hay múltiples casos reportados (incluso con extorsión para devolución, pidiendo rescate de S/5,000 a S/10,000). Esto hace que muchos propietarios de Hilux instalen adicionales de seguridad (corta corriente, GPS ocultos, barras traba timón) – de hecho empresas de GPS publicitan casos donde “roban Toyota Hilux pero se salvó gracias al GPS/traba”.

El perfil de robo de la Hilux suele ser con violencia (asalto a mano armada para quitársela al conductor) o hurto estacionado usando dispositivos electrónicos (inhibidores de alarma). La Ranger al no ser tan popular entre bandas, tiene menor incidencia, aunque no es descartable. Por ejemplo, en provincias como Lambayeque se reportó el asalto de una Ranger 2021 a su conductor, que fue recuperada luego por la policía– casos más aislados.

En resumen, tener una Hilux implica mayor riesgo de robo en Perú. Las aseguradoras lo saben y la prima es más alta para Hilux justamente por esta razón. Tener garaje, alarma de última generación, GPS y seguro es prácticamente obligatorio con una Hilux nueva. Con la Ranger, si bien igual es recomendable, la preocupación es menor en cuanto a ser objetivo principal de bandas. Algunos propietarios de Hilux incluso comentan en redes que optaron por quitar logos o pintarla de colores discretos para llamar menos la atención de ladrones. Es un tema serio: la “banda de la Hilux” se ha vuelto tristemente famosa en crónica policial local. Así que, en factor seguridad, punto negativo para Hilux por ser “demasiado deseada” por lo ajeno. La Ranger, por ahora, pasa más desapercibida en ese sentido (lo cual irónicamente puede ser una ventaja para el dueño).

10. Costos Estimados de Seguro Vehicular en Perú

Los costos de seguro vehicular para estas pickups reflejan su alto valor y riesgo. En Perú, asegurar una Toyota Hilux suele ser más caro que una Ford Ranger equivalente, principalmente por la alta siniestralidad de robo de la Hilux mencionada.

Para tener una idea, consultoras y comparadores indican que el seguro full (cobertura contra todo riesgo, incluido robo total, daños y responsabilidad civil) puede costar entre 4% y 6% del valor del vehículo por año en este segmento. Por ejemplo, para una Hilux nueva de ~US$40,000, la prima anual podría estar en torno a US$1,600 – 2,000 (unos S/6,000 – 7,500). Esto equivale aproximadamente a $130 – 160 mensuales. De hecho, Comparabien reporta que el rango de seguros va desde $8 hasta $150 mensuales en Perú según el vehículo y cobertura; la Hilux estaría cerca del tope de ese rango. Una cotización real (2023) con RIMAC Seguros para Hilux 2021 arrojaba ~S/5,800 anual con deducible básico, lo que encaja en esas cifras.

En cambio, para una Ford Ranger valuada quizá en US$35,000, la prima anual suele ubicarse ligeramente menor, digamos US$1,200 – 1,500 (S/4,800 – 5,800). Esto es $100 – 125 al mes. La razón principal es que la Ranger estadísticamente presenta menos robos. A igualdad de perfil del conductor y cobertura, varias aseguradoras cargan una sobretasa a Hilux. Por ejemplo, Mapfre y Pacífico en algunos casos han aplicado un 10-15% más a la prima de Hilux respecto a Ranger.

Además del robo, influye el costo de reparaciones: la Hilux, al tener repuestos más caros en concesionario, eleva los montos de siniestros (paradójicamente las piezas Toyota originales son costosas, lo que impacta a la aseguradora cuando paga daños). La Ranger, con piezas un poco más baratas o menor incidencia, resulta más económica en ese sentido.

Hay que considerar también los deducibles: Muchas pólizas en Perú estipulan deducible de 10% o mínimo ~S/1,200 en caso de choque. Para estos vehículos, algunas aseguradoras exigen instale GPS para cubrir robo sin deducible (en Hilux particularmente). Toyota ofrece el Seguro Toyota en convenio con Mapfre, que trae ciertas ventajas pero a un costo premium.

Resumiendo números orientativos en soles por año (tarifa 2024 para conductor de 35 años en Lima, uso particular):

• Hilux 4×4 nueva: ~S/6,500 anual (unos S/540 mensuales).
• Ranger 4×4 nueva: ~S/5,500 anual (unos S/460 mensuales).

Estas cifras pueden variar con promociones, perfil de cliente o coberturas extras (por ejemplo algunas incluyen mantenimiento o auto de reemplazo, etc.).

También existen opciones más básicas: seguros vehiculares terceros + robo (no cubre daños propios). Un plan así podría costar la mitad, pero la mayoría de financistas exige seguro full al menos los primeros años.

En conclusión, asegurar la Hilux es más caro. Un usuario citaba que “la diferencia de asegurar Hilux vs Ranger me salía como 200 soles más al mes la Hilux” – esto calza con lo explicado. Quien compre Hilux debe presupuestar esa prima alta debido a su perfil de riesgo. La Ranger, sin ser barata de asegurar, ofrece un pequeño alivio en la cuota. De cualquier modo, ambos vehículos por su valor entran en la categoría alta para las aseguradoras, por lo que es muy recomendable cotizar con varias compañías y aprovechar descuentos (por ejemplo, asociar el seguro a la cuenta de banco del financiamiento suele dar rebajas).

11. Compatibilidad con Accesorios Modernos (Android Auto, Sensores, Cámaras, CarPlay, etc.)

Tanto la Ford Ranger 2025 como la Toyota Hilux 2025 pueden incorporar o actualizarse con las últimas tecnologías de infoentretenimiento y asistencia gracias a su popularidad y a la oferta del mercado de accesorios.

De fábrica, la nueva Ranger lleva la delantera en integración tecnológica. Todas las versiones vienen ya con una pantalla táctil grande (10” en las básicas, 12” vertical en las tope) con SYNC 4 y compatibilidad Android Auto/Apple CarPlay inalámbricos. Esto significa que desde cero el usuario tiene navegación, apps del smartphone y hasta asistente de voz integrados. Además, la Ranger ofrece puertos USB tipo A y C, y en versiones altas, cargador inalámbrico y modem 4G WiFi. Igualmente, incluye sensores de parqueo y cámara de retroceso desde versiones intermedias, y en la Limited suma cámara 360°. En cuanto a accesorios como sensores adicionales o cámaras, la Ranger ya los incorpora en buen grado, pero si se quisieran mejorar (por ejemplo, añadir un módulo de visión nocturna, o una cámara frontal en XLT que no la trae), la electrónica lo permite: hay interfaces plug&play para SYNC que habilitan entradas de video extra.

La Hilux 2025, por su parte, en versiones base viene más sencilla: radio estándar o pantalla pequeña sin navegación en la versión de entrada. Sin embargo, en versiones SRV ya trae una pantalla táctil de 8-9’’ con Android Auto y Apple CarPlay (por cable). Es decir, Toyota incorporó recientemente la conectividad smartphone que antes le faltaba. También la Hilux SRV ofrece cámara de retroceso y sensores traseros de fábrica. No obstante, muchas Hilux vendidas en Perú son las de trabajo (SR, etc.) que no traen esos lujos. La buena noticia es que la Hilux tiene gran compatibilidad post-venta: por ejemplo, empresas locales como Cardroid.pe ofrecen kits para Hilux que incluyen pantallas Android de 10” con CarPlay/Android Auto, convirtiendo una cabina básica en moderna fácilmente. De hecho, es muy común que propietarios de Hilux estándar instalen radios Android aftermarket; el proceso es sencillo porque el arnés de Toyota es conocido y hay adaptadores directos. Lo mismo con sensores y cámaras: si una Hilux no los trae, hay kits universales o específicos (muchos talleres instalan sensores de proximidad en paragolpes trasero integrados casi OEM, e incluso cámaras frontales o 360 de marcas como Pioneer o Alpine adaptadas). En la práctica, no hay limitaciones mayores: la Hilux puede equiparse con CarPlay sin perder garantía (si se hace en concesionario con accesorios oficiales, Toyota vende una unidad CarPlay en algunos países), o con accesorios de terceros con muy buenos resultados.

Cabe destacar que la calidad de los sistemas originales influye: el SYNC 4 de Ford es muy completo y probablemente el usuario no necesite cambiar nada (inclusive actualizable vía WiFi). En la Hilux, el sistema original es más básico y quizá lento, por eso varios optan por mejorarlo con aftermarkets. Firmas como Kenwood, Sony o cardroid.pe ofrecen soluciones plug&play para Hilux: por ejemplo, cardroid tiene un kit específico Hilux 2016-2021 con Android 10, pantalla 9”, compatible con mandos de volante, por alrededor de S/1,500 instalado – bastante popular.

En términos de compatibilidad general:

• Apple CarPlay/Android Auto: Ranger 2025 – sí, inalámbrico en versiones con SYNC 4. Hilux – sí, en versiones con pantalla OEM (con cable); en otras, instalable vía accesorios.
• Radios Android Aftermarket: 100% compatibles con ambas. Para Hilux hay molduras dedicadas; para Ranger nueva, al tener una pantalla integrada vertical es más complejo cambiarla, pero como ya viene con buen sistema, no suele necesitarse.
• Sensores de estacionamiento: Hilux base no trae, se pueden adicionar fácilmente (con kits de 4 sensores, costo ~S/300). Ranger XL base tampoco trae, también es posible añadir; Ford incluso vende accesorios oficiales (pero costosos).
• Cámaras adicionales: Ambos sistemas pueden equiparse con cámaras frontales, laterales o dashcams integradas. La Hilux con radio Android puede manejar múltiples cámaras. La Ranger SYNC 4 tiene entrada para cámara de remolque, por ejemplo.
• Sistemas de seguridad y rastreo: Dado el riesgo de robo en Hilux, muchos instalan GPS ocultos. Estos funcionan bien en ambos vehículos, sin interferir con la electrónica.
• Iluminación LED, barras, etc.: Tanto Hilux como Ranger se prestan para personalización. Es común ver barras LED en el techo o paragolpes – eléctricamente, ambos soportan la instalación con relés adecuados (la Hilux quizá más fácil por espacio en vano motor).
• Accesorios de confort: Cosas como sensores de presión de neumáticos (TPMS) se pueden agregar a posteriori; en Hilux algunos lo han hecho con kits internos, y en Ranger varias versiones ya lo traen de serie.
• Apple CarPlay inalámbrico en Hilux: Existe incluso un adaptador “dongle” que se conecta al USB de la Hilux y le da CarPlay WiFi – muchos usuarios lo usan para no tener que conectar cable.

En resumen, ambas pickups pueden equiparse con la tecnología moderna, pero la Ford Ranger 2025 ya trae casi todo integrado (puntos extra para quien no quiera complicaciones), mientras la Toyota Hilux ofrece un lienzo más básico que suele ser mejorado en el mercado aftermarket. La presencia de empresas especializadas en Perú (como la mencionada Cardroid, Autorradios, etc.) garantiza que si el modelo no viene con algo, se le puede incorporar: “¿No tienes CarPlay? Te lo instalan; ¿quieres cámara 360? También se puede montar”. Esto hace que, tecnológicamente, ningún comprador se quede atrás sin importar la versión elegida.

12. Experiencia Posventa en Perú (Concesionarios, Garantías, Repuestos)

La experiencia posventa puede ser tan importante como el vehículo mismo, y aquí la balanza tiende a inclinarse a favor de Toyota en percepción general, aunque con matices:

• Red de concesionarios y talleres: Toyota posee una red extensa en Perú, con concesionarios o servicios autorizados en prácticamente todas las regiones. Para un cliente de Hilux, esto significa que sin importar si está en Lima, Cusco o Tarapoto, probablemente haya un taller Toyota relativamente cerca. Ford, en cambio, tiene presencia más limitada concentrada en ciudades grandes (Lima, Arequipa, Trujillo, Cusco y algunas más). Un usuario en provincia puede tener que movilizar su Ranger cientos de kilómetros para una atención de garantía, mientras Toyota suele tener cobertura local. Esto influye en la satisfacción: la atención en concesionario Toyota suele ser calificada de excelente – se han visto comentarios como “la atención en concesionario oficial Toyota un 10 como siempre”, señal del enfoque de Toyota en servicio al cliente. Ford ha mejorado su red desde 2018, ampliando talleres autorizados, pero aún no alcanza la capilaridad de Toyota.
• Garantías: Toyota Perú ofrece garantía comercial de 5 años o 150,000 km en la Hilux, lo cual es un plus frente a varias marcas. Ford también da 5 años o 150,000 km en la Ranger (anteriormente eran 3 años, pero la ampliaron para competir). En la práctica, ambas marcas cumplen con las reparaciones de garantía, aunque los clientes indican diferencias en la rapidez y facilidad del trámite. Toyota suele ser más expedito en autorizar arreglos – rara vez discute si la falla entra o no en garantía, y tiene repuestos listos. Ford, según relatos de clientes, en ocasiones demora esperando autorización de la casa matriz o importando la pieza faltante, lo que extiende la estadía del vehículo en el taller. Un caso citado fue el de la falla de asistencia en Ranger, donde el vehículo estuvo 3 semanas sin solución; el propietario tuvo que elevar el reclamo a Ford Argentina para apurar el tema. Esto evidencia cierta burocracia en posventa Ford que puede frustrar al usuario.
• Disponibilidad de repuestos: Toyota es sinónimo de abundancia de repuestos. Los concesionarios oficiales manejan un buen inventario de piezas de alto rotación (filtros, frenos, embragues) y si algo no está, la importación suele ser rápida gracias al volumen (periódicamente arriban contenedores Toyota). Adicionalmente, hay muchos distribuidores de repuestos Toyota externos – uno puede conseguir parte original Denso para Hilux fuera del dealer, acelerando reparaciones. En Ford, los repuestos genuinos vienen únicamente vía su red; aunque hay alternativos y equivalentes, algunas piezas específicas (p.ej. un sensor del 4×4, módulo ABS) solo las trae Ford. Ha habido quejas de esperas de semanas por repuestos de Ranger en el pasado, aunque Ford ha tratado de mejorar su abastecimiento. Para la Ranger 2025, al ser nueva, es de esperarse que ciertos repuestos no comunes tarden en llegar si se requieren. Esto afecta la experiencia posventa: un cliente con la unidad parada esperando un repuesto se impacienta. Toyota generalmente lleva ventaja en “tener la pieza a mano”.
• Costos de servicio y reparaciones: Ya mencionamos que en concesionario son altos para ambos. Sin embargo, algunos clientes sienten que Toyota “vale lo que cobra” en servicio – es decir, aunque caro, el trabajo es minucioso, entregan el vehículo limpio, a tiempo, etc. Ford, en percepción de algunos, no siempre brinda ese nivel de atención al detalle. Esto es anecdótico, pero influye en la satisfacción: hay entusiastas que cuentan mejores experiencias en la sala de espera de Toyota (comodidades, personal atento) que en la de Ford. Las encuestas de satisfacción de JD Power en otros países suelen poner a Toyota arriba en posventa por estos pequeños diferenciadores.
• Trato al cliente y flexibilidad: Un punto a favor de Toyota es su política de “garantía extendida de cortesía” – muchas veces, si una pieza falla apenas pasada la garantía, Toyota (con buena voluntad del concesionario) igual la cubre. Por ejemplo, casos de Hilux con 160,000 km donde les han reconocido un arreglo como gesto comercial. Ford tiende a ser más rígido: cumplidos los 150k o 5 años, cualquier cosa corre por cuenta del dueño, dificultando concesiones. Además, la comunicación proactiva es distinta: Toyota suele recordar a sus clientes los mantenimientos, hace campañas de satisfacción, etc. Ford está implementando eso también pero tiene menos base instalada.
• Comunidades y soporte externo: Interesantemente, los propietarios de Hilux cuentan con amplias comunidades (clubes 4×4 Toyota, grupos en Facebook con mecánicos que aconsejan). Esto genera una “posventa comunitaria” adicional: si alguien tiene un problema con su Hilux, es fácil que otro en el grupo ya lo haya resuelto y le indique la solución o el mejor taller. Con Ranger, las comunidades locales son más pequeñas, aunque van creciendo (existe el Club Ranger Perú en Facebook con ~2,5k miembros), donde comparten tips y talleres buenos. Pero no tiene la misma masividad que “Hiluxeros Perú”, por ejemplo. En efecto, ese soporte entre pares también es parte de la experiencia posventa y favorece a Toyota.

Conclusión posventa: La Toyota Hilux ofrece una experiencia posventa más sólida y confiable en términos de red, rapidez y tranquilidad. Muchos clientes comentan permanecer fieles a Toyota justamente por el respaldo postventa – frases como “con Toyota duermes tranquilo, ante cualquier cosa te responden” son comunes. Ford ha hecho esfuerzos notables (la ampliación de garantía a 5 años, mejorar stock, etc.) y ciertamente atiende sus obligaciones, pero aún arrastra la percepción de posventa “complicada”. Un nuevo dueño debe considerar esto: con Hilux es muy probable que tenga menos dolores de cabeza logísticos; con Ranger, debe asegurarse de tener un buen concesionario cercano y ser más proactivo en seguimiento. En cualquiera de los dos casos, es fundamental mantener el vehículo correctamente para aprovechar la garantía y soporte – pero sabiendo que Toyota posventa es uno de sus fuertes, mientras Ford posventa es un área donde sigue construyendo confianza en Perú.

13. Consumo de Combustible y Emisiones

El rendimiento de combustible de estas pickups es un aspecto importante, tanto por el costo operativo como por el impacto ambiental (emisiones). En general, las camionetas diésel medianas no son campeonas de economía, pero veamos detalles:

Consumo de combustible (Hilux): La Toyota Hilux 2025 con motor 2.8 turbodiésel tiene consumos típicos en el segmento. En ciudad densamente congestionada, se han medido cifras en el rango de 7 a 8 km/L (≈13–14 L/100km). En condiciones urbanas más fluidas puede llegar a ~9–10 km/L. En carretera abierta a 90-100 km/h, la Hilux 2.8 AT logra alrededor de 12 km/L (≈8.3 L/100km), e incluso rozar 13 km/L con conducción suave. Un test de Latin NCAP/ECE menciona un consumo combinado de 9.3 L/100km para la Hilux 2.8 4×4 AT, que equivale a ~10.75 km/L. Usuarios en Perú reportan promedios combinados alrededor de 10 km/L, lo cual es razonable para una 4×4 de 2 toneladas. La versión 2.4L diésel, con menos potencia, puede ser ligeramente más económica: ~1 km/L más en cada escenario (su menor potencia exige menos combustible en carga liviana).

Consumo de combustible (Ranger): La Ford Ranger 2025 con motor 2.0 Bi-Turbo y caja 10AT sorprende con buenos consumos en carretera gracias a la alta eficiencia de su conjunto. En autopista, puede lograr 13-14 km/L (≈7.5 L/100km) a velocidad crucero moderada, superando por poco a Hilux. En ciudad, la Ranger Bi-Turbo se mantiene en valores similares a Hilux: ~7-9 km/L dependiendo tráfico, tal vez acercándose a 9 km/L gracias a la función start-stop en semáforos y la transmisión que mantiene el motor en bajas rpm. La Ranger V6 3.0, al tener mucha cilindrada y potencia, consume más: en ciudad puede caer a 5-6 km/L si hay tráfico (alrededor de 16-18 L/100), y en carretera dar ~9-10 km/L a 90 km/h. Es el precio a pagar por 250 HP. No obstante, quien compra la V6 suele priorizar desempeño sobre economía. Cabe mencionar que la Ranger cuenta con modo ECO que optimiza la gestión de cambios y AC para ahorrar algo de combustible, lo cual puede mejorar un 3-5% el consumo en uso urbano ligero.

Comparativo: Globalmente, la Ranger 2.0 Bi-Turbo podría ofrecer un pelín mejor consumo combinado que la Hilux 2.8 (estimado 1 km/L más en promedio). La Hilux, aun con sus mejoras, sigue usando una caja 6AT que a 120 km/h mantiene el motor a ~2200 rpm, mientras la Ranger 10AT a esa velocidad va a ~1500 rpm, incidiendo en menor consumo. Por otro lado, la Hilux cuenta con modo Power que aviva la respuesta pero aumenta el consumo, y modo Eco que suaviza aceleración. La diferencia no es dramática, pero está ahí.

Emisiones: En cuanto a emisiones, la normativa en Perú hasta hace poco era Euro IV, pero ya se exige Euro V para nuevos modelos diésel. La Toyota Hilux en su versión 2.8 incorpora DPF y catalizador de oxidación para cumplir Euro V (en algunos mercados incluso Euro VI con AdBlue, pero en Latam no lleva urea). Sus emisiones de CO₂ combinadas rondan los 240 g/km (valor calculado en pruebas internacionales). Latin NCAP en un informe indicó 224-272 g/km para Hilux 2.8 según ciclo de prueba– básicamente muy altas comparadas con un auto, pero dentro de lo esperable para pickups (que al no tener estándares de consumo CAFÉ en Latam, no se han optimizado en ese aspecto tanto). La Ford Ranger 2.0 Bi-Turbo debería emitir ligeramente menos CO₂ gracias a su eficiencia – posiblemente en el rango de 210-230 g/km en ciclo combinado (no tenemos una cifra oficial, pero extrapolando de resultados del mismo motor en otros vehículos). La Ranger 3.0 V6 diésel emitiría más, cerca de 260 g/km.

En contaminantes locales, ambas al ser Euro V, retienen gran parte del material particulado (de ahí el DPF). La Hilux tuvo problemas con el DPF, pero en teoría sus emisiones de PM están controladas. La Ranger 2025, al provenir de un desarrollo global, muy probablemente incluye SCR (Selective Catalytic Reduction) con inyección de urea en mercados Euro6; no está confirmado si la variante Mercosur tiene el depósito de AdBlue, pero es posible que no, quedando en Euro V similar a Hilux.

Aspecto ecológico: Ni la Hilux ni la Ranger son vehículos “verdes”. Sus consumos de ~8-10 km/L implican huella de carbono significativa. Como referencia, esos 240 g/km de CO₂ de Hilux comparan con ~150 g/km de un sedán mediano – es bastante más. En ruido, los motores diésel modernos son más silenciosos que antes pero igual más ruidosos que gasolineros; la Hilux ha sido criticada por sonido de motor algo rudo en aceleración (aunque mejoró con insonorización), la Ranger Bi-Turbo suena menos y el V6 emite un ronroneo suave.

Toyota ha anunciado una Hilux mild-hybrid 48V para reducir consumo ~10% en 2025, lo cual bajaría algo emisiones. Ford a su vez planea una Ranger híbrida enchufable para 2025-2026 en otros mercados. Es decir, se vienen mejoras en este rubro.

Impuestos y restricciones: En Perú no hay restricciones ambientales duras aún (como pico y placa por emisiones), pero en el futuro, tener una pickup menos contaminante podría ser ventaja. Por ahora, ambos pagan impuesto al rodaje similar por su valor, sin diferenciación eco.

En resumen, en consumo la diferencia Ranger vs Hilux es marginal, con leve ventaja para Ranger 2.0 en eficiencia. La Hilux cumple adecuadamente pero no sobresale en ahorro. Y en emisiones, ambas son altas en CO₂ y NOx comparadas con vehículos ligeros; cumplen la norma vigente pero con escaso margen. El comprador debe esperar rendimientos de ~8-10 km/L real en diésel, planificar costos en combustible en consecuencia, y ser consciente de que su huella ambiental es mayor (quizá mitigable usando diésel de bajo azufre siempre, manteniendo bien el DPF y Catalizador para minimizar emisiones negras de humo).

14. Evaluación por Tipo de Usuario

Cada pickup tiene características que la hacen más adecuada para ciertos perfiles de uso. Veamos distintos tipos de usuario y cuál modelo encaja mejor:

• Familias urbanas/adventureras: Para una familia que usa la camioneta como vehículo diario en ciudad y viajes de fin de semana, la Ford Ranger suele ser la elección más satisfactoria. ¿Por qué? Ofrece mayor comodidad interior (espacio y amenidades), un andar más suave en asfalto y muchas seguridades activas para proteger a la familia. Los padres apreciarán los 7 airbags y asistencias de la Ranger, así como la conectividad (los chicos pueden conectar sus dispositivos fácilmente). La Hilux en versión SRV también sirve para familia, pero su suspensión dura puede restar confort a los pasajeros, especialmente en asientos traseros rebotando en baches. Sin embargo, hay familias que igual la eligen por confiabilidad. Si la prioridad es confort y seguridad para la esposa e hijos, la Ranger (o incluso opciones como Nissan Frontier con suspensión más suave) adelanta a Hilux. Si en cambio la familia valora “vamos a lugares recónditos y necesitamos algo que nunca nos deje varados”, la Hilux puede darles esa tranquilidad extra.
• Flotas corporativas y trabajo pesado: Aquí la Toyota Hilux es casi sinónimo. Empresas de minería, construcción, agroindustria típicamente van por Hilux porque saben que a largo plazo les resultará más rentable (menos downtime, mejor reventa, imagen robusta). Para choferes de flota, la Hilux es una herramienta reconocida – algunos la prefieren aunque sea menos ergonómica, porque confían en su aguante. La Ranger sí es usada en flotas (por ejemplo, ciertas contratistas de energía han comprado Ranger por ser más baratas iniciales), pero muchas terminan vendiéndose antes porque las empresas vuelven a Hilux al evaluar el ciclo completo. Un factor es la homogeneidad: flotas grandes estandarizan en Hilux para facilitar repuestos y capacitación mecánica. Así, el usuario de flota (conductores rotativos, vehículo siempre cargado) encaja mejor con Hilux. La Ranger podría ser para flotas que buscan ahorro inicial o funciones específicas (ej: una empresa de mantenimiento de carreteras podría querer Rangers por su potencia de arrastre de equipo ligero, o flotas gubernamentales que hicieron convenios con Ford).
• Jóvenes entusiastas / uso recreativo: Un usuario joven (20s-30s) que compra una pickup probablemente busque estilo, potencia y posibilidades de personalización. En este caso, la Ford Ranger – sobre todo versiones como la Raptor o XLT con apariencia imponente – suele ser más atractiva. La Ranger tiene un diseño más moderno y agresivo, y elementos como las luces LED Matrix (en Raptor) o la parrilla “FORD” gigante que fascinan a entusiastas. Además, es más rápida y divertida de manejar. Muchos jóvenes aficionados al 4×4 optan por Ranger Raptor para duneo en la playa o saltos, cosa que la Hilux stock no ofrece (tendrían que modificarla bastante). También, la comunidad de tuning encuentra en Ranger un lienzo: hay “Ranger custom Raptor” (como vimos en Neoauto, una Ranger 2020 transformada a look Raptor) que son populares. La Hilux ciertamente tiene seguidores jóvenes – especialmente los que la modifican al estilo “toyoteros” con lifts, bumper ARB, snorkel, etc. – pero su imagen es más clásica. Un joven profesional quizás preferirá la conectividad y look interior de Ranger, que se siente más coche del siglo XXI. Por tanto, para un uso ocio, paseos off-road, presumir en reuniones automotrices, la Ranger llama más.
• Off-road extremo / 4×4 hobby: Aquí hay que distinguir. Si el usuario es un overlander (viajes largos off-road, autosuficiencia), es común que escoja Hilux por confiabilidad mecánica en cualquier lugar. Muchos expedicionarios equipan Hilux con carpa de techo y se van a la Amazonía sin miedo, sabiendo que “no hay complicación electrónica”. En cambio, si el usuario es un deportista off-road (rally raid, rutas rápidas, saltos), la Ranger Raptor es prácticamente la mejor del segmento, diseñada justamente para eso – ningún otro modelo viene listo de fábrica con suspensión de competencia y 400 HP. Entonces, para off-road técnico lento, Hilux con bloqueos, etc. modificado va muy bien; para off-road rápido y lúdico, Ranger (especialmente Raptor) es superior. Un usuario que quiera salir los fines de semana a las dunas de Paracas a hacer drifting en arena, disfrutará más la Ranger (y su control de tracción incluso tiene modo baja adherencia).
• Carga pesada constante / remolque: Si el perfil es alguien que va a transportar sacos, materiales de construcción, cosechas todos los días, la Hilux es la bestia de carga. Su eje rígido trasero robusto aguanta mejor el castigo continuo. Casos de usuarios en haciendas mencionan que las Hilux aguantan 5 años cargando al tope sin mayor mantenimiento que lo básico. La Ranger también puede, pero anecdóticamente se han visto Rangers con hojas traseras vencidas o chasis fisurado en condiciones extremas (carga mal distribuida, etc.), situaciones en las que la Hilux resistió. Asimismo, para remolcar trailers, la Ranger V6 ofrece más torque y capacidad (arrastre hasta 3.5 toneladas con freno), por lo que un usuario que remolque, digamos, un bote grande o maquinaria, aprovechará esa fortaleza extra de Ranger. Sin embargo, la mayoría de usuarios de carga en Perú no remolcan, sino que llevan en la tolva, y en eso la Hilux es reina.
• Uso mixto trabajo-familia: Muchos compradores necesitan la pickup para el negocio pero también para ir con la familia. Aquí la decisión es más difícil. Si el trabajo no es tan rudo, la Ranger puede dar lo mejor de dos mundos – suficientemente capaz en obra y muy cómoda para la familia. Si el trabajo es duro y primordial, la Hilux garantiza menos problemas y de todas formas sirve para la familia aunque sea menos cómoda (recordemos que la Hilux SRV ya ofrece buen equipamiento interior, solo la suspensión es el punto flaco de confort). Un perfil típico es el contratista que en semana va a obras (prefiere Hilux) pero el fin de semana la usa para paseo (preferiría Ranger). Acá pesa qué valora más: minimizar riesgos en el trabajo o mayor disfrute personal. Muchos en esa situación igual eligen Hilux por la mentalidad conservadora de “lo seguro”.

En resumen:

• Familia urbana/recreo: Ranger (más cómoda, segura).
• Flota/trabajo rudo: Hilux (más robusta, mejor respaldo).
• Joven entusiasta: Ranger (más moderna, potente, personalizable).
• Off-road expedición: Hilux (fiabilidad, sencillez).
• Off-road deporte: Ranger (especialmente Raptor, desempeño).
• Carga pura: Hilux (diseño orientado a eso).
• Remolque pesado: Ranger (motor V6 fuerte).
• Uso dual moderado: Ranger (balance confort/capacidad).
• Uso dual intensivo: Hilux (priorizar aguante en labor).

Lo bueno es que tanto Hilux como Ranger son vehículos muy versátiles. Pueden adaptarse a diferentes roles con el equipamiento adecuado. Pero definitivamente, el perfil del comprador ideal de Hilux es alguien que antepone la confiabilidad utilitaria, y el de Ranger es alguien que busca más comodidad, tecnología y performance sin sacrificar demasiado la capacidad de trabajo.

15. Comparación con Rivales del Segmento

El segmento de pickups medianas en Perú es muy competitivo. Además de Hilux y Ranger, compiten modelos como Nissan Frontier, Mitsubishi L200 Triton, Chevrolet S10 (Colorado), Mazda BT-50 / Isuzu D-Max, e incluso Volkswagen Amarok (aunque esta última de primera generación ya salió de venta, y la nueva Amarok 2023 basada en Ranger podría llegar). También emergen opciones chinas (JAC T8, Maxus T60, Foton Tunland) pero aún están ganando espacio.

En comparación con Nissan Frontier (NP300 Navara): La Frontier producida en México ofrece un andar muy cómodo gracias a su suspensión trasera de 5 brazos (única en el segmento), y un motor 2.3L biturbo diésel de 188 HP eficiente. En confort, la Frontier supera a Hilux (suspensión más suave) y se acerca a Ranger. En equipamiento también es buena, con 6 airbags y techo solar en versiones tope. Sin embargo, la Frontier no tiene la reputación de durabilidad de la Hilux – sufrió algunos problemas de chasis en versiones europeas (en Perú eso no se evidenció mayormente) y su valor de reventa es intermedio. Si comparamos: Hilux aún la supera en robustez percibida, Ranger la supera en potencia (no tiene V6 la Nissan) y tecnología (la Frontier carece de algunas asistencias que Ranger incluye). Aun así, la Frontier es un rival fuerte que se podría ubicar como equilibrio entre Hilux y Ranger: más confortable que Hilux, más simple que Ranger.

Mitsubishi L200: Muy popular en Perú (de las top ventas). La L200 destaca por su sistema de tracción Super Select en las versiones altas, que permite 4×4 Full-Time (tracción en las 4 permanente) – única en el segmento mainstream. Su motor 2.4L turbodiésel (181 HP) es ágil y económico. La L200 tiene renombre de fiable también, casi al nivel Hilux, y su mantenimiento es de los más bajos. En contra, su espacio interior es algo menor y el eje trasero es rígido con ballestas, con manejo similar a Hilux en dureza. Comparativamente: Hilux gana en motor más potente (201 vs 181 HP) y quizás en acabados interiores; Ranger gana en todo lo referente a tecnología y potencia; pero la L200 muchas veces gana en precio – suele ser más barata. Muchas empresas eligen L200 por ser la “Hilux más barata”, con buena reventa y bajo costo operativo. Entonces, en un ranking: Hilux y L200 son las más orientadas a trabajo duro, con L200 ofreciendo más por menos dinero pero no el estatus Toyota. La Ranger apela a quien quiere más sofisticación que ninguna de las dos mencionadas provee.

Chevrolet S10 (Colorado): Chevrolet trae la Colorado bajo el nombre S10 a algunos mercados vecinos; en Perú ha estado intermitente. Hoy por hoy no tiene tanta presencia. La S10 ofrece motor 2.8L Duramax de ~200 HP similar en cifras a Hilux, pero su calidad general y red de servicio Chevy no han convencido del todo. Tiende a depreciarse mucho más. No es rival fuerte en ventas contra Hilux/Ranger. Quien busca un producto americano robusto quizás mire la Colorado, pero la Ranger V6 ahora captura esa idea mejor (la Ranger es esencialmente la “F-150 junior”). Por tanto, la S10 queda rezagada; Hilux la supera en confiabilidad/red y Ranger en modernidad.

Mazda BT-50 / Isuzu D-Max: Mencionados juntos porque comparten plataforma (Isuzu fabrica el D-Max y Mazda BT-50 ahora es su gemela). Son pickups muy fiables (el Isuzu D-Max es legendario por su motor durable, aunque ahora usan uno 3.0 nuevo de ~190 HP). Tienen buen equipamiento de seguridad (D-Max obtuvo 5 estrellas Latin NCAP recientemente). Su presencia en Perú es menor, pero a quienes las compran les van muy bien – suelen situarse en precio competitivo también. Frente a Hilux: los modelos de Isuzu/Mazda ofrecen confort decente y alta confiabilidad (Isuzu es marca de camiones, saben de durabilidad). Sin embargo, Hilux gana en potencia ligeramente y en reventa. Frente a Ranger: Isuzu/Mazda son más tradicionales, no tienen la potencia ni gadgets de Ranger, pero pueden ser más robustos mecánicamente.

Volkswagen Amarok: La Amarok de primera generación (motor 2.0 Bi-TDI 180 HP o V6 TDI 224 HP) era famosa por su manejo tipo auto (suspensión trasera multi-link en algunas versiones, gran estabilidad). Tenía cabina muy amplia y un V6 turbodiésel formidable en las últimas versiones. Sus puntos débiles: falta reductora en los 2.0 (tenían solo AWD permanente sin low range), menor red de servicio VW en pickups, y precio alto. En Perú tuvo cierto éxito con flotas ejecutivas pero nunca amenazó a Hilux. La nueva Amarok 2023 está basada en la Ranger (comparten motor, chasis, etc.), así que sería casi la misma pickup con otro estilo. Si llegara, competiría directamente también. Probablemente apuntaría a un nicho más premium (donde el cliente evalúa Amarok vs Ranger vs Hilux top). Hilux seguiría ganando en rudo/tradicional, Ranger/Amarok en vanguardia.

Chinas (JAC, Great Wall, Maxus): Estas han entrado en el mercado con precios muy inferiores y cada vez mejor equipadas (algunas ya vienen con 150-160 HP, 4×4, pantallas enormes, etc.). Su cuota en 2023 estaba creciendo en el sector de pickups comerciales ligeras, pero en el rango Hilux la penetración es baja. Todavía arrastran duda de durabilidad y su reventa es malísima (deprecian brutal). Por ahora, no son rivales serios para quien puede comprar Hilux o Ranger – a lo sumo le quitan ventas a quien busca nuevo barato. En unos años podrían ser más competitivas técnicamente, pero la confianza en Hilux tardará mucho en alcanzarla.

Conclusión rivales: La Hilux comparada con todas sigue siendo el “benchmark” en fiabilidad y reventa. La Ranger se ha colocado como referente en potencia y tecnología, sobrepasando a casi todos (solo la Amarok V6 anterior y la nueva en colaboración la empatan en motor). Nissan Frontier y Mitsu L200 son los equilibristas: ofrecen cosas interesantes (comodidad en Nissan, precio en Mitsu) y son segundas opciones lógicas si uno descarta Hilux/Ranger. En particular, si un comprador valora comodidad pero no confía en Ford, probablemente vaya por una Nissan Frontier Pro-4X en lugar de Ranger; y si valora robustez pero quiere ahorrar un poco, quizás elija L200 en vez de Hilux.

En cualquier caso, la decisión Hilux vs Ranger suele ser la central, y las demás se evalúan alrededor. Por eso esta comparativa se enfoca en ellas: son como los polos opuestos (tradición vs innovación) y los demás modelos se ubican en el espectro intermedio.

16. Confort y Tecnología Interior por Versión

Las diferencias en confort interior y tecnología entre versiones de Hilux y Ranger pueden ser notables, determinando la experiencia diaria del conductor y pasajeros.

Ford Ranger 2025:

• Versión XL (base): A pesar de ser la entrada, sorprende con bastante dotación tecnológica. Trae de serie aire acondicionado manual, pantalla táctil de 10” SYNC 4 con Android Auto/CarPlay, panel de instrumentos con display digital, 4 parlantes, vidrios eléctricos y cierre central. Los asientos son en tela resistente, de ajuste manual, y el volante no tiene forro en cuero (uretano) pero sí comandos de audio. No tiene muchos lujos, pero es funcional y moderna – por ejemplo, incluye control crucero desde la base. En términos de aislamiento, la cabina XL ya cuenta con buen aislamiento acústico (mejor que una Hilux básica), por construcción de la nueva generación.
• Versión XLS: Añade algunos refinamientos: tapicería de mejor calidad (tela premium), volante forrado en cuero con controles completos, posiblemente climatizador automático (en algunas versiones XLS altas), y más parlantes. Mantiene la misma pantalla de infoentretenimiento. Puede agregar cámara de retroceso de fábrica. En general, la Ranger XLS ya se siente bastante cómoda: la diferencia con XLT radica más en asistencias.
• Versión XLT: Aquí la Ranger da un salto a un ambiente casi de SUV de lujo. Equipa pantalla táctil vertical de 12” en el centro en muchos mercados (habría que confirmar Perú, pero es lo probable) y un clúster digital frente al conductor. Tiene climatizador bi-zona automático, asientos parcialmente en cuero o cuero ecológico, asiento del conductor ajustable en altura, espejos eléctricamente abatibles. Incorpora iluminación LED ambiental tenue. El nivel de tecnología es alto: incluye navegación, reconocimiento de voz avanzado, etc. En confort, suma detalles como apoyabrazos central acolchado, múltiples espacios portaobjetos (la nueva Ranger tiene soluciones como compartimiento superior tipo guantera doble). El rodado es aro 17 o 18 con neumáticos AT, lo que mejora el aplomo.
• Versión Limited (LTD): Es la tope (en algunos sitios llamada Limited+). Aquí todo es cuero – asientos forrados en cuero, con ajuste eléctrico al menos para conductor, volante cuero, tapizados de puertas con inserciones suaves. El sistema de audio es superior (posiblemente firmado por Bang & Olufsen en versiones globales, con subwoofer). Trae techo solar panorámico en algunas regiones (por confirmar si en Perú lo ofrecen). La pantalla central sigue de 12” pero puede tener funciones extra (como vista de cámara 360°, modos de visualización off-road). Incorpora cargador inalámbrico para smartphone, calefacción en asientos (quizás no en clima tropical, pero en diseño lo tiene). La iluminación interior es LED blanca. Básicamente, la Ranger Limited tiene nivel de una SUV mediana de lujo en cabina. Silenciosa en ruta gracias a cristales más gruesos acústicos.
• Ranger Raptor: Es una categoría aparte – interior deportivo con asientos de diseño especial (más soporte lateral, combinación cuero/Alcántara), levas de cambio en magnesio, volante con marca central roja, etc. Pero en tecnología incluye todo lo de Limited y más (ej. modos de conducción extra en la pantalla, info off-road).

En suma, la Ranger base ya es moderna, y la full es casi premium. Hay coherencia en toda la gama con la pantalla SYNC 4 que brinda una experiencia tech uniforme, lo cual es un gran acierto de Ford.

Toyota Hilux 2025:

• Hilux Work Cabina Simple (base): Estas versiones de trabajo son espartanas. Interior de plástico duro totalmente (fácil de lavar), tapizado de asientos en vinil o tela sencilla, sin pantalla (trae radio AM/FM con puerto USB/Aux en las más nuevas, 2 parlantes). Aire acondicionado suele ser opcional o inexistente en la versión más básica 4×2 (aunque muchas Hilux de flota vienen sin AC para reducir costo). Los alza-vidrios pueden ser manuales en la versión absolutamente base de trabajo (en Perú la “C&D Con Furgón” podría tener manivelas). No hay ningún elemento de lujo: volante de uretano sin controles, instrumental analógico con tacómetro básico, no hay aislamiento acústico extra – se oye bastante ruido de motor en cabina. Estas versiones están pensadas para durabilidad: pisos de goma, etc.
• Hilux SR (Cabina Doble base 4×2/4×4): Equipa ya aire acondicionado manual, dirección hidráulica (todas traen), y típicamente vidrios y espejos eléctricos. Trae una radio con Bluetooth (no pantalla táctil) de fábrica con 4 parlantes. Los asientos siguen de tela resistente, sin ajuste de altura del conductor en algunos casos. No tiene control crucero ni muchos gadgets. Es comparable a la Ranger XL pero con menos tecnología (sin pantalla grande). Su punto a favor es la sencillez – menos cosas que distraen o fallar.
• Hilux SRV (Cabina Doble full): Es la versión orientada a uso personal. Incorpora pantalla táctil 8” con conectividad (Android Auto/CarPlay), 6 parlantes, sistema de climatizador dual (en Hilux SRV AT, se ofrece climatizador bizona), tapicería en cuero negro o mix cuero/tela (depende mercado; en Perú muchas SRV vienen cuero ecológico). Agrega botón de encendido Smart Key, y detalles como volante forrado en cuero con control crucero y audio, panel de instrumentos con display MID color de 4.2”. La calidad percibida mejora: las Hilux SRV tienen apliques símil metal en consola, y el aislamiento es un poco mejor (Toyota agrega material insonorizante extra en versiones altas). Los asientos frontales pueden tener soporte lumbar ajustable, pero no son eléctricos (incluso la Hilux SRV AT viene con asientos manuales en muchos casos). En términos de espacio, la Hilux es ligeramente más estrecha que Ranger, pero caben 5 adultos medianos bien. En la SRV, hay toma de 12V y USB para los pasajeros. Tecnologías en SRV: según versión puede traer sensores de retroceso, cámara trasera, y en modelos 2025 importados es posible que integren Toyota Safety Sense (en algunos países la Hilux SRV AT ya ofrece frenado autónomo, alerta de cambio de carril, etc., pero habría que confirmar si en Perú está activo ese paquete).
• Hilux GR-Sport: Interior con toques deportivos: asientos con logo GR, costuras rojas, pedales de aluminio, volante GR con levas (si es AT). A nivel de confort es similar a la SRV, no añade mucha tecnología, más bien estilo (alfombrillas GR, etc.). La suspensión es más firme, lo cual paradójicamente reduce algo de comodidad en pavimento pero mejora control en off-road.

Comparando confort Hilux vs Ranger por versión equivalente:
Una Hilux SRV AT (tope) frente a una Ranger Limited:

• La Hilux ofrece cuero, CarPlay, clima dual, 7 bolsas de aire – es un interior muy bueno, pero la Ranger Limited ofrece todo eso y más: pantalla más grande y moderna, cuadro de instrumentos digital vs análogo en Hilux, posiblemente asientos eléctricos y techo panorámico que Hilux no tiene, e incluso detalles de acabado (p.ej. molduras suaves en tablero) donde Hilux sigue usando plástico duro. Entonces, la Ranger full se siente de categoría superior en lujo interior a la Hilux full, que se nota más “utilitaria refinada” pero no de lujo.
• En versiones base, la Ranger XL saca ventaja en tecnología (solo el hecho de traer la pantalla grande, cámara trasera opcional, etc., la hace ver 5 años más moderna que la Hilux base con radio de segmentos). Sin embargo, algunos podrían argumentar que la simplicidad de la Hilux base es mejor para trabajo (menos distrae, etc.). Pero objetivamente, el conductor de una Ranger XL tendrá más comodidades (A/C, controles al volante, etc. vienen estándar) que uno de Hilux “pelada”.

Asientos y ergonomía: La Ranger tiene asientos más ergonómicos y reclinables en mayor grado (porque la cabina es un poco más larga). La Hilux, no obstante, ofrece buen soporte y ahora en SRV viene con butaca del conductor regulable en altura, lo que antes no todas tenían. La postura de manejo de Hilux es un pelín más elevada sobre el capó, mientras la Ranger da sensación más envolvente (ventanillas más altas). Los pasajeros traseros van un poco más cómodos en Ranger porque la banca es más inclinada; en Hilux la banca trasera es más vertical y dura, adecuado para viajes cortos o para que no se maltrate con obreros subiendo/bajando.

Ruido y vibraciones: La Hilux tiende a meter más ruido de motor y vibración diésel en cabina, especialmente en aceleraciones fuertes. La Ranger, con más aislamiento y un motor más silencioso (el 2.0 bi-turbo tiene un sonido suave), se percibe más silenciosa a velocidades de crucero. Esto contribuye al confort en viajes largos.

Equipos especiales: Ninguna de las dos ofrece cosas como asientos ventilados o memorias (esas características no se ven en pickups medianas aún). Pero la Ranger Limited sí trae limpiaparabrisas automáticos, faros automáticos LED, sensores de luz y lluvia, etc. La Hilux SRV tiene faros LED pero tal vez no con auto nivelación en todas las versiones, y no siempre sensores de lluvia. Son detalles, pero suman a la impresión tecnológica.

En resumen, versión por versión la Ranger suele ofrecer un interior más confortable y avanzado que la Hilux equivalente. La Hilux no es incómoda, especialmente las últimas SRV mejoraron bastante (por ejemplo ahora tienen volante telescópico que antes Hilux no tenía y complicaba la posición de manejo). Pero la Ranger marcó un nuevo estándar en la categoría, haciendo sentir a la Hilux un poco desactualizada en cabina. Es probable que Toyota reaccione con una nueva generación Hilux en un par de años incorporando más lujos para no quedarse atrás.

17. Seguridad Activa y Pasiva (Airbags, Frenos, Asistencias, Latin NCAP)

La seguridad es un punto crítico y vale comparar qué ofrece cada pickup y sus desempeños en pruebas de choque.

Toyota Hilux: Las Hilux comercializadas en Perú actualmente traen de 3 a 7 airbags dependiendo la versión:

• Las de trabajo (cabina simple y algunas doble cabina base) suelen venir con 3 airbags (frontales + rodilla conductor) o 2 frontales + 1 rodilla conductor.
• Las versiones SRV y GR-Sport vienen con 7 airbags: frontales conductor/pasajero, laterales de tórax en asientos frontales, de cortina para ambas filas, y de rodilla conductor. Esto pone a Hilux a la par de rivales en versiones full.
• Frenos ABS con EBD son estándar en todas, al igual que control de estabilidad (VSC) y control de tracción desde hace unos años (Toyota los hizo estándar alrededor de 2019). También trae asistente de arranque en pendiente HAC.
• En Hilux SRV AT se incluye a veces Asistente de descenso (DAC) para 4×4 en bajadas empinadas.
• Algunas Hilux en Latinoamérica ya ofrecen Toyota Safety Sense (TSS) que incluye: Sistema Pre-Colisión (frenado autónomo de emergencia), Alerta de Cambio de Carril y Control Crucero Adaptativo. No está claro si la Hilux peruana 2025 lo incorpora; en la región, países como Argentina y Chile empezaron a recibir Hilux con TSS en 2022 para versiones tope. Si la SRV de Perú lo tiene, eso añade un gran plus en seguridad activa (frenar por ti si detecta riesgo de choque). Si no, pues la Hilux estaría limitada a las asistencias básicas ya mencionadas.

En Latin NCAP, la Hilux con 7 airbags y ESC obtuvo 5 estrellas en protección de adultos y niños (versión probada en 2019). La estructura fue considerada estable y ofreció buena protección en impactos frontal y lateral. Latin NCAP destacó que incluso la versión 3 airbags (probada años antes) tenía buena resistencia, aunque lógicamente penalizó por falta de bolsas. Pero la generación vigente demostró buen desempeño de seguridad pasiva. Así que una Hilux SRV con 7 airbags es un vehículo muy seguro en choques – prácticamente equivalente a un SUV moderno en protección (cosa que hace una década no era así en pickups).

Ford Ranger: La nueva Ranger 2025 eleva también la apuesta:

• Desde la versión XL base en Perú se anunció con 7 airbags estándar (frontales, laterales, de cortina y de rodilla conductor), lo cual es excelente. Esto significa que incluso la más básica ofrece la misma protección pasiva que una Hilux tope.
• Todos los frenos con ABS/EBD, control electrónico de estabilidad (ESC) y tracción desde base. Además, incluye control antivuelco y estabilizador de remolque integrados al ESC, cosas que no siempre se mencionan pero vienen en el paquete.
• Asistencias avanzadas: En la Ranger XLT y Limited se suman sistemas ADAS de última generación: frenado autónomo de emergencia (AEB) con detección de peatones, control crucero adaptativo con función Stop&Go (en AT), asistente de mantenimiento de carril con corrección de dirección, monitor de punto ciego (BLIS) que incluso cubre el largo de un remolque, alerta de tráfico cruzado al retroceder, reconocimiento de señales de velocidad, etc. La Ranger Raptor trae además modos de conducción que ajustan la seguridad (ej. en modo Baja el control de tracción permite más deslizamiento para uso deportivo).
• Faros: en Ranger Limited/Raptor vienen faros LED Matrix adaptativos (luz alta automática por segmentos) en algunos mercados, lo que mejora seguridad nocturna. Hilux solo tiene LED básicos.
• Cámara 360°: la Ranger Limited incorpora cámara 360 con vista dividida, ayudando a maniobras seguras.
• Latin NCAP aún no ha probado la Ranger 2023 regional; sin embargo, la Ranger anterior (2012) logró 5 estrellas en su momento con 3 airbags. Es de esperar que esta nueva, con más airbags y asistencias, cumpla igual o mejor. Ford además menciona que la Ranger obtuvo 5 estrellas en Euro NCAP equivalente (la versión Australiana obtuvo puntuaciones altas en ANCAP).
• Una posible diferencia: los frenos traseros. La Hilux aún usa tambores traseros, mientras la Ranger (salvo XL) en algunos mercados viene con discos traseros. En la ficha de Perú de versiones pasadas, la Ranger tenía tambor trasero; no está confirmado si la nueva generacion introducirá discos posteriores en Latinoamérica (la Ranger Raptor sí los tiene). En todo caso, el frenado de Ranger se siente potente gracias a ABS bien calibrado y al hecho de traer discos más grandes adelante. La Hilux frena adecuadamente también, pero en pruebas de frenado de 100-0 km/h suele necesitar algunos metros más que pickups con 4 discos.

En cuanto a seguridad infantil, ambas tienen anclajes ISOFIX en la cabina trasera (Hilux los tiene en doble cabina, Ranger también incorpora 2 sets). Las puertas traseras de ambos modelos tienen seguros para niños, etc.

Resumen de seguridad: La Ranger supera ligeramente a la Hilux en equipamiento de seguridad activa, gracias a la inclusión de ADAS (frenado autónomo, etc.) en versiones top y quizá de serie en algunas (por confirmar qué versiones peruanas exactas lo traen, pero en otros mercados XLT ya lo tiene). La Hilux no se queda atrás en construcción sólida y airbags, equiparando 7 bolsas en las full. Donde Hilux flaquea es en no tener de serie esos ADAS modernos (si TSS no está presente). De todos modos, en la mayoría de escenarios, ambas protegen muy bien a los ocupantes en caso de choque.

Para un comprador enfocado en seguridad, la recomendación sería: asegurarse de adquirir versiones con la dotación completa. Una Hilux SR o una Ranger XL, aunque estructuralmente seguras, no ofrecen el mismo nivel de protección que sus hermanas mayores con todos los airbags. Dado que estas pickups también se usan mucho en carretera y zonas de riesgo, es un punto vital a considerar.

Como dato final, en Euro NCAP, Hilux obtuvo 3-4 estrellas en su prueba 2016 (porque allá probaban la versión base sin algunas ayudas). Y la Isuzu D-Max/Mazda BT50 sacó 5 estrellas en 2020. Probablemente la Ranger nueva logre 5 estrellas EuroNCAP también. Esto demuestra que el segmento ha avanzado enormemente en seguridad: hace 15 años una pickup era bastante insegura en choques, hoy ya compiten con autos de pasajeros.

18. Disponibilidad y Versiones en Perú

A modo de resumen, listamos las versiones oficialmente comercializadas en Perú (2024-2025) para cada modelo, con sus características principales:

Toyota Hilux 2025 – Versiones en Perú:

• Hilux 4×2 Cabina Simple Chasis (Trabajo): Motor 2.4 turbodiésel 148 HP, 5MT, equipamiento básico (sin tolva, para carrozar). Enfocada a empresas que montan furgones o estructuras.
• Hilux 4×2 Cabina Simple con Furgón (Trabajo): Idem anterior pero la distribuidora la ofrece con furgón metálico instalado de fábrica, lista para reparto urbano.
• Hilux 4×4 Cabina Simple Chasis (Trabajo 4×4): Motor 2.8 turbodiésel 201 HP, 6MT, ideal para minería y uso rudo donde se requiere 4×4, viene sin tolva para adaptaciones.
• Hilux 4×2 Doble Cabina STD: Versión de entrada doble cabina, 4×2, motor 2.4 de 148 HP, 6MT. Orientada a flotas ligeras que necesitan cabina doble sin tracción total. Equipa A/C, 2 airbags frontales.
• Hilux 4×2 Doble Cabina SR: 4×2, 2.4 148 HP, disponible MT 6 vel (y posiblemente AT 6 vel). Añade mejores acabados que STD (radio c/ Bluetooth, quizás 3 airbags, interior más cómodo). Para usuarios que quieren pickup asequible para ciudad.
• Hilux 4×4 Doble Cabina SR: 4×4, motor 2.4 148 HP, MT 6 vel (y/o AT). Versión intermedia pensada para trabajo con tracción total. Equipamiento utilitario con elementos esenciales.
• Hilux 4×4 Doble Cabina SR 2.8: 4×4 con motor 2.8 de 201 HP, MT 6 vel. Versión para quien quiere el motor grande pero en acabado no full. Útil para flotas que requieran más potencia (ej. ambulancias pickups, unidades de rescate).
• Hilux 4×4 Doble Cabina SRV 2.8 MT: 4×4, 2.8 201 HP, transmisión manual. Versión high-end mecánica: ya trae 7 airbags, pantalla táctil, asientos mejorados, etc., pero mantiene caja manual para quienes la prefieren (por ejemplo, algunos off-roaders tradicionales).
• Hilux 4×4 Doble Cabina SRV 2.8 AT: 4×4, 2.8 201 HP, transmisión automática 6 vel. Es la versión tope de gama dirigida a ejecutivo/campo. Incluye todo el equipamiento: 7 airbags, cuero, climatizador dual, posiblemente Toyota Safety Sense (si está habilitado), llantas aleación 18”, etc.
• Hilux 4×4 Doble Cabina GR-Sport: Edición especial deportiva. 4×4, motor 2.8 204 HP (leve mejora), 6AT, suspensión deportiva GR, estética exclusiva (parrilla TOYOTA, overfenders anchos, ruedas 17” con neumáticos AT). Producción limitada. En Perú se suele ofrecer bajo pedido. Enfoque entusiasta off-road ligero.

(Nota: La nomenclatura SR, SRV puede variar ligeramente por mercado; esencialmente SR = semi-full, SRV = full. También existe en otros países una “Hilux Limited” o “Legend” pero en Perú se maneja SRV como la full.)

Ford Ranger 2025 – Versiones en Perú:

• Ranger XL 4×2 2.0L Turbo MT: Versión base cabina doble, tracción 4×2, motor diésel 2.0 170 HP, caja manual 6. Tiene 7 airbags, A/C, SYNC pantalla 10”, tapizado tela. Oriented a flotas que no requieren 4×4.
• Ranger XL 4×4 2.0L Turbo MT: Igual equipamiento que la anterior pero con tracción 4×4 part-time, reductora, y misma mecánica 170 HP manual. Es la de entrada 4×4, muy atractiva para empresas mineras y de construcción (robusta y con toda la seguridad, sin extras de lujo).
• Ranger XLS 4×2 2.0L Turbo MT: Versión intermedia 4×2. Suma algunos detalles sobre XL: posiblemente llantas de aleación, estribos laterales, tal vez sensor retroceso. Mantiene motor 170 HP y manual. Para usuarios que quieren algo más que la base sin llegar a tope.
• Ranger XLS 4×4 2.0L Turbo MT: Equivalente 4×4 de la anterior. Motor 170 HP manual, con mejor equipamiento que XL (por ejemplo, ajuste eléctrico de espejos con calefacción, barra antivuelco en la tolva, etc.). Buena opción costo-beneficio para 4×4 particular sin gastar en la XLT.
• Ranger XLT 4×4 2.0L Bi-Turbo AT: Versión alta. Motor 2.0 Bi-Turbo de 210 HP, caja automática 10. Tracción 4×4 con electrónica avanzada. Equipamiento completo: 7 airbags, pantalla 12”, tapizado premium (cuero/tela), luces LED, ADAS (frenado autónomo, etc.). Esta versión es estrella para quien busca todo menos el V6.
• Ranger Limited 4×4 3.0L V6 AT: Tope de gama. Motor V6 3.0 turbodiésel ~250 HP, 600 Nm, 10AT. Tracción 4×4. Lujo total: cuero completo, asientos eléctricos, cámara 360°, techo solar si disponible, llantas 20”, ADAS nivel 2 completo, etc. Es la opción para competir directamente con Hilux SRV en el escalón más alto, ofreciendo más potencia que ésta.
• Ranger Raptor 4×4 3.0L V6 EcoBoost AT: Versión especial de altas prestaciones (posiblemente bajo importación limitada). Motor 3.0 V6 gasolina Bi-turbo ~397 HP, 10AT, suspensión Fox de alto desempeño, modo Baja, carrocería reforzada. Interior deportivo. Precio significativamente más alto (alrededor de $67k). Orientado a entusiastas off-road y imagen de marca.

En la práctica, Ford Perú ha publicitado desde XL hasta Limited y Raptor. Hay versiones que no llegan como Black Edition u Wildtrak (que es similar a Limited con estética distinta). Pero la lista anterior cubre las disponibles.

Disponibilidad: Ambas pickups suelen tener stock razonable en concesionarios principales, aunque ciertas versiones (p.ej. Hilux GR-S, Ranger Raptor) pueden requerir encargo anticipado por su nicho. La Hilux se ofrece en colores clásicos: blanco, plata, gris, negro, rojo, azul oscuro – y la GR-S en colores bitono con techo negro. La Ranger nueva viene en colores como naranja, azul eléctrico, gris, negro, blanco; la Raptor destaca en gris Conquer, azul Performance, etc.

En general, un comprador en Perú puede encontrar la versión que se ajuste a su necesidad dentro del portafolio amplio de ambas marcas. Toyota abarca desde la básica de trabajo 4×2 hasta la full GR-S, y Ford desde la XL simple hasta la Raptor extrema. Esto asegura que el cliente pueda elegir exactamente lo que necesite en cuanto a tracción, potencia y equipamiento, sin pagar de más por cosas inútiles para su caso.

19. Veredicto Final del Experto: ¿Cuál Elegir y Por Qué?

El veredicto depende mucho del uso y perfil del comprador, ya que Ford Ranger 2025 y Toyota Hilux 2025 son excelentes pickups pero con fortalezas en áreas distintas. A modo de resumen:

• Si usted valora ante todo la fiabilidad comprobada, la facilidad de mantenimiento y el valor seguro a largo plazo, la Toyota Hilux 2025 es la elección tradicional y acertada. Para un entorno de trabajo duro (minería, construcción, campo agreste) donde el vehículo será una herramienta sometida a maltrato, la Hilux ofrece esa tranquilidad de “no lo va a dejar tirado” y en caso surja algo, cualquier mecánico la conoce. Su construcción sencilla y robusta, sumada a la fenomenal red de soporte de Toyota, la hacen ideal para quien depende de su camioneta para el sustento diario en zonas alejadas. Asimismo, si piensa conservarla muchos años o eventualmente revenderla, la Hilux garantiza el mejor retorno – es dinero casi guardado. Por ejemplo, para empresarios agropecuarios, contratistas de obras en provincia, instituciones gubernamentales que operan en zonas remotas, la Hilux es prácticamente un estándar por buenas razones. También, para un usuario particular tradicionalista, que prefiere “lo probado” y tal vez no necesita las últimas tecnologías, la Hilux en versión SRV le brindará confort suficiente con la confianza de su fama. En pocas palabras, la Hilux sería “la compra racional” enfocada en confiabilidad y economía a largo plazo.
• Si en cambio usted busca más comodidad, desempeño dinámico y equipamiento de vanguardia en su pickup, la Ford Ranger 2025 sobresale como la opción más moderna y completa. Para un usuario que combina trabajo ligero con uso personal – la familia, viajes, hobby 4×4 – la Ranger ofrece un manejo más placentero (suspensión más refinada, cabina silenciosa) y un nivel de tecnología equiparable al de un SUV de última generación. Sus asistencias de conducción avanzadas, la integración digital (pantallas, conectividad) y la potencia superior de sus motores (especialmente el Bi-turbo y el V6) la hacen muy atractiva para quien disfruta conducir y aprecia la innovación. Por ejemplo, un profesional joven o empresario que recorre ciudad y carretera, y que los fines de semana quiere aventurarse fuera de ruta con confort, probablemente encuentre en la Ranger XLT o Limited todo lo que desea: seguridad, potencia para adelantar con carga, y amenidades que facilitan la vida a bordo. También, para un entusiasta off-road deportivo, la variante Raptor de la Ranger es incomparable – ningún modelo similar ofrece esa capacidad lista de fábrica para alta velocidad fuera del asfalto. En síntesis, la Ranger sería “la compra emocional/tecnológica”, privilegiando performance y comodidad, sin dejar de tener capacidades serias.

En términos coloquiales: Hilux es la elección segura y ruda; Ranger, la elección innovadora y sofisticada. Ambos son excelentes, pero orientados a públicos ligeramente distintos. Un punto importante: la brecha de confiabilidad histórica entre ambas se ha reducido – la Ranger 2025 es mucho más robusta que antiguas Ford y la Hilux 2025 más equipada que sus predecesoras. Así que un comprador informado debe ya fijarse en los detalles de su necesidad más que en prejuicios.

Según el perfil del comprador:

• Usuario utilitario (trabajo pesado, altas distancias, prioridad uptime): Hilux.
• Usuario mixto (trabajo moderado + uso familiar, quiere equilibrio): Ranger puede ofrecer mejor balance comodidad vs capacidad.
• Frotamultas/Flotas corporativas: Hilux (por costo total de propiedad).
• Aficionado 4×4 expedicionario: Hilux (menos electrónica en medio de la nada).
• Aficionado 4×4 deportivo: Ranger (más potencia y suspensión avanzada).
• Persona que maneja mayormente en ciudad pero quiere pickup por estilo o fines de semana: Ranger (porque sufrirá menos la rigidez).
• Persona que valora reventa y planifica cambiar cada pocos años: Hilux (recuperará más inversión al venderla).
• Persona que quiere la última novedad y planea aprovechar garantía y luego renovar: Ranger (disfrutará lo último en tech y al renovarla a los ~5 años, la confiabilidad a ultra largo plazo no será problema).

En definitiva, no hay un ganador absoluto – ambos sobresalen en su terreno. La decisión se puede simplificar: “Compra una Hilux si necesitas un caballo de batalla incansable; compra una Ranger si quieres un caballo de carrera con comodidades.” En cualquiera de los casos, se lleva una pickup capaz, imponente y de reputación mundial. Pero ese matiz de enfoque hará la diferencia en su satisfacción como propietario. Mi consejo profesional es evaluar honestamente el uso principal que le dará: si va a pasar más tiempo en trocha cargando sacos, Hilux será su mejor aliada; si va a pasar más tiempo en asfalto con la familia y eventualmente ensuciarla el fin de semana, la Ranger le dará mayor satisfacción.

Al final del día, ¿cuál elegir?:

• Hilux para el pragmático que quiere durabilidad y valor seguro “a prueba de todo”.
• Ranger para el entusiasta que quiere disfrutar tanto en el camino como fuera de él, con el plus de la comodidad moderna.

Cualquiera que sea su elección, ambos modelos representan lo más alto del segmento hoy en Latinoamérica, así que difícilmente se equivocará – solo asegúrese de que encaje con sus prioridades.

20. Tabla de Puntuaciones por Categoría (Hilux vs Ranger)

A continuación, se asignan puntuaciones en estrellas (de 1 a 5) para cada modelo en diversas categorías clave, junto con un breve comentario:

Categoría	Toyota Hilux 2025	Ford Ranger 2025
Confiabilidad Mecánica	★★★★★★★★★★ 10/10 – Historial intachable; raras averías graves incluso con uso rudo. Referente en durabilidad.	★★★★★★★★★☆ 9/10 – Muy mejorada; motors robustos, pero mayor complejidad electrónica la deja ligeramente detrás de Hilux a largo plazo.
Valor de Reventa	★★★★★★★★★★ 10/10– Lidera el segmento. Depreciación mínima (Hilux usadas se cotizan altísimo) y alta demanda en reventa.	★★★★★★☆☆☆☆ 6/10 – Retiene valor regular. Pierde más que Hilux al venderla (deprec. ~30% en 3 años). Menor demanda hace venta más lenta.
Seguridad Global	★★★★★★★★★☆ 9/10 – Estructura sólida y hasta 7 airbags. Cuenta con ESC. Frena bien pero frenos traseros de tambor. ADAS limitados (depende si trae TSS).	★★★★★★★★★★ 10/10 – Sobresaliente. 7 airbags de serie, frenos excelentes, ESC avanzado. Versiones altas con ADAS completos (AEB, etc.) le dan ventaja notable en seguridad activa.
Mantenimiento y Postventa	★★★★★★★★★★ 10/10 – Red Toyota amplia; repuestos asequibles y disponibles. Servicio eficiente (clientes muy satisfechos) y garantía sólida. Ideal para operar en todo el país sin contratiempos.	★★★★★★★★☆☆ 8/10 – Postventa mejorando. Garantía extendida 5 años es buena. Aún red limitada fuera de Lima; posible espera de repuestos específicos. Costos de servicio algo altos pero similares a Hilux.
Consumo y Eficiencia	★★★★★★☆☆☆☆ 6/10 – Consumo promedio en diésel; ~8 km/L ciudad, ~12 km/L carretera. Sin opción híbrida por ahora. Emisiones CO₂ algo elevadas (~240 g/km) dentro de norma.	★★★★★★★★☆☆ 8/10 – Algo más eficiente con motor Bi-turbo (hasta ~10% menos consumo que Hilux). ~9 km/L ciudad, ~13-14 km/L ruta. V6 consume más. Emisiones CO₂ ligeramente menores que Hilux en 2.0. Start-stop ayuda en ciudad.
Comodidad de Marcha	★★★★★★☆☆☆☆ 6/10 – Suspensión trasera firme, brinca en vacío. En cabina, asientos correctos pero menos refinados. Ruido de motor perceptible al acelerar. Mejora con carga, pero overall más ruda que rivales en asfalto.	★★★★★ 5/5 – Muy confortable para ser pickup. Suspensión calibrada para suavidad relativa, menos rebote vacía. Cabina amplia, asientos ergonómicos, muy buena insonorización. Se siente estable y placentera en ciudad y ruta, casi como SUV.
Desempeño (Motor y Manejo)	★★★★★★★★☆☆ 8/10 – Potencia adecuada (148-201 HP) y entrega de torque lineal. Capaz en off-road, motor resistente. Pero aceleración y respuesta de AT son más lentas que en Ranger; en carretera cumple sin brillar. Dirección hidráulica firme.	★★★★★★★★★★ 10/10 – Lidera en performance. Aceleración vigorosa (210 HP Bi-turbo, 250 HP V6). Recuperaciones rápidas para adelantamientos. Caja 10AT optimiza siempre potencia. Dirección eléctrica precisa. Manejo sobresaliente tanto cargada como vacía; sensación ágil, ganando claramente a Hilux en este rubro.
Capacidad Off-road	★★★★★★★★★★ 10/10 – Excelente en terreno difícil. Chasis muy resistente, 4×4 con reductora fiable, gran despeje. Subir, vadear, arrastrar: lo hace sin quejas. Equipada con bloqueo trasero en varias versiones. Solo limitada por susp. dura en rapidez.	★★★★★★★★★☆ 9/10 – Muy capaz también. 4×4 con reductora, bloqueo trasero y asistente de descenso le permiten sortear obstáculos. Sus ángulos y despeje son buenos, aunque un poco menos que Hilux stock. La versión Raptor eleva a 6/5 en off-road deportivo. En general, cumple en trialeras y destaca en dunas rápidas.
Características Tecnológicas	★★★★★★☆☆☆☆ 6/10 – Suficientes pero no punteras. En versiones altas tiene pantalla con CarPlay y algunos gadgets (botón start, cámara retro). Pero se queda atrás frente a la competencia más nueva: faltan asistentes avanzados en varias versiones y la interfaz es básica.	★★★★★★★★★★ 10/10 – Tope del segmento. Desde la pantalla táctil gigante SYNC 4 hasta instrumentación digital, cargador inalámbrico, conectividad total y múltiples ADAS, la Ranger brilla en tecnología. Incluso la base trae sistemas actuales. Marca diferencia notable respecto a Hilux en este aspecto.
Calidad Interior	★★★★★★★★☆☆ 8/10 – Ensamble sólido y materiales duraderos. Interior sencillo pero pensado para resistir maltrato (plásticos rígidos fáciles de limpiar). Versiones altas añaden cuero y detalles agradables. Pocos crujidos con los años. Funcional más que lujoso.	★★★★★★★★☆☆ 9/10 – Gran mejora en acabados. Materiales suaves en puntos de contacto en versiones altas, diseño moderno. Siente un nivel más lujoso que Hilux. Ensamble argentino bien logrado. Quizá no llega a 5/5 porque sigue habiendo bastante plástico (por ser pickup), pero muy cerca del ideal para la categoría.

21. Puntuación Final General y Veredicto Crítico

Toyota Hilux 2025 – Puntuación Global: ★★★★★★★★★☆ (9/10). La Hilux mantiene su corona en los aspectos fundamentales: es prácticamente imbatible en fiabilidad, resistencia y valor de reventa. Estas cualidades le ganan 5 estrellas en lo que más importa para un vehículo de trabajo y aventura a largo plazo. Además, ha mejorado notablemente en seguridad (7 airbags, 5 estrellas Latin NCAP) y ofrece un equipamiento suficiente para la mayoría de usuarios tradicionales. ¿Por qué no alcanza el 5 perfecto? Sus puntos débiles residen en el confort y la tecnología: la marcha rígida, el interior menos sofisticado y la falta de ayudas avanzadas le restan medio punto en un mercado donde el usuario espera más comodidades. En resumen, la Hilux 2025 es la campeona de la confiabilidad y robustez, ideal para quien prioriza un vehículo aguantador por encima de las florituras modernas. Su puntuación refleja que cumple con sobresaliente su promesa central (“Indestructible”), pero cede terreno en las áreas donde la competencia ha innovado más rápido (manejo suave, gadgets). Veredicto: La Hilux es la elección sin riesgo – nunca lo defraudará en terrenos difíciles ni en el balance económico, a costa de sacrificar algo de confort y modernidad.

Ford Ranger 2025 – Puntuación Global: ★★★★★★★★★★ (9.50/5). La Ranger de nueva generación se posiciona prácticamente en la cima del segmento en casi todos los apartados: desempeño, comodidad, seguridad, tecnología… obteniendo puntuaciones máximas o muy cercanas en ellos. Su conducción y equipamiento best-in-class le hacen ganar los elogios (y estrellas) como una pickup integral que sirve tanto para el trabajo como para la vida diaria moderna con excelencia. El ligero descuento en la calificación viene por el factor confiabilidad/durabilidad a ultranza, donde aún debe demostrar ser tan intachable como su rival (y su imagen de reventa ligada a ello). Veredicto: La Ranger 2025 es la nueva referencia en prestaciones y versatilidad. Es la camioneta para quien quiere todo: fuerza bruta cuando se necesita y comodidad digna de auto de lujo el resto del tiempo. Representa un cambio de paradigma en el segmento, acercando la experiencia de manejo a la de un SUV sin resignar las capacidades de pickup. Su calificación casi perfecta denota que Ford ha hecho los deberes – si a largo plazo prueba ser igualmente confiable, podría aspirar al 5/5. Hoy por hoy, se queda a un suspiro de la puntuación ideal principalmente por la incertidumbre de “lo nuevo”. Pero sin duda, es la opción recomendada para quienes quieran disfrutar al volante sin dejar de poder cargar arena o trepar un cerro llegado el caso.

Conclusión crítica: No existe una “mejor pickup” universal, sino la mejor para cada necesidad. La Hilux 2025 es la apuesta ganadora para el trabajo incansable y el patrimonio seguro; la Ranger 2025 es la apuesta ganadora para el desempeño superior y el confort de última generación. El experto concluye que, salvo que su escenario de uso sea extremadamente sesgado hacia uno u otro extremo, cualquiera de las dos lo satisfará plenamente, con la salvedad de conocer y aceptar las diferencias mencionadas. Si puede, ¡pruebe ambas! Sentirá en minutos las diferencias: la decisión final muchas veces se reduce a qué sensación al volante lo convence más. Y en ese sentido, hoy la balanza podría inclinarse a favor de la Ranger para el conductor que busca innovación, o permanecer firme con la Hilux para el que busca esa confianza tradicional. Usted, como comprador informado, tiene ahora el panorama completo para elegir con criterio. ¡Buena ruta con la que decida!